Pierce Brosnan se pronuncia con desdén sobre quién debería ser el nuevo 007
El actor que diera vida a James Bond en los noventa ha dejado claro lo poco que le importa la decisión y habla con frialdad del papel y su futuro actor.
Sigue la búsqueda de un nuevo 007 tras el adiós de Daniel Craig y el último en pronunciarse sobre el futuro del personaje ha sido Pierce Brosnan, quien interpretara al icónico espía entre 1995 y 2002. El actor ha sido sorprendido con la cuestión en una entrevista para GQ en la que hasta parecía molesto con el tema. "¿Que quién debería hacerlo? No me importa, aunque será interesante ver a quién atrapan. Quienquiera que sea, le deseo suerte".
Durante el intercambio con la publicación, el actor también reconoce haber visto las entregas más recientes de la saga, pero tampoco se puede decir que le hayan fascinado, al menos No Time to Die, de la cual ni siquiera recuerda el nombre. "Vi la última película y también vi Skyfall. Me encantó Skyfall. Con la última no estoy tan seguro. Daniel siempre pone el corazón. Es muy valiente y muy fuerte, pero...", acaba diciendo Brosnan. La propia revista aclara que dejó el pensamiento en el aire, no queriendo hacer más sangre.
No es la primera vez que Brosnan se pronuncia con desdén sobre la serie, pues siempre ha reconocido que no le gusta recordar aquella época y que, si bien admite que le vino bien y le abrió puertas, odiaba muchas cosas de interpretar a Bond, como todas esas "frases ingeniosas" que acostumbra a adorar la gente. Para el actor, ni su actuación hizo justicia al personaje, ni el personaje le hacía justicia a él, así que detesta que le recuerden como tal.
Es curioso el caso de Brosnan, pues muchos le recordamos como uno de los rostros más representativos de 007, pero sólo hizo de Bond durante siete años. Siete años en los que le dio tiempo a hacer, eso sí, algunas de las mejores películas de la franquicia. Fueron cuatro, para ser exactos: GoldenEye, El mañana nunca muere, El mundo nunca es suficiente y Muere otro día. Sin embargo, esta semana hemos tenido constancia de que ahora los productores del personaje quieren un compromiso de diez años por parte de su próxima estrella.
Una década en la que siempre tendrían prioridad en el calendario y la agenda del elegido. Que se lo digan a un Daniel Craig que apenas se ha prodigado durante los cerca de quince años que ha durado en su piel, durante los cuales se ha lamentado en más de una ocasión. ¿Podrán los actuales candidatos a 007 (Idris Elba, Tom Hardy, etc) poner su vida en stand by durante tanto tiempo? Veremos, aunque parece que la elección del próximo Bond parece ir para largo.