Metal Wolf Chaos XD
- PlataformaPC6.5PS46.5XBO6.5
- GéneroAcción
- DesarrolladorFrom Software
- Lanzamiento06/08/2019
- TextoInglés
- VocesInglés
- EditorDevolver Digital
Guerra de robots por el control de EEUU
Metal Wolf Chaos XD, análisis
Análisis de la remasterización de Metal Wolf Chaos, el juego original de From Software que, una década después, Devolver Digital lleva más allá de Japón
Casi quince años después de su estreno original, esta obra del archiconocido estudio From Software ve la luz fuera de su Japón natal, ahora para PlayStation 4, XBox One y Steam, con evidentes mejoras en el apartado visual y la pertinente readaptación al mapeado de controles actuales. Es el segundo episodio en la historia de un juego nacido para impulsar las ventas de la primera XBox en Japón y del que, precisamente por no tener un éxito destacable en tal empresa, puede sorprender su recuperación a estas alturas para una versión remasterizada.
A pesar del atractivo nombre detrás del juego, hay que destacar (por obvio que parezca) que Metal Wolf Chaos no tiene absolutamente nada que ver con los juegos que últimamente han disparado la popularidad actual de From Software: los Souls, Bloodborne o Sekiro tienen bastantes elementos en común entre sí, pero no con todas las obras anteriores. No obstante, la serie Armored Core, centrada en el manejo de grandes armaduras de guerra como este Metal Wolf, sí nos hace a todos poner el modo comparativa al máximo y calcular las expectativas… pero también sería un error. Hay que tener claro que los componentes estratégicos y tácticos están reducidos casi al máximo en este título, mucho más orientado a la acción directa y la destrucción de todo lo que tengamos delante.
Patriotismo paródico
Es una historia reconstruida una y otra vez: cómics, películas y videojuegos que ponen el foco en la fortaleza de la libertad americana, de sus principios sociales y políticos exacerbados hasta la risión e, incluso, el propio presidente de los EEUU siendo un héroe de guerra para la humanidad. Pues de eso trata Metal Wolf Chaos, una trama que sabe reírse (y bastante bien) de sí misma y tira de tópicos aderezados con las escenas de acción más inverosímiles y exageradas que podamos imaginar.
El vicepresidente Richard Hawk ha dado un golpe de estado aprovechando un mal momento de la sociedad estadounidense, engañando a buena parte de la población con una careta de justicia pero llevando a cabo acciones horribles encaminadas a la eugenesia y el terror. Michael Wilson (suena a algo así como el Pérez García norteamericano), presidente de los EEUU, no está dispuesto a permitir tal cosa e inicia una revolución para devolver a su querida nación a la senda del bien, a pesar de que la prensa se muestre afín al nuevo régimen y pinte sus avances como burdos ataques terroristas. Armado con su mecha y bajo el seudónimo de Metal Wolf, se enfrentará a todo lo necesario por su justa causa.
A partir de ahí, constantes discursos sobre el país de la libertad, dos bandos radicalmente distinguidos como el bien y el mal, conversaciones con toque cultureta americano refiriéndose a obras del cine y la música (recordando por momentos al estilo de ciertas conversaciones por códec de Metal Gear, a las que además imita visualmente) y mucha, mucha exageración a lo largo de la trama. Las misiones se suceden en localizaciones bastante diferentes y representadas con sus elementos más típicos, llegando incluso a presenciar lo que sería un duelo de forajidos del oeste con Mazinger Z de protagonista. Realmente todo al servicio del espectáculo y diversión más directas.
Elige, apunta, dispara y destruye
Metal Wolf Chaos XD está estructurado en misiones bien distinguidas entre sí que se desarrollan en varios puntos de la geografía norteamericana. En cada una de esas fases tendremos objetivos muy concretos que cumplir, que habitualmente incluyen la destrucción de edificios de armamento, torres de comunicaciones, máquinas de guerra… También tenemos coleccionables en forma de rehenes que liberar y objetos que recoger con su correspondiente recompensa como mayor resistencia de nuestra armadura o armamento extra.
Antes de comenzar una misión tendremos un menú para desarrollar y fabricar armamento con los fondos que hemos recaudado, y para decidir nuestro equipamiento. Este punto hay que resaltarlo porque hay un montón de armas de diversos tipos: entre pistolas, escopetas, ametralladoras, fusiles de asalto, cañones, lanzamisiles y más categorías, pasamos tranquilamente el centenar de armas, cada una con sus valores de daño, capacidad, alcance y demás atributos habituales. Además, al daño convencional podemos unir algunas armas útiles para aturdir enemigos.
Una vez en acción, el juego se siente algo pesado pero no lento. Algunas maniobras no son especialmente ágiles, sobre todo el movimiento propulsado, pensado principalmente para aplastar infantería enemiga (donde es muy útil) y esquivar ataques (bastante peor ejecutado). El modo en que cambiamos de armas también es un poco incómodo al principio, aunque con la práctica uno se termina acostumbrando. La variedad de tipos de armas se agradece mucho y ofrece soluciones bien diferenciadas para cada situación, si bien es cierto que los cañones de rieles facilitan mucho los enfrentamientos clave y son nuestro eterno as en la manga para los objetivos más peligrosos. Por lo general, los picos de dificultad pueden solventarse de esta manera, aunque puede haber alguna excepción y, por supuesto, otras combinaciones más efectivas para cada momento.
El juego consta de catorce misiones, número algo escaso si tenemos en cuenta su duración media. Podemos completarlas todas en un tiempo cercano a las siete horas, siempre dependiendo de cuánto se nos atraganten los puntos más complicados y la importancia que demos a buscar células de energía y rehenes que poner a salvo. Además, hay armas secretas que podemos desbloquear en base a nuestra puntuación en las misiones y, tras completar la historia principal, podremos rejugar las fases en modo fiebre (libertad para destruir con munición infinita) e infierno (dificultad extra en forma de enemigos más fuertes y resistentes), habilitando nuevos aspectos de Metal Wolf. Extras que, si bien no evitan su más bien escasa duración, sí lo hacen bastante rejugable.
Apartado audiovisual
Sin tener una banda sonora completamente memorable, sí es cierto que da en la tecla para acompañar con estilo el ritmo del juego con composiciones rápidas y fuertes. Llama la atención la pista de jazz extravagante que suena durante las telecomunicaciones entre el presidente y su ayudante. El doblaje al inglés (con subtítulos en español, eso sí, a pesar de que los textos al inicio del modo historia, por algún error, aparecen en portugués…) está bastante bien ejecutado.
En lo gráfico, el juego no luce nada mal teniendo en cuenta el año en el que salió, y las resoluciones actuales (soporta hasta 4K) le sientan a la perfección. No puede pasar por un juego de nueva hornada ni muchísimo menos, pero tampoco incomoda a nivel visual. No obstante, sorprende la limitación a 30fps en todas sus versiones, algo que puede antojarse incomprensible en todos los casos y, más si cabe, en este tipo de relanzamientos.
Este juego ha sido analizado gracias a un código para Steam cedido por Devolver Digital.
Conclusión
Es un juego divertido y repleto de acción, si bien es también algo corto y no demasiado variado. La cantidad de armas es bárbara y ofrece bastantes posibilidades interesantes, así como la historia, prácticamente autoparódica, tiene su punto gracioso y entretenido. Por otro lado, en lo técnico no brilla en exceso al ser un producto originalmente creado hace una década, lo cual se nota también en algunos puntos del control, pero su relanzamiento en alta resolución es una buena oportunidad para jugar este título que en su día no salió de Japón. Eso sí, resulta incomprensible que la tasa de refresco no pueda pasar de los 30fps.
Lo mejor
- Diversión y acción muy directa.
- La cantidad y variedad de armas.
- Una trama bastante cómica que sabe reírse de sí misma.
- Siempre es buena noticia que un juego llegue a nuevos territorios.
Lo peor
- El tiempo también pasa por algunos elementos del control.
- Duración algo escasa.
- Limitación a 30fps.
Correcto
No es lo último ni lo más original, tampoco cuenta con la mejor ejecución, pero puede divertir si te gusta el género. Bien, pero mejorable. Cómpralo si te gusta el género y te gusta tenerlos todos.