Destiny 2 Los Renegados: Impresiones Gambito, una verdadera vuelta de tuerca

Destiny 2: Los Renegados (Forsaken) es algo más que una expansión en el proyecto de Bungie. Durante esta pasada semana pudimos acudir a las oficinas de la compañía en Seattle para que nos explicasen y nos mostrasen de primera mano lo que supone para ellos integrar por primera vez en su historia un modo PvEvP, que sin tanta sigla implica entremezclar un modo PvE tradicional en el que en cierto punto se convierte en PvP: Gambito.

Sabíamos que íbamos a encontrarnos ante uno de los modos más prometedores de esta ya reputada historia de la nueva franquicia de Activision, pero ahora que lo hemos jugado durante varias horas podemos decir que es también uno de los más emocionantes, uno de los más inteligentes del equipo liderado por Robbie Stevens en lo referente al diseño.

¿Qué y cómo es Gambito?

Gambito se olvida de narrativa y va directo a exprimir nuestros equipamientos a través de habilidad, cooperación y estrategia. Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que son dos equipos de cuatro Guardianes en dos arenas separadas. Sí, separadas porque inicialmente jugamos por separado, luchando contra enemigos cada uno en nuestro propio espacio. Pero al igual que cada baja no es banal, la consecución de muertes tampoco lo es. Cada vez que matamos a un enemigo desprende en su paradero un objeto llamado mota/emote, como unas fichas coleccionables que debemos recopilar y llevar a nuestro banco, una base redonda ubicada en el centro del mapa.

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Así, cada minuto transcurre de forma muy clara: matas enemigos y llevas los emotes a tu base, al igual que tus compañeros, hasta llegar a 75 emotes. Una vez hayamos alcanzado dicha cifra aparece un jefe Primordial, siendo el ganador de Gambito el primero que acabe con su respectivo jefe.

Ahora bien, hay matices, detalles que marcan la diferencia en este modo de juego y le dan un cariz épico que nos ha encantado. Imaginad que lleváis una racha de diez monstruos y disponéis de 10 emotes; os dirigís a vuestra base y, cuando estáis a punto de depositarlo todo y sumar así una decena de motas más… ¡bam! Estamos muertos. En ese momento, justo al reaparecer, nuestro contador individual regresa a cero: hemos perdido los 10 emotes.

Esto nos invita a jugar siempre con cabeza, a que seamos conscientes de los riesgos que supone alejarse más de la cuenta de nuestro banco porque, a más distancia, más difícil será llegar a salvo a nuestra posición. Y así constantemente.

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Combate, invade, piensa, coopera

Otro elemento a tener en cuenta es el uso de las super. Puedes elegir acabar con un buen puñado de enemigos y recoger numerosos emotes de golpe o, lo que nosotros consideramos más efectivo, guardar el super y activarlo contra el jefe Primordial del final de la ronda.

Pero Gambito tiene mucho más intríngulis, porque si bien todo lo que hemos definido corresponde a la vertiente PvE, antes decíamos con razón que es también un PvP. Somos Guardianes, así que podemos viajar a la zona enemiga a través de una especie de portales (si recogemos 25 motas) y repartir fuego a diestro y siniestro, aunque lo más lógico es que terminemos siendo nosotros los que caigamos al jugar con desventaja.

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Además, cada vez que depositemos emotes en cantidades de 5, 10 y 15 mandaremos al territorio rival unos enemigos llamados Bloqueadores, que retiran temporalmente la usabilidad de los bancos. Esto es un problema sobre todo en los minutos finales, porque en múltiples ocasiones nos sucedió que teníamos unos 7 u 8 emotes por depositar y, debido a la aparición de un Bloqueador, tuvimos que acabar con él primero antes de restablecer la base.

En definitiva, cada minuto es fundamental y las remontadas van a ser una constante. Tanto nosotros fuimos capaces de remontar un 70-20 como viceversa. ¿Jugar con amigos? Elemental, tanto por las risas aseguradas que ello supone como por las sinergias que pueden surgir si cada cual asume un rol específico en la partida.

Durante nuestra sesión de juego Bungie nos recomendó tener en cuenta algunas cosas para Gambito, ciertos consejos que verdaderamente consideramos válidos y que nosotros ampliamos a base de ensayo y error. Al principio es un poco abrumador porque no es tan fácil de entender como otros modos de juego más tradicionales; aquí no se trata únicamente de encadenar bajas, de ser los primeros en llegar a un número fijo de emotes, tampoco ser los mejores en el ámbito ofensivo.

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Todo lo contrario, Gambito es un modo que premia el juego defensivo al servir de mucho morir lo menos posible. Al perder todas las motas en una muerte, las muertes se pagan muy caras y al final eso lo termina notando todo el equipo. Por eso, es mejor ser precavidos y no jugársela demasiado si no tenemos suficientes garantías. Hay que estar siempre en movimiento y conocer bien los escenarios, no dar demasiada información de nuestra posición al enemigo.

Un diseño de mapas muy particular

Bungie ha querido aunar todo en Gambito. Destiny 2 adopta así su perfil más solidario, más colaborativo, más alejado de las individualidades y que requiere de la mayor versatilidad posible tanto en el combate cuerpo a cuerpo como en las envestidas desde la distancia. De nada servirá querer ser el líder del grupo recogiendo más emotes que el resto si luego somos débiles ante los Bloqueadores o no damos la talla cuando aparezca el jefe final. Según nos contaron, querían incentivar la comunicación haciendo algo que no se viese en otros títulos multijugador de la actual generación.

Que el título llegue de forma gratuita a PlayStation Plus en el caso de PS4 solo nos obliga a disponer de una suscripción al servicio para empezar a jugar a partir de este mes de septiembre a Gambito; por ello esperan que estas primeras semanas el número de jugadores sea abrumador.

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No queremos dejar de mencionar el inteligente diseño de los escenarios, con una particular forma de interpretar la verticalidad al haber siempre varias alturas: la superficie inicial no es la zona más baja. A diferencia de otros mapas multijugador de Destiny donde la verticalidad se basa en implementar plantas más altas, aquí tenemos recovecos y pasillos por debajo de la base. Si estabas acostumbrado a recibir un headshot desde puntos altos por un francotirador silencioso, en Gambito te puede pasar perfectamente con enemigos situados en zonas por debajo de la superficie, por debajo de la base. Y volvemos a lo mismo de antes: hay que estar en constante movimiento.

Si sabemos hacer un buen uso de los Bloqueadores tendremos mucho ganado, porque aun siendo fáciles de derrotar son incómdos y pueden garantizarnos valiosos minutos extra para conseguir antes que el otro equipo los ansiados 75 emotes. Por el momento hemos identificado tres tipos de Bloqueadores: Ogro, Falange y Caballero Poseído.

El primero de ellos es el que más se tarda en derrotar y, sobre el papel, el mejor de todos los Bloqueadores. Es un estorbo, tiene mucha vida y es capaz de absorber muchas balas antes de caer. Si hay que utilizar un super en algún momento, sin duda es aquí. También con los Caballeros Poseídos, de lejos el más poderoso y el que más alerta debe tenernos si teníamos muchos emotes encima al poder matarnos de un par de golpes. Si le pillamos por la espalda tendremos mucho ganado.

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Y, finalmente, el Falange, que es el más fácil de eliminar pero el más numeroso. Ir solo ante estos blanqueadores no es lo más recomendable, por tanto ir en grupo puede facilitar mucho las cosas de cara a recuperar la banca en poco tiempo.

En total, Gambito se compone siempre de un máximo de tres rondas, con sorpresas como la aparición de enemigos con un halo brillante a su alrededor que darán múltiples emotes en vez de uno solo o que haya remontadas inesperadas en cuestión de segundos. Cada partida es única, creednos, y es por ello que por mucho que hayamos jugado no tengamos la sensación de estar perdiendo el tiempo o que con el paso de las horas lo dejaremos de lado. No esperábamos algo así.

El futuro de Destiny 2

Forsaken es solo el principio del segundo año de Destiny 2. La hoja de ruta está ya trazada, con La Temporada del Forajido a partir del 14 de septiembre. A partir de esa fecha se añadirá la primera incursión de Los Renegados, Último Deseo. El día 18 de septiembre tendremos un nuevo mapa del Crisol, La Convergencia, mientras Estandarte de Hierro estará también de vuelta. Poco después, el 25 de septiembre, se añadirá un nuevo modo al Crisol, Ofensiva, así como nuevos mapas en vivo.

El otoño comenzará con el regreso de la Fiesta de las almas perdidas en octubre; finalmente, habrá una “evolución de la Ciudad Onírica” y más contenidos “sorpresa” para las siguientes semanas y meses. En diciembre tendremos la Temporada de la Fragua, con nuevas armas y contenido para el Crisol, la vuelta de las ametralladoras pesadas y nuevos niveles de temporada. También comenzará el evento La Aurora. En diciembre tendremos también la Armería Negra con “armas de Luz y Furia” junto a “el tesoro de la Armería Negra”. Para terminar, en primavera de 2019 tendremos la Temporada del Nómada con nuevas armas, niveles, novedades en el Crisol, un evento todavía por desvelar y mejoras en la jugabilidad.

Bungie lo ha dejado claro: quieren hacer historia con Destiny 2 y van a echar el resto durante este segundo año.

Destiny 2: Los Renegados se pone a la venta este 4 de septiembre tanto en PC como en consolas Xbox One y PlayStation 4, la tercera gran expansión de la producción de Activision de este ya iniciado segundo año.