Cintas magnéticas como alternativa a la Nube, seguridad barata ‘vintage’ para datos
La cinta magnética es una forma relativamente barata de almacenar mucha información y sin correr el riesgo de perder datos.
Si decimos cintas magnéticas, seguro que lo primero que viene a la cabeza son las cintas de cassette o de VHS (y Beta) que la década de los 80 popularizó y convirtió en iconos populares para siempre. Estos medios de almacenamiento analógico fueron reemplazados por otros más modernos y seguros como el almacenamiento óptico -CD, DVD- o el flash (tarjetas SD, llaves USB).
Y de repente llegó la Nube y su ‘mágico’ concepto de guardar datos en un espacio no físico que hace que no tengas ni que llevar encima un USB. Por ende, en pleno 2021 el concepto de cinta magnética suena a retro, desfasado y nada fiable, ya que por eso fue sustituido como medio de almacenamiento. Pero… ¿y si os decimos que en 2021 se superó el récord de 2019 en cuanto a la venta de cintas magnéticas como alternativa a la Nube?
Cintas magnéticas para guardar datos
En los discos duros mecánicos, el magnetismo es el fenómeno utilizado para almacenar los unos y los ceros, pero el magnetismo también es fundamental en las cintas de VHS y de cassette. Para muchos usuarios, los discos duros han sido sustituidos por unidades SSD, mientras que el acceso a las películas y la música se realiza a través de diversos servicios de streaming. Sin embargo, en los centros de datos son habituales tanto los discos duros como las cintas magnéticas. Ahora se informa que esta última categoría vendió una cantidad récord en 2021.
Según el medio sueco Sweclockers, el año pasado se vendieron unos 150 millones de terabytes de capacidad, que las empresas utilizan como respaldo ante posibles ataques de extorsión. HPE, IBM y Quantum, a través de la organización Ultrium LTO, son los responsables del informe. LTO son las siglas de Linear-Tape Open y es el estándar utilizado para muchas cintas magnéticas y sistemas asociados.
En 2021 se vendieron 148 exabytes (148.000.000 de terabytes) de capacidad comprimida, un 35% más que en el anterior año récord, 2019. En 2020, se vendieron algo más de 100 exabytes. Sin embargo, con más capacidad por unidad de almacenamiento, el número de cartuchos vendidos es menor que en 2019.
Alternativa barata y segura al guardado en la Nube
Las cintas magnéticas cuentan con especificaciones de capacidad en versiones comprimidas y sin comprimir, y la última generación de productos LTO 9 ofrece 45 y 18 TB de datos en un solo dispositivo de almacenamiento, respectivamente. El principal uso de la cinta magnética es el de los archivos digitales, que a menudo son orquestados por sistemas totalmente automatizados. La cinta magnética es una forma relativamente barata de almacenar mucha información y de hacerlo de forma que no se corra el riesgo de perder los datos con el paso del tiempo, algo que puede ocurrir con los discos duros y las unidades SSD sin alimentación.
Según Phil Goodwin, Director de Investigación de la empresa de análisis IDC, “La cinta LTO es posiblemente el método más sencillo y de menor coste para conseguir las mejores prácticas de recuperación de ransomware. El ransomware y el malware son amenazas que no van a desaparecer. La cinta magnética es una tecnología establecida, entendida y probada que puede ser una herramienta inestimable para derrotar al ransomware”.
Hackear un VHS
Goodwin subraya que la amenaza de los ataques de ransomware hace que sea más importante tener copias de seguridad. Los ataques de extorsión son algo que ha aparecido mucho en las noticias en los últimos años y dice que eso no cambiará en el futuro, lo que hace que la cinta magnética sea una forma rentable y probada de prepararse para posibles ataques.
Las cintas magnéticas son cintas enrolladas y magnetizadas que se guardan en una caja de plástico que recibe el nombre de cartucho y funcionan como las antiguas cintas de cassette. Por tanto, hackear la información contenida en ellas requeriría de una operación física, de literalmente copiar las cintas igual que cuando copiabas un VHS o una cassette en un reproductor de doble pletina.
Además, el proceso de lectura es muy lento y para acceder a ciertos datos se debe enrollar y desenrollarla, lo que implica tiempo. El almacenamiento en cinta que propone IBM no es exactamente la misma tecnología conocida en los vídeos VHS, sino una evolución gracias a las aportaciones hechas desde campos como la física, el magnetismo, la óptica o la química. La multinacional subraya ventajas de su uso, como su coste asequible en relación a otras tecnologías como Flash o discos de almacenamiento externos, su ciber-resiliencia, la eficiencia energética y su potencial escalabilidad, en comparación con discos duros.
De esta forma, y aunque la evolución de la Nube sigue siendo la tecnología imperante en el futuro con cada vez menos hardware al que vamos, es muy curioso que en pleno siglo 21, las versiones mejoradas de esas cintas magnéticas tan ‘retros’ sean una de las opciones más baratas y seguras de cara a la seguridad de los datos digitales.
https://www.europapress.es/portaltic/sector/noticia-visita-laboratorio-ibm-research-zurich-donde-crea-futuro-tecnologias-informacion-20211129102009.html
https://www.sweclockers.com/nyhet/34167-ransomware-risk-tar-forsaljningen-av-magnetband-till-rekordnivaer