AVerMedia PW315, análisis. Una webcam todoterreno
Os contamos nuestras impresiones finales tras usar la nueva webcam de AVerMedia, PW315. La todoterreno del fabricante taiwanés ya está disponible.
La pandemia de COVID-19 en la que nos encontramos ha impulsado el trabajo desde casa. Reuniones, colaboraciones… lo que antes se hacía en persona ahora ocurre tras la pantalla. Por ello, no es difícil imaginar que las principales compañías del sector impulsen su trabajo en el campo audiovisual. AVerMedia, el fabricante taiwanés, ha hecho lo propio recientemente con dos nuevos modelos de cámara centrados en mejorar nuestro día a día.
Más allá de las funciones del modelo PW310P, que podréis comprobar en este enlace, hoy nos centraremos en la webcam que hemos podido utilizar estos últimos días. El enfoque de la PW315 va más allá de un uso básico: ofrece funciones dedicadas a aquellos que quieren crear contenido y necesitan mayores prestaciones. Así son nuestras impresiones.
Paquete sencillo: conectar y utilizar
Con el paquete de la webcam en la mano, conoces el enfoque que AVerMedia quiere impregnar con esta cámara. Se conforma de un sencillo embalaje de cartón en el que se encuentra la cámara y un manual de instrucciones de uso rápido. No necesita nada más. Simplemente colocas la cámara en tu puerto USB (compatible desde 2.0) y ya está listo para funcionar.
La cámara al tacto da buena sensación. A los lados tiene dos dorsos circulares de un material que imita el aluminio, donde se encuentran ambos micrófonos. La solución encontrada para la base es sencilla. Al abrirlo, verás que la cámara está sobre un cuadrado que se puede desplegar hacia atrás, con lo que adaptarla al tipo de monitor (o cornisa) donde la enchufes. El sobrante tiene forma de L para engancharla sobre la pantalla, junto al logotipo de la compañía.
La base plegada cuenta con una pequeña rosca en la parte inferior sobre el que colocar un trípode, por lo que no necesita estar siempre a la parte superior del monitor. Tú eliges dónde agarrarla. En la parte derecha del frontal vemos una pestaña que puedes deslizar hacia el centro del objetivo a modo de ventana de privacidad. La cámara permite ajustar su posición 360º y los picados gracias a la movilidad de la base.
PW315 en la práctica
Debemos señalar que las compatibilidades indicadas en la caja se extienden en la práctica. Skype, Zoom y Microsoft Teams son solo el trío inicial del resto de programas por videoconferencia. De hecho, nuestras pruebas se han realizado en mayor parte por Discord, donde funciona a la perfección, además de Google Hangouts.
Como decíamos, la cámara PW315 es tan sencilla de instalar como de iniciar su uso. No requiere de controladores adicionales. Lo enchufas y ya está preparado para su uso, lo que agiliza la conectividad entre varios ordenadores o plataformas con acceso USB. Si prefieres ajustar opciones como el brillo o el contraste, la compañía recomienda instalar el programa CamEngine, disponible en el soporte oficial.
Durante las sesiones de vídeo nos encontramos con dos elementos a destacar: el campo de visión y la nitidez. Su lente gran angular de 95 grados permite abarcar un amplio rango de visión. En las imágenes no se nota un campo de profundidad exagerado, ni mucho menos. El objetivo se centra en la persona y no pierde demasiado detalle en la parte trasera. Por otro lado, los 1080p de resolución se notan para bien; lo mismo con el rendimiento a 60 imágenes por segundo.
El único elemento negativo es que necesitas acondicionar la iluminación de tu habitación. La PW315 no incorpora anillos de luz, y en entornos apagados pierde músculo. En cualquier caso esto tiene fácil solución, ya que los resultados con buena luz son adecuados respecto a lo que esperamos de ella. Algo similar ocurre con los micrófonos, que mantienen un nivel correcto para videoconferencias, pero no cuando buscas grabar un podcast o locutar una pieza (o streaming).
Conclusiones
PW315 es una webcam que entra en la denominación todoterreno. Cabe en la palma de una mano, es sencilla de utilizar y ofrece unos resultados bastante buenos en todos los sentidos. Quizá se quede un poco atrás para quienes quieren retransmitir o crear contenido, pero cumple con muy buena nota las funciones básicas en un entorno laboral o estudiantil. Aunque pierda fuerza en entornos poco iluminados, la nitidez y el campo de visión son dos factores bastante positivos y que ponen en alza su valor.