Multa record de Europa a Google por abusar del mercado Android: 4.340 millones €
La multa económica más alta que la Comisión Europea le ha puesto a una compañía.
El año pasado, Google y la Comisión Europea establecían un ‘record’ en cuanto a multas, ya que fueron más de 2.400 millones de euros la gigantesca sanción que la Comisión Europea le impuso a Google desde Bruselas. Casi 3 millones de dólares por el abuso de posición o directamente monopolio que el gigante de la Red estuvo haciendo a través del sistema de compra online Google Shopping, del que es subsidiaria y que ha usado para favorecer sus propios intereses. Pero hoy, justo un año después, la UE ha vuelto a multar al gigante de la Red superando el registro monetario anterior.
Multa record de Europa a Google
La Comisión Europea ha impuesto a Google una multa de 4.34 millones de euros por vulnerar las normas antimonopolio de la UE. Desde 2011, Google ha impuesto restricciones ilegales a los fabricantes de dispositivos Android y a los operadores de redes móviles para consolidar su posición dominante en los servicios de búsqueda general en internet. Google debe ahora poner fin de manera efectiva a esta conducta en un plazo de 90 días o hacer frente a multas coercitivas de hasta el 5 % del volumen de negocios mundial medio diario de Alphabet, la sociedad matriz de Google.
Cuando Google desarrolla una nueva versión de Android, publica el código fuente en línea. En principio, ello permite a terceros descargar este código y modificarlo para crear bifurcaciones de Android. El código fuente de Android públicamente accesible incluye las características básicas de un sistema operativo móvil inteligente, pero no las aplicaciones y servicios Android exclusivos de Google. Según la resolución de la UE, los fabricantes de dispositivos que desean obtener esas aplicaciones y servicios deben suscribir contratos con Google, en los que este impone una serie de restricciones.
Google también otorgó contratos y aplicó algunas de esas restricciones a varios grandes operadores de redes móviles, que pueden determinar igualmente qué aplicaciones y servicios se instalan en los dispositivos que se venden a los usuarios finales. La decisión de la Comisión se refiere a tres tipos específicos de restricciones contractuales impuestas por Google a fabricantes de dispositivos y operadores de redes móviles, que le han permitido utilizar Android como vehículo para consolidar el dominio de su motor de búsqueda.
Es decir, la decisión de la Comisión no cuestiona el modelo de fuente abierta o el sistema operativo Android como tal. Por ello, “la decisión de la Comisión concluye que Google tiene una posición dominante en los mercados de servicios de búsqueda general en internet, sistemas operativos móviles inteligentes con licencia y tiendas de aplicaciones para el sistema operativo móvil Android”.
En particular, Google:
La decisión de la Comisión exige a Google poner fin a su conducta ilegal de manera efectiva en un plazo de 90 días a partir de la decisión. Como mínimo, “Google debe interrumpir y no volver a participar en ninguno de los tres tipos de prácticas”. La decisión también exige a Google que “se abstenga de adoptar cualquier medida cuyo objeto o efecto sea idéntico o equivalente a esas prácticas”. El gigante de la Red deberá abonar los exactamente 4 342 865 000 millones de euros de multa impuesta. Para hacerse una idea de la situación, sólo en 2017 Google cerró el año con 25.000 millones € de ingresos solo por publicidad digital en Europa.