Metro: Exodus, análisis next gen. La mejor manera de vivir el mundo post-apocalíptico

«Para llegar a tu objetivo, para poner fin al viaje, tienes que dejar de caminar», Metro 2033, Dmitry Glukhovsky.

Hay series que no pretenden reinventar géneros, simplemente narrar buenas historias, construir experiencias eficaces y, si es posible, aportar algo nuevo sin salirse de lo que el público demanda. La saga Metro lleva haciendo eso mismo desde aquél Metro 2033 primeramente exclusivo de PC y Xbox 360 en 2010 que supuso el debut del estudio ucraniano - maltés 4AGames -fundado por profesionales con experiencias en títulos como S.TA.L.K.E.R.: Shadow of Chernobyl.

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Disparos (y acertijos) en las Tinieblas

Sin salirse de los esquemas de un buen FPS, en 4AGames supieron entregar un shooter con una ambientación sencillamente única, claustrofóbica y post-apocalíptica. Metro 2033 tenía sus bugs y su IA cuestionable -el punto débil de la saga-, pero el detalle de los entornos, los elementos de acción, de ‘stealth’ y hasta de terror conformaron una experiencia que enganchaba gracias a su preciso control y una trama que se tomaba su tiempo y creaba su propio tempo narrativo, basada en la obra del escritor ruso Dmitry Glukhovsky.

Unos años después, Metro: Last Light, co-escrito por Glukhovsky, continuó la saga con la misma mezcla jugable. Y los usuarios de sistemas Sony pudieron re-descubrir el primer Metro gracias a los estupendos ‘Redux’ de ambos para los sistemas de la pasada gen.

Y ya el pasado 2019, la saga llegó a su (aparente) fin con Metro: Redux, un título que hace poco ha tenido el tratamiento que promete seguir siendo popular al menos un par de años más de esta nueva Gen, con un parche para PC, PlayStation 5 y Xbox Series S/X que aprovecha la potencia Next Gen para soltarnos un mega-espectáculo gráfico y técnico que nos recuerda que sí, que hemos cambiado ya de generación.

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Metro: Exodus REDUX

Dado que el juego permanece exactamente igual en su jugabilidad, historia, gunplay y duración, os recomendamos leer el análisis que publicamos hace dos años con motivo de su estreno para conocer lo que el cierre de la saga ofrece. En este análisis nos vamos a centrar en los cambios, que son puramente a nivel visual en general, y un poquito en el control en el caso de PS5.

Estrenado hace un mes en forma de Enhanced Edition para PC, este parche ‘next gen’ ha llegado a PS5, Series S y Series X. Y su principal novedad está en un nuevo sistema de iluminación, rehecho por completo para aprovechar la potencia actual. No es que el Metro Exodus original se viese mal, al revés, era una bestia gráfica, pero la potencia de Xbox One y PlayStation 4 lo ‘condenaban’ a un tope gráfico de 30 frames y 1080p. En PS4 Pro y One X la resolución subió un poco, pero aún así el PC seguía siendo la mejor forma de aprovechar el apartado gráfico del juego -y reducir sus largos tiempos de carga en consola.

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Y es que la principal novedad en Exodus era que salíamos al fin de los oscuros túneles de metro, para encontrarnos en un mundo lleno de colores, vida, estaciones del año que se suceden y ciclos día-noche en una ‘Road movie’ a bordo de un tren hacia la libertad. Esto le dio a A4Games la opción de lucirse creando entornos enormes abiertos pero siempre dentro de un estilo de libertad guiada.

4K, 60fps, Ray Tracing

Si habéis visto este vídeo en la comparativa de Digital Foundry, ya tenéis una idea de cómo ha mejorado Exodus: No es que la versión normal no tuviese Ray Tracing, sino que el trazado de rayos se implementó de forma apresurada en el Metro Exodus original. Por ejemplo, en el juego original, una habitación se oscurece artificialmente mediante el mapeado de cubos o la oclusión ambiental; en la Enhanced Edition, una lámpara puede recoger el tono verde de la mesa sobre la que está puesta y encendida, proyectando ese tinte verde en la pared que hay detrás.

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Esta tonalidad también puede verse proyectada en elementos y objetos como unas llaves inglesas de la pared contigua. Y en el caso de un pasillo que recibe la fuente de luz de la puerta abierta de una habitación, en el original podríamos ver las zonas en las que en teoría no llegaría la luz del sol, pero en la Enhanced no, estas zonas fuera de los rayos de sol permanecen oscuras, al punto de necesitar encender la linterna para ver algo en ellas.

Al comparar ambas versiones, queda de manifiesto que en la Enhanced Edition la fuente de luz procede realmente de la propia lámpara y no de las sombras colocadas a su alrededor. Esto se traduce en que la luz y el sistema de iluminación se comportan de la forma más realista y física posible. El modo en que la luz adopta los colores de las superficies en las que rebota y luego la dispersa, cambiando el estado de ánimo y la atmósfera de cada habitación y zona es notablemente realista. Y ver la luz del sol en los escenarios exteriores moviéndose y creando / borrando sombras es todo un placer.

Lo que el nuevo sistema de iluminación ayuda también a crear es una atmósfera nueva en la que hay más contrastes claro-oscuros entre zonas iluminadas y zonas oscurecidas. Además de potenciar mucho más la ya de por sí estupenda evolución en cuanto a las estaciones que vamos viendo en el juego, de la nieve al calor, de la primavera al otoño. Y todo a 4K y 60 frames constantes, con algunas bajadas en el rendimiento en las zonas más exigentes a nivel de rendimiento y postprocesado, pero muy puntuales.

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Sí, también aprovecha el DualSense

Una pequeña sorpresa, si tienes la consola de Sony -o al menos un PC potente y acceso a un mando de PS5-, podrás usar las funciones únicas del DualSense en Metro: Exodus, que al igual que en otros FPS como CoD Cold War, los gatillos obedecen a las diferentes armas que empuñamos en el juego, y se aprecia perfectamente a través de su resistencia cuando estamos disparando una ametralladora con cuando pasamos a usar la escopeta.

La vibración que recorre todo el mando también se deja sentir en momentos como cuando unos mutantes nos están acechando, advirtiéndonos el mando de que algo pasa por ahí como si fuera un escalofrío.

Pero no se queda ahí la cosa, sino que el DualSense nos hace reconocer también la diferencia en cuanto a los terrenos sobre los que pasamos. La vibración es muy suave si caminas sobre la nueve, pero si estás corriendo por dentro de un edificio abandonado, los ecos que provocas hacen reverberar el mando en tus manos.

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Y como añadido final, las versiones Enhanced para los nuevos sistemas traen consigo los dos DLC lanzados por A4Games, The Two Colonel's and Sam's Story, conformando el paquete definitivo de Exodus sin duda.

*Nota: El análisis lo hemos hecho sobre la versión de PlayStation 5.