Elevator Action Returns
Acción y disparos de vieja escuela
Elevator Action Returns, análisis retro
Analizamos "Elevator Action Returns", juego de acción de Taito para salones recreativos con un estilo remozado y más enfocado a la acción side scrolling.
En el año 1983 Taito lanzaba en los salones recreativos la máquina arcade de "Elevator Action", la cual consistía en el que el jugador tomaba el rol de un espía cuyo objetivo era infiltrase en un edificio de varias plantas desde la azotea y acceder a los diferentes pisos, utilizando el ascensor, para encontrar informes secreto que estaban localizados a través de puertas de color rojo teniendo, a su vez, que esquivar y eliminar a los agentes enemigos, los cuales atacarán nada más verle. Una vez recogidos todos los informes, el personaje tenía que acceder a la primera planta y escapar para completar el nivel.
Años más tarde, concretamente en 1994, aparecía la secuela del juego, llamada "Elevator Action Returns" en territorio japonés y "Elevator Action II" en territorio norteamericano, destacando por su estilo renovado, haciendo uso de diseños estilo anime y sustituyendo la trama de espionaje por elementos de acción paramilitar. Posteriormente fue adaptado para Sega Saturn en 1997, cuya versión quedaría exclusiva de territorio nipón, y luego incluido dentro del recopilatorio "Taito Legends Vol. 2" que apareció en su momento para PlayStation 2, Xbox y PC.
Acción a raudales
La trama del juego ponía al jugador en la piel de uno de los miembros de un grupo de fuerzas especiales paramilitar mientras lucha contra los miembros de una organización terrorista que trata de imponer un nuevo orden mundial utilizando bombas nucleares, que han sido colocadas en varias instalaciones. La única manera de poder desactivarlas es conseguir los informes ocultos entre cada localización.
Al inicio de la partida se puede elegir entre tres personajes diferentes: Kart Bradfield, Edie Burret y Jad the Taff. Cada uno de estos posee un arma específica por defecto pero también diferentes aptitudes a la hora de jugar. Por ejemplo, Kart es más equilibrado en cuanto al daño y a su velocidad de movimiento mientras que Edie es más rápida pero hace menos daño al disparar y Jad hace mucho más daño a los enemigos. Todos ellos van equipados en principio con su arma por defecto con munición infinita pero pueden conseguirse mejoras a través de power ups obtenibles al derrotar enemigos o destruir cajas que permitirán obtener ametralladoras o lanzamisiles con munición limitada pero lo suficientemente poderosas como para ayudar a solventar situaciones complicadas. Destacar que también se pueden obtener power ups a través de las puertas azules que hay en cada fase pero en este caso se entra en un sistema de ruleta aleatoria que permite conseguir, además, objetos que aumentan la puntuación o restaurar parte de la barra de vida. Por otro lado también van equipados con diez unidades de armas explosivas como sub-armas (Kart equipado con granadas, Edie con bombas incendiarias y Jad con bombas con sensor) que pueden ser lanzadas mientras el personaje esté estático o agachado.
La barra de vida se puede visualizar en la parte superior de la pantalla y que se va reduciendo al recibir el personaje los impactos de las balas o ataques de los enemigos hasta llegar a cero. En este punto el personaje podrá volver al combate gastando una vida, de un total de tres disponibles. Cabe mencionar que el personaje quedará igualmente incapacitado con otras situaciones tales como ser aplastado por el ascensor, saltar desde una altura considerable, no cumplir los objetivos de la fase dentro del límite de tiempo o derrotar al jefe final del juego dentro del límite de tiempo, aunque en este último caso supone un "game over" automático sin posibilidad de continuar.
Respecto de la jugabilidad esta es similar a la del título original sólo que en este caso tanto el estilo gráfico como el juego en si se enfocaba más a la acción adaptando la jugabilidad no sólo a un mero "subir y bajar" para encontrar las puertas adecuadas, utilizando los ascensores al igual que en el primer juego, sino también añadiendo jugabilidad side-scrolling y diferentes tipos de escenarios a lo largo de las seis fases de que se compone el juego. En cada fase el objetivo es localizar las puertas rojas que contienen la información clasificada necesaria para completar la fase a la vez que se van eliminando, o esquivando, a los diferentes enemigos que pueblan el nivel, que incluyen desde matones armados con pistolas a tipos armados con escopetas (estos con un estilo que recuerda a Kyle Reese de "Terminator") e incluso llegando a enfrentar a soldados especiales equipados con escudos, los cuales se parapetarán para disparar sin ser alcanzados, e incluso perros.
Los escenarios del juego incluyen diversos elementos decorativos como bidones varios, cámaras de seguridad, cajas de madera o sacos de arena que al dispararlos ofrecerán diferentes efectos como desabilitarlos, en el caso de las cámaras, o explosionándolos, respecto de los bidones. Esto último provoca un efecto de fuego que afectará a la zona donde haya explotado dando lugar a una situación beneficiosa ya que los enemigos que entren en contacto con él se prenderán y arderán vivos hasta quedar totalmente eliminados, con un efecto bastante llamativo cabe destacar.
En cuanto al sonido, el juego hace gala de unos efectos sonoros muy logrados tanto por el efecto de las armas de fuego y explosiones como por los samples de sonido de los personajes, con alguna que otra frase o comentario. En cuanto a la música, las pistas incluidas en el juego se deajn escuchar y acompasan la acción sin ser muy llamativas ni destacar en exceso.
Conclusión
En su conjunto global "Elevator Action Returns" es un título que logra su propósito: entretener. Ya sea en solitario o a dobles en cooperativo, es una experiencia interesante además de uno de los mejores títulos de acción de Taito en los 90 y más que notable secuela respecto de la máquina original, maxime teniendo en cuenta el cambio de estilo que tuvo. Obviamente su principal defecto es que es un título intenso pero, a su vez, extremadamente corto y que en apenas unos pocos minutos, media hora como mínimo e incluso menos si se es habilidoso, se puede completar sin mayores problemas.
Lo mejor
- La jugabilidad. Directa, adictiva y sin muchas complicaciones.
- Los efectos gráficos de los que hace gala tanto en momentos específicos, como la aparición del helicóptero en la primera fase, o el efecto del fuego en los enemigos.
- El diseño de personajes junto con el de los escenarios, y su variedad de detalles en este último.
Lo peor
- Extremadamente corto, especialmente en su conversión casera.
- Habiendo aparecido en occidente la recreativa en Estados Unidos, las conversiones de las que se tienen acceso están únicamente en inglés.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.