Cómo iniciar Microsoft Edge siempre en modo privado
Te contamos cómo iniciar sesión dierectamente en modo incógnito dentro del navegador de Microsoft.
Todos los navegadores que usas tienen dos caras. La primera es la que ves, la clásica, la que todo el mundo utiliza, donde pones una contraseña y te dice que te la recuerda y lo hace. La otra es la más oscura, no solo por el fondo, sino porque es la que no deja huella de tu estancia en un site ni recuerda contraseña, como si no hubiera pasado nada. Esta segunda es el modo incógnito que también está en Microsoft Edge. Si este se ha convertido en tu software favorito te contamos cómo puedes entrar en Edge siempre desde el modo privado.
Así se usa Edge desde el modo privado nada más entrar
Microsoft se ha esforzado mucho para crear su nuevo navegador Edge. Su cambio supuso una mejora frente a Explorer, pero no ha sido hasta este año cuando los de Redmond lo Han puesto al nivel de sus competidoras. Y es que su arquitectura basada en Chromium me ha dado alas para ser uno de los softwares más interesantes para navegar. También dispone de modo incógnito, o InPrivate como lo llaman ellos, el cual se puede ejecutar al hacer doble clic en su acceso directo.
Los pasos son de lo más sencillos y todo comienza desde el propio Escritorio. Todo empieza colocando un acceso directo en el Desktop y desde ese punto tendrás que hacer los siguientes puntos:
Y listo,ahora empezarás todas tus sesiones de Microsoft Edge en su modo InPrivate para no dejar huella mientras navegas por la Red. En caso de que quieras revertir el efecto tienes que seguir los pasos anteriores pero en este caso solo tendrás que borrar la parte de ‘inprivate’ que agregaste para habilitarlo.
¿Qué ganas con el modo privado?
No es la primera vez que te hablamos de los modos privados o seguros de los navegadores. Como usuario los tienes que conocer, especialmente si trabajas con equipos que no son tuyos. Este modo te quita muchos sustos, sobre todo porque tus sesiones siempre se cierran una vez cierras toda la ventana. De este modo, no solo el navegador no recordará tu historial ni las contraseñas, si no que nadie podrá usar tus cuentas a placer si te olvidaste de cerrarlas.