Shenmue III, Impresiones E3
Probamos la última demo de Shenmue III y observamos su evolución y nuevas mecánicas antes de su lanzamiento el 19 de noviembre
Cuando todo parecía perdido para los fans de la saga Shenmue, cuando creíamos que ya no conoceríamos como continuaban las aventuras de Ryo Hazuki, Sony anunció en el E3 de 2015 que la tercera entrega estaba en desarrollo. Yu Suzuki volvía a las andadas.
Desde entonces hemos ido recibiendo píldoras de información en forma de trailers y diarios de desarrollo hasta hoy, día en el que hemos podido jugar 15 minutos de un pasaje concreto de la aventura.
Lo primero que notamos cuando nos ponemos a los mandos de Shenmue III es que estamos ante un Shenmue, con todas sus letras, esto quiere decir: un amplio mundo por explorar, un reloj en la interfaz que nos anunciaba un ciclo de día y de noche y presuntamente rutinas en NPCS diferenciadas según la hora, como ya ocurría en las entregas anteriores y, como no podía ser de otra manera, minijuegos.
Comenzamos la demo en un extenso paraje verde protegiendo un pequeño Dojo. El control de Ryo es mucho más ágil que el de Shenmue 1 y 2 además de poder girar la cámara para situarla como más cómoda nos sea o simplemente contemplar el mundo y lugares a los que acudir.
En la presentación nos invitaron a hacer el primer minijuego con el que ganar algo de dinero. Este consistía en cortar madera para un aldeano, con el botón A podíamos charlar para conocer más información y con el B acceder a la opción de aceptar el trabajo.
Una vez pasada a la pantalla del minijuego, debíamos pulsar el botón de acción mientras Ryo se movía de derecha a izquierda para acertar en el momento justo del corte.
Con esto nos desplazamos al Dojo, ahí pudimos subir nuestras estadísticas de resistencia y Kung Fu realizando la pose del caballo, un minjuego en el que debíamos aguantar en la posición de sentadilla pulsando el botón de acción mientras Ryo se movía de arriba abajo de una línea central que nos servía de guía para completarlo.
Por último nos dirigimos al Dojo, ahí hemos podido probar el sistema de combate. La historia de que Shenmue nació de la idea de crear un Virtual Fighter RPG sigue patente. Nos lo dijo el mismo Yu Suzuki, no juega a videojuegos por lo que en este Shenmue no existe influencia de ningún título del mercado, solo de la suya propia.
Durante el entrenamiento encadenábamos ataques realizando secuencias de botones y nos guardábamos o protegíamos con una suerte de “Simón dice” de colores en el que teníamos que repetir el mismo patrón con la cadencia exacta para poder tener éxito.
Como mencionamos antes, estos minijuegos nos permitían subir ciertas estadísticas que luego necesitaríamos a la hora de combatir, como Ataque, Resistencia o habilidades con el Kung Fu.
Decir que el resto de elementos siguen existiendo, como el diario en el que iremos apuntando toda la información relevante para la historia y en el que podremos acceder al menú para guardar partida y demás funciones.
Shenmue 3 nos ha dibujado una sonrisa de oreja a oreja, nos ha teletransportado a 2001, con un apartado gráfico que luce mucho mejor de lo esperado y con una magia que solo el genio Yu Suzuki nos puede traer.
- Acción
- Aventura
Shenmue III nace como campaña Kickstarter a cargo de Ys Net y Deep Silver con Yu Suzuki al frente para aparecer sólo en PlayStation 4 y PC, el cierre de una trilogía mítica en el mundo de los videojuegos y desarrollado con el motor gráfico Unreal Engine 4.