Super Bomberman R
Análisis: Super Bomberman R
El arcade de Bomberman que recordamos y que estábamos esperando
Fue en NEO GEO que este gamer tocó por primera vez los mandos de Bomberman y es que, se trataba de un arcade lleno de suspenso, rapidez y emoción que nos obligaba a mantenernos pegados porque era divertidísimo toparte con escenario en los de por algún error de cálculo terminabas auto incinerándote. La evolución de Bomberman en la actualidad no ha sido muy favorable para la franquicia pues, bastantes fracasos han perseguido a nuestro pequeño amigo.
Bomberman ha tenido múltiples entregas, sin embargo, no se lograba obtener la simplicidad que significaba jugar Bomberman, esas dinámicas tan simples y a la vez tan complejas de calcular que lo hacían un juego ocasional o algo con lo que debías clavarte. Super Bomberman R llegó con todas las de gana, Konami se puso a mejorar los visuales haciendo bien su tarea pues, parece un auténtico arcade de la nueva era, pero claro respetando siempre los diseños que son fácilmente reconocibles, aunque no estén en píxeles.
Super Bomberman R no tiene una historia compleja y que se narrativamente profunda. Los bombers deben salvar al mundo una vez más, y es todo. Sin embargo, por importa frente a las buenas características con las que nos topamos, Konami continuó con lo que mejor caracteriza a esta franquicia, el juego multijugador. Y es que explotar bombas por sorpresa cerca de tus amigos siempre ha sido lo más divertido en los arcades hasta ahora. Siempre y cuando por la euforia no termines quemado tú…
El mensaje que Super Bomberman R nos da está claro, la nostalgia también puede llegar a las nuevas generaciones. Y es que los diseños de los bombers son tal y cual los imaginábamos en la nueva generación de consolas, además de que podrás encontrarte con skins que te permitirán escoger al bomber con el cual te identificas más, sin mencionar que cuentan con skins de personajes de otras franquicias como, por ejemplo: el bomber cabeza de pirámide. Hasta los enemigos se parecen a lo que solíamos jugar en la generación noventera de consolas.