Crean un sensor biométrico que lee la huella, venas y el pulso cardíaco a la vez
Una compañía japonesa ha creado un sensor tan fino como una hoja de papel y capaz de leer a alta velocidad.
La Autenticación Biométrica o Biometría Informática es la aplicación de técnicas matemáticas y estadísticas sobre los rasgos físicos o de conducta de un individuo para su verificación de la identidad. Esto es lo que está detrás de los llamados sensores biométricos que conforman los sistemas de seguridad actuales en dispositivos como smartphones, tablets u ordenadores. En el mundo de la telefonía móvil, desde que Apple lo empezó a implementar en sus iPhone, el lector de huellas se ha convertido en el sistema biométrico de seguridad más utilizado.
Leer Señales o leer Información Biométrica
De hecho la tecnología ha propiciado más, como el escáner facial o el lector de iris, todos ellos diseñados para usar elementos tan personales como la huella de identidad, los rasgos del rostro o el iris del ojo del usuario. Y todos ellos requieren de un paso activo como poner el dedo en una zona o apuntarse con el sensor a la cara o al ojo. Pero incluso en los más avanzados hay que elegir cual usar, y aunque podemos combinarlos y que el móvil use el lector facial y el sónico de huella bajo pantalla, siempre será por separado.
Y es que los lectores de este tipo se crean para leer o bien información biométrica como las huellas dactilares y las venas, o bien para detectar señales biométricas como el pulso cardíaco de una persona. Pero, ¿y si se pudiese concebir un dispositivo capaz de leer una información biométrica y detectar una señal biométrica a la vez? Existe, y lo han creado los japoneses.
Tan fino como el papel
Japan Display, una compañía conocida por lograr implementar resoluciones enormes dentro de pantallas reducidas -por ejemplo una LCD de sólo 17 pulgadas capaz de mostrar contenidos a 8K-, ha creado el primer sensor de imagen ultrafino del mundo que es capaz de medir y leer huellas, venas y el pulso de una persona, todo a la vez. El sensor, que apenas tiene el grosor de una lámina de papel, puede leer a alta velocidad y manejar imágenes de alta resolución, lo que según la compañía lo hace perfecto para aplicaciones de seguridad y dispositivos wearables.
El sensor, que colocado en la muñeca parece fundirse con la piel, ha sido creado integrando “transistores de polisilicona de baja temperatura del grosor de una película fotográfica con fotodetectores orgánicos de alta sensibilidad y alta movilidad”, todo ello ocupando apenas 15 micrómetros de ancho y siendo ligero y flexible.
De momento no hay planes para su comercialización, ya que está en proceso de pruebas, pero Japan Display confía en que su sensor será usado en sistemas de autenticación de alta seguridad, y ayudará a empresas y compañías a prevenir intentos de robo y hackeo mediante técnicas como intentar hacerse pasar por un empleado con acreditación.
¿Lo veremos en los móviles y wearables del futuro, sustituyendo a los actuales sistemas biométricos?