Scott Pilgrim, el poder del amor y del beat'em up
La cultura videolúdica construye el realismo mágico en la epopeya de un héroe que lucha por amor.
Érase una vez un muchacho que había descubierto a la chica de sus sueños en el sentido más literal del término. Ambos se amaban, pero su historia no sería nada fácil: para estar juntos, el joven debía derrotar a los siete ex novios malvados de su dama. Esta es la historia de Scott Pilgrim, protagonista de la homónima novela gráfica de Bryan Lee O’ Malley. Dicha obra tuvo su propia adaptación en el cine: Scott Pilgrim contra el mundo. Una historia tan empapada de cultura videolúdica, y cuyo desarrollo se asemeja a la narrativa de un juego de lucha, debía contar también con su propia versión en el ocio digital. El próximo 14 de enero de 2021 llega Scott Pilgrim vs The World: The Game Complete Edition, con tres ediciones especiales en físico. Hoy en MeriStation hablamos de un héroe movido por amor cuya epopeya va más allá del clásico “el héroe siempre se queda con la chica".
Los juegos de lucha como maestro
Si echamos un vistazo a los beat’em up clásicos, el tópico de la damisela en apuros está más que presente: Double Dragon, Final Fight, The Revenge of Shinobi… En ellos, nuestro héroe se abría paso a golpes entre hordas de enemigos para rescatar a una chica que solía su novia. Por supuesto, han existido variaciones que han desafiado dicho convencionalismo: en Streets of Rage 2 vamos al rescate de Adam Hunter y en River City Girls son ellas las que van a salvar a sus respectivos novios.
La narrativa de Scott Pilgrim aúna dos fantasías: el héroe que derrota a sus rivales y el chico con pocas habilidades sociales que acaba conquistando a una hermosa y misteriosa joven. Scott dista mucho de ser un triunfador: desempleado, con problemas económicos, socialmente torpe. Su constitución débil no se corresponde con la imagen común de los musculosos protagonistas de juegos de lucha. Y, sin embargo, Scott Pilgrim consigue derrotar a los siete poderosos ex novios de su amada Ramona Flowers y tiene su final feliz al lado de su amor.
Tanto el cómic como la cinta se mueven en un realismo fantástico que aúna la vida cotidiana y de Scott e incorpora elementos fantásticos que proceden de la cultura videolúdica, del manga y el cómic estadounidense. En la película, observamos onomatopeyas en pantalla, como si el joven estuviera dentro de un cómic. La intencionada sobreactuación de los actores evoca la expresividad de personajes animados.
En NPR, profundizan sobre cómo Bryan O’Malley se inspiró en las dificultades económicas que atravesaba como dibujante de cómics y músico. Al igual que Scott, vivía en Canadá en un humilde hogar con un compañero de piso gay, el cual inspiró el personaje de Wallace. Pero la experiencia biográfica propia no fue el único ingrediente que utilizó para crear a Pilgrim: “Tenía la sensación de que si una vez me metía en una pelea, tendría la habilidad de contraatacar, basándome en las partidas que he echado a Street Fighter durante tantos años de mi vida. Es como si de verdad hubiera aprendido artes marciales”.
El autor, que también menciona Mortal Kombat como uno de sus títulos predilectos, transmite a través de Scott y Ramona la fantasía de poder ejecutar combos y movimientos especiales a la perfección, aprendidos a través del entrenamiento virtual. No obstante, los combates de Scott Pilgrim no sólo sirven a un propósito estético o argumental, sino que son la alegoría de la superación de dificultades: “Estos combates físicos son, más o menos, convertir en algo literal las cosas metafóricas y emocionales que atravesamos en una relación". La pareja de Scott y Ramona no sólo se enfrenta a una serie de villanos, sino que superan juntos los traumas del pasado de ella y las inseguridades de él.
La cultura videolúdica como simbolismo
La torpeza de Scott Pilgrim también tiene su origen en el manga, como relata O’Malley en Anime News Network: “Scott Pilgrim se inspira un poco en el shonen, y el protagonista del shonen tradicional es más o menos así: tontorrón y cabezón. Y descubrí lo divertido y fácil que es escribir personajes que son muy tontos (ríe)”. En la ComicCon de 2017, el autor explica cómo Ranma ½ inspiró su obra: “Era muy fan del anime desde joven, y algunos de mis artistas favoritos de hoy en día son japoneses, como Osamu Tezuka o Takahashi Rumiko. Cuando descubrí Ranma ½, de Takahashi Rumiko, tenía unos 17 años, seguramente. Cuando empecé a crear Scott Pilgrim, quería hacer algo parecido a la obra de Takahashi, transmitir en Canadá esas sensaciones que transmite Ranma ½”. Ranma y Scott Pilgrim tienen muchos puntos en común, entre los cuales destaca el equilibrio entre combates épicos y dilemas sentimentales.
Scott Pilgrim, además, es aficionado a los videojuegos. Como hemos mencionado anteriormente, la cultura videolúdica sirve tanto para dibujar el costumbrismo y el realismo mágico a través del cual se narra su historia. Tanto en la película como en el cómic le vemos jugar a videojuegos: frecuenta un salón recreativo con Knives Chau, y también es asiduo a Sonic & Knuckles o Monster Hunter Freedom, entre otros títulos. Asimismo, el propio Scott ve situaciones en su vida presentadas como momentos propios de un videojuego. Antes de su encuentro con Envy Adams en Scott Pilgrim & la tristeza infinita, ve un punto de guardado similar a los de Final Fantasy VII. Y, por supuesto, no podemos obviar la estructura de los combates entre Scott y sus enemigos: tras cada lucha, el rival se desvanece en píxeles y deja tras de sí una cantidad de monedas. Las subidas y bajadas de nivel de personaje, con su correspondiente modificación de atributos como valor, representan su crecimiento personal. Además, recibe nuevas armas cuando descubre el poder del amor o el respeto a uno mismo.
El crítico Samuel Loveland analiza el simbolismo en Scott Pilgrim: “Cuando alguien se mete en una nueva relación y conoce al ex de esa persona, se enfrentan a dicha historia. No de forma literal, pero sí muy auténtica. Esa persona debe ponerse al frente de su valor y afrontar la idea de que el ex pueda ser mejor que ellos”. Asimismo, a lo largo del cómic observamos más elementos simbolistas: el chip que lleva Ramona en la nuca es la representación de la dependencia emocional que la ata a Gideon, el ex maltratador que busca controlar su vida e impedir que sea feliz.
La auténtica lección de Scott Pilgrim
Aunque la obra de Scott Pilgrim haya sido criticada por su representación femenina, hay una valiosa lección sobre el amor y la madurez que se esconde detrás de la épica de derrotar a los exes. El mensaje no es el superficial “el héroe se queda con la chica”; Scott aprende a asumir responsabilidades emocionales, mientras que Ramona consigue superar la dependencia emocional que coarta su libertad y felicidad.
Tanto el cómic como la película arrancar con un Scott que está empezando a salir con una chica de 17 años llamada Knives Chau, a quien está utilizando para superar su ruptura con Envy Adams, el primer gran amor del joven. Después, cuando Pilgrim conoce a Ramona, se enreda en un triángulo amoroso mal gestionado y cuando abandona a Knives lo hace sin ningún tipo de comtemplación ni honestidad. Por supuesto, las consecuencias de la irresponsabilidad de Scott le acaban pasando factura durante su batalla final con Gideon y le llevan a morir. Tras revivir con una vida extra, Scott aprovecha mejor su segunda oportunidad: pide perdón a sus compañeros musicales y se reconcilia con sus antiguos amores.
Así, Loveland describe el auténtico mensaje de Scott Pilgrim: “Nadie debería salir con otra persona porque le convenga en ese momento, o para evitar estar solo. Es justo la trampa en la que cae Scott cuando empieza a salir con Knives; una trampa muy común para quienes, con el corazón roto, huyen hacia los brazos de otra persona, lo cual es el inicio de una relación que saben que no irá a ningún lado. Le llamamos 'parche' y hace daño a los demás. Normalmente, la persona que usa a otra de parche no es consciente de lo que hace, puesto que actúa desde el instinto y el miedo a estar sola”.
Del cómic al videojuego
La llegada de Scott Pilgrim al ocio digital era un sueño cumplido y una adaptación casi obligatoria si consideramos la naturaleza de la obra de O’Malley. El creador ya había rechazado una propuesta por parte de Telltale Games, como él admitió en su cuenta de Twitter: “Telltale quería hacer Scott Pilgrim, pero les dije que no. No me lo imagino como un juego de aventura, con todos mis respetos al estudio”.
Sin duda, la aventura narrativa tal vez no sea el formato más adecuado para el héroe enamorado. Por supuesto, la historia de amor entre Scott y Ramona tiene mucho que ver con decisiones, errores y consecuencias, pero el camino que ambos recorren no está narrado a través de opciones de diálogo, sino de puñetazos, patadas y golpes especiales. Ubisoft y Universal Interactive escogieron la fórmula ideal de un videojuego de Scott Pilgrim: el beat’em up.
Bill Kispert, director general y vicepresidente de Universal Interactive, contó en IGN el entusiasmo que tenía el equipo por el proyecto: “Todo el equipo de la división de videojuegos de Universal está enganchado a Scott Pilgrim desde la primera lectura de la novela gráfica y del guión de la película”. En Game Informer, además, leemos cómo Bryan O’Malley se implicó en la adaptación videolúdica de su obra, para lo cual aportó bocetos que servirían al diseño de personajes y de las escenas dentro del juego. Asimismo, en su Tumblr podemos observar parte de su trabajo, en el que se detallan los movimientos de los personajes jugables y jefes finales.
La historia de Scott Pilgrim VS The World: The Game se despegaba un poco de la premisa original de O'Malley en favor de crear un beat’em up disfrutable. En lugar de centrarse en Scott como único protagonista, podíamos escoger tanto a él como a Ramona y demás personajes del cómic: Kim Pine, Stephen Stills y —a través de DLCs— a Knives Chau o Wallace. Cada uno con sus características y movimientos propios, se lanzaban al periplo callejero de derrotar a los malvados ex novios de Ramona Flowers, teloneados por su correspondiente legión de secuaces.
Tras su lanzamiento para PS3 y Xbox 360, Scott Pilgrim no apareció más en escena hasta ahora. No obstante, la noticia de su próxima reedición ha alegrado tantos a amantes de la novela gráfica, película y de los videojuegos de inspiración retro. CBR recuerda con cariño la adaptación de la obra de O'Malley: “El resultado es un juego que parece la versión arcade perdida de un beat’em up de Scott Pilgrim que se pudo haber lanzado en los 90. Logró trascender la calidad mercenaria de muchos juegos licenciados. Llegó en el momento perfecto para los fans del cómic, ya que el último volumen se lanzó el mes antes del estreno de la película y de la adaptación videolúdica. Su estética retro y su gameplay tan sólido lo hizo muy accesible para el público que desconocía el cómic y la película”.
En esta nueva generación, viviremos de nuevo el viaje épico y romántico de Scott Pilgrim y Ramona Flowers. Una vez más, el poder del amor se impondrá contra ex parejas malvadas y los enemigos que habitan en nuestro corazón.
- Acción
Juega con tus personajes preferidos: Scott Pilgrim, Ramona Flowers, Knives Chau, Stephen Stills y muchos más. Sube de nivel, aprende nuevas habilidades, desbloquea objetos y modos secretos, invoca a poderosos aliados y mucho más.
