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¿El futuro del juego Flash?

Kongregate, en dificultades. Despidos y cierre a nuevos juegos

La referencia durante muchos años de juegos en Flash atraviesa tiempos complicados que haven replantear su futuro

Kongregate, en dificultades. Despidos y cierre a nuevos juegos

Malos tiempos para la página que ha sido referencia del juego Flash en navegadores durante más de una década. La compañía ha anunciado que no incorporará nuevos juegos a su catálogo, dejándolo en una cifra superior a los 128.000 juegos y fijando como histórico el nombre de Medieval Chronicles 8 (Part 2) el último juego que se incorporó al catálogo. El anuncio viene con un poco edificante conjunto de cambios, que implica cierre definitivos de algunos foros y la cancelación de decenas de miles de chats, dejando sólo apenas 20 juegos de los más populares todavía con chats específicos. Y para terminar de pintar un cuadro bastante oscuro, algunos trabajadores han aparecido en twitter comentando que han sido despedidos sin previo aviso -la compañía ha pedido disculpas por ello en un comunicado a Forbes-.

Una muerte anunciada

Kongregate es un sitio de referencia para los que gustan de jugar en el navegador, un clásico de estudiantes y trabajadores ociosos en el que han aparecido juegos realmente meritorios e importantes pese a las limitaciones técnicas de un sistema que tiene los días contados una vez que Adobe retire el soporte este 2020. La tecnología ya está seriamente limitada en los navegadores, su hábitat natural, y una vez que se de ese paso, la única forma de jugar a estos juegos será instalando aplicaciones como Flashpoint, la iniciativa para salvaguardar y documentar esta parte de la historia del videojuego, en serio peligro de perderse para siempre.

Ampliar

La compañía afirma que va a cambiar su modelo de negocio a la producción propia de juegos, que es por lo que han reducido al mínimo la cantidad de recursos que dedicarán a Kongregate.com, de modo que todo el sistema de soporte quedará también fuertemente reducido. La comunidad ha recibido la notificación con fatalismo y resignación, ya que era algo que se veía venir desde el mismo momento en el que Adobe anunciaba la guadaña para el histórico sistema, parte imprescindible de la historia de internet pese a las críticas feroces de figuras como Steve Jobs, que llegó a prohibirlo en iPhone.