Juegos de una tarde: Superhot

Superhot, un juego diferente, corto e idiosincrásico

Después de hablaros sobre Inside, That Dragon, Cancer y Firewatch, hoy continuamos con esta pequeña sección que estamos desarrollando con motivo de las fiestas Navideñas donde recomendamos títulos que se pueden completar en pocas horas, posiblemente en una sola tarde. Es el turno de Superhot.

A veces no es necesario apostar por ideas demasiado complejas, profundas, refrescantes o innovadoras, sino que con tomar un concepto y darle una vuelta basta para hacernos sentir dentro del mundo de Matrix durante unas horas.

Lo que hace especial a Superhot, disponible en PC y Xbox  –ahora también en PSV–, es la capacidad de hacernos sentir dentro de un mundo donde el tiempo pasa muy despacio, tanto que parece ir a cámara lenta cuando llega el tiempo bala (si nos paramos, el mundo se para; si nos movemos, el resto se mueve), y es por ello menester que estemos totalmente concentrados para salir vivos de un amasijo de enemigos que nos mandan un mensaje constante: vamos a morir; tarde o temprano, caeremos.

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SUPER-HOT, SUPER-HOT… ¡SUPER HOT!

Es el efecto tetris, solo que trasladado a un shooter con aires de Max Payne. A pesar de su corta duración, porque se puede completar en tan solo tres horas, cada uno de los niveles va haciéndose más complejo, más laberíntico. Acción-reacción, acción-reacción. Así sucesivamente para hacer que todas las piezas encajen en esta suerte de puzle tridimensional donde las armas y los disparos son los que nos facilitarán permanecer en pie al menos unos segundos más.

Además, un aspecto que hace muy versátil a Superhot es el uso que se hace de cada arma, invitándonos a no solo manipular el tiempo para defendernos con armas a distancia sino también en el cuerpo a cuerpo. Si disponéis de PlayStation VR, recomendamos probarlo también en realidad virtual, aunque de forma tradicional mantiene su originalidad y valentía. Tanto por precio como por ejecución, Superhot se suma a la lista de juegos para una tarde.

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