Super Mario Party para Nintendo Switch, Impresiones
Jugamos a Super Mario Party para Nintendo Switch y os acercamos nuestras impresiones tras pasar más de una hora al tablero con Mario y compañía.
Super Mario Party fue anunciado por vez primera en el E3 de este 2018, con lanzamiento previsto para el próximo 5 de octubre, aterrizando en Nintendo Switch. Hemos podido jugarlo durante más de una hora probando diversos modos con cuatro jugadores y podemos afirmar que el party game de Mario y compañía mantiene la esencia de la saga, añadiendo diversas e interesantes novedades.
Una serie con 20 años de historia
La saga de Mario Party llegó por primera vez a Nintendo 64 en 1998, incluyendo los elementos que acabarían configurando los pilares básicos de esta subsaga. Presentó como principales personajes controlables a Mario, Luigi, Peach, Yoshi, Wario y Donkey Kong, además de a Toad, Koopa Troopa, Boo y Bowser como personajes secundarios no controlables.
En cuanto a tableros, fueron una totalidad de 8 (2 de ellos desbloqueables), con 24 minijuegos de 4 jugadores, 10 de 1 contra 3, 5 de 2 contra 2 y otros tantos de un solo jugador.
El objetivo del juego, en líneas generales y para refrescarnos la memoria, se trata de ganar la partida siendo quién más estrellas tenga al finalizar el juego (cuyo número de rondas puede variar). Dichas estrellas se pueden conseguir comparándolas al personaje en cuestión que se vaya moviendo por el tablero, ofreciendo monedas a cambio. Éstas se obtienen al ganar los minijuegos del final de cada ronda, después de que los cuatro jugadores hayan hecho su tirada, avanzado por el tablero y realizado sus jugadas. Aún así, cuando la partida finalice podría haber sorpresas, ya que se reparten más estrellas entre los jugadores que mejor hayan actuado durante el juego con parámetros como más minijuegos superados, mayor número de objetos comprados y demás.
A lo largo de su historia la saga Mario Party ha ido evolucionando poco a poco, añadiendo nuevos minijuegos, personajes jugables jugables y secundarios y distintas mecánicas que han hecho a cada entrega un tanto distinta de su predecesora. En cuanto a las plataformas, siendo original para Nintendo 64, ha ido pasando por GameCube (2002-2006), Game Boy Advance, Wii y Nintendo DS (2007-2012), además de sus posteriores versiones en Wii U y 3DS. La última entrega fue Mario Party: The Top 100, también para 3DS, lanzado el pasado año y reuniendo los cien mejores minijuegos de la saga. Por ello, no ha pasado mucho tiempo entre las diversas entregas, llegando incluso a ser anuales. La próxima es la que nos ocupa: Super Mario Party para Switch.
De vuelta en el tablero
Nuestra partida tuvo lugar en el tropical tablero del Paraíso de la Megafruta, con cuatro secciones principales y no demasiada complicación al no variar de forma en el transcurso de la partida más allá que conteniendo una zona secundaria en la que obtener objetos de interés y un puente quebradizo que podía hacer caer al jugador que tuviera la mala fortuna de pasar por encima después de que quedara debilitado por el paso de sus compañeros.
Jugamos con Mario, Bowser, Wario y Daisy, teniendo a Toadette como personaje secundario que nos ofrecía las estrellas a un módico precio de 10 monedas. En cuanto iniciamos la partida teníamos a nuestra disposición un tiro con el dado normal o con el dado especial de cada personaje, que aseguraba la tirada en un número favorable en función de nuestros intereses.
Tras efectuar nuestras tiradas, algunos compañeros acabaron pasando a través de los míticos tubos verdes para acabar llegando a la zona secundaria mencionada anteriormente, en la cual podían llevarse un cofre con un objeto interesante pero no tenían acceso a la estrella (al menos en las primeras rondas), que se encontraba en la primera isla.
Al final de cada turno (tras las cuatro tiradas) nos veíamos inmersos en un minijuego, cuya variedad era mayor que en anteriores entregas, con ideas innovadoras y originales en su planteamiento. Algunos ejemplos de ello son robar el protagonismo en fotos que un koopa realiza en una plaza circular, situándonos frente al objetivo y golpeando a nuestros compañeros para salir enfrente, acariciar a un ciempiés dormido hasta que se despierte enfadado a modo de “patata caliente”, siendo estos ejemplos del 4 vs 4.
En el modo 1 vs 3 uno de los jugadores dirige a un dron y trata de robar las cajas que van saliendo en una estructura ascendente para colocarlas en su cinta transportadora, pudiendo robar las que sus tres rivales reúnen para su propia cinta, ganando quién más tenga al finalizar el tiempo.
Regresando al tablero volvemos a encontrarnos con vendedores que nos ofrecen distintos objetos para aumentar el número que saquemos en nuestra tirada de dado, disminuir el que saquen nuestros compañeros o asegurar una tirada con el número que escojamos de antemano.
Con todo ello el objetivo sigue siendo el mismo: alcanzar antes que nuestros rivales la casilla donde Toadette espera con la estrella en venta, comparándola para aumentar así nuestras posibilidades de ganar la partida. Tras la compra, ella se desplaza a otro punto del tablero, teniendo que variar así nuestro rumbo y estrategia para lograr pasar por encima de nuestros compañeros.
Otros modos de juego
Super Mario Party presenta otros modos de juego aparte del clásico tablero. Durante nuestra cata del título pudimos disfrutar de algunos de ellos, aunque todavía no nos enseñaron el menú principal, por lo que podría haber sorpresas en cuanto dispongamos de la copia definitiva del juego.
Otro de los modos que probamos, definido por el responsable de Nintendo como “un modo para que los niños (y no tan niños) a los que no les gusta perder no se cabreen”, consiste en una retahíla de minijuegos colaborativos en los que los cuatro jugadores tienen que trabajar juntos para superar el reto que se les pone por delante. Para acceder a ellos, en lugar de tablero, nos encontramos en una balsa que desciende por un río, en la cual también nos vemos obligados a remar conjuntamente, explotando globos que dan inicio a los minijuegos. El objetivo de este modo, además de pasar un buen rato y echar unas risas, es llegar al final del tramo acuático antes de que la cuenta atrás finalice (aumentando el tiempo disponible al vencer en minijuegos y demás).
Ejemplos de ello son pescar con red unos peces que nadan por un fragmento de río, poniéndonos de acuerdo para tirar de la red al mismo tiempo, apagar todas las velas de una oscura sala evitando que los murciélagos nos atrapen y explotar globos con la ayuda de unos cañones de aire y el desviar un globo aerostático mayor que asciende por el centro de la pantalla.
Otro de los modos disponibles se presenta como una revolución muy interesante en el concepto de minijuegos digitales, gracias a las características de la consola en la que jugamos. Tomando dos Switch, las colocamos como prefiramos para conformar un mapa en el que desplazar a nuestros tanques, tal y como se puede ver en la imagen. Al decidir la posición final pasamos el dedo entre las dos pantallas para unirlas y confirmar nuestra decisión, pudiendo jugar en el tipo de mapa que hayamos creado a voluntad y presentando así una gran cantidad de posibilidades para cambiar el minijuego cada vez que juguemos.
Otro de los que probamos, que hacía uso de estas mecánicas, fue una especie de puzle en el que teníamos que girar ambas pantallas de las Switch para formar plátanos (habiendo solo una posibilidad a pesar de haber varias mitades) y uniéndolos rápidamente hasta formar 5 parejas distintas. Con ello se cronometra el tiempo que tardamos en completar las series, creando así un ránking y siendo una interesante forma de retar a nuestros amigos a que logren un tiempo inferior al nuestro.
Por último, un modo que no probamos pero sí sabemos que existe es el online competitivo llamado Mario-thon, presentado en el Treehouse que tuvo lugar durante el E3. En él no habrá tablero pero sí una serie de minijuegos en los que nos podremos enfrentar a jugadores de alrededor del mundo.
Conclusión
Super Mario Party se presenta como una entrega que mantiene la esencia de la saga y añade nuevas funcionalidades, minijuegos, personajes, tableros y demás. Siendo el primer título de los party games de Mario para Switch, es una buena oportunidad de utilizar las funciones y características de la última consola de Nintendo. Pantallas interactivas para crear puzles y personalizar mapas, poder jugar hasta cuatro jugadores con una sola Switch y la idea de poder hacerlo en cualquier lugar hacen de este Super Mario Party una elección segura para todos aquellos que quieran disfrutar de un título divertido y sencillo para disfrutar en familia o con amigos.
- Acción
Super Mario Party, desarrollado y editado por Nintendo para Switch, es una nueva entrega de la popular saga de acción y minijuegos protagonizada por los personajes más carismáticos del universo Super Mario, ahora con posibilidades multijugador mediante varios Joy-Con y consolas Switch.