South Park: Retaguardia en Peligro
South Park: Retaguardia en peligro, análisis
Este videojuego es grosero e irreal. Las voces de los actores son pobres imitaciones. Debido a su contenido les aconsejamos… que sí lo jueguen si son mayores de edad.
Es muy posible que la entradilla de este análisis no sea la más original del mundo, pero es necesaria para hablar de este juego. Retaguardia en peligro es un capítulo de South Park en toda regla y, como tal, este análisis merece tener la misma entradilla que esa serie que lleva ya 21 años en antena. Un texto que se ha convertido ya en un emblema de la televisión y que, si bien tenía sentido a finales de los 90, a día de hoy se mantiene más como elemento inconfundible de la producción que como aviso necesario para públicos de edades poco idóneas para el contenido que se presenta. Ver ese texto en pantalla es sinónimo de que vamos a ver mucho humor negro, violencia, faltas de respeto, palabras malsonantes e historias surrealistas a más poder. Y aplicarlo a este videojuego supone transmitir el mismo mensaje a los usuarios potenciales, porque eso es lo que se van a encontrar.
Pese a las 21 temporadas de la serie (más una película) y a su gran éxito internacional, lo cierto es que hay relativamente pocos juegos de South Park. Tuvieron su pequeño boom en el año 1999, cuando se lanzaron de forma casi simultánea tres producciones muy diferentes entre sí, pero luego hubo que esperar una década para que nos llegasen dos producciones menores para Xbox Live Arcade (en 2009 y 2012). Seguramente, si nos ponemos a analizar a fondo cada caso, seguro que descubrimos un millón de factores diferentes por los que hay tan pocos juegos de South Park, pero lo cierto es que no es nada sencillo sacar adelante una producción basada en esta franquicia. El anterior gran éxito, La vara de la verdad, estuvo en desarrollo desde 2009 hasta que finalmente se lanzó en 2014, pasando incluso por la quiebra de THQ, la editora original del título.
El gran éxito y la gran acogida de La vara de la verdad, un excelente juego de rol que era ya un capítulo perfecto de la serie, animó a Ubisoft, quien cogió el testigo de THQ, a desarrollar una nueva entrega. Prescindió de Obsidian para dejar el producto en manos de Ubisoft San Francisco, pero lo cierto es que no se nota demasiado el cambio. Trey Parker sigue involucrado en la producción como director y guionista (entre otros nombres) y, tal y como él mismo ha comentado en entrevistas, casi se deja la salud para compaginar el desarrollo del juego con las nuevas temporadas de la serie. Y no es para menos, Retaguardia en peligro vuelve a ser una producción enorme en la que están cuidados hasta los más ínfimos detalles. Sí, ha perdido algo de frescura con respecto a algunos momentos álgidos del juego anterior, pero darse cuenta de ello ya supone sacar la lupa y esperar una superación constante que no siempre es posible.
Pero es que La vara de la verdad llegó apostando muy fuerte y dejando todo patas arriba. ¿Cómo puedes superar unos fetos nazis? ¿Cómo puedes superar una escena de un aborto tan exagerada que incluso fue censurada en Europa? Es difícil exagerar más allá sin pasar unos límites que ya empieza a ser peligroso rebasar. Por eso mismo, Retaguardia en peligro sufre de tener a un predecesor que iba un paso más allá en casi todos los aspectos narrativos y humorísticos, pero no por ello queda rezagado, sino que cumple a la perfección su papel siendo una segunda entrega muy sólida, muy satisfactoria y muy divertida, aunque tal vez menos arriesgada.
Si el primer juego era una parodia de los juegos de rol medieval, en esta ocasión el argumento nos presenta una historia de superhéroes. Cartman, alias Mapache, tiene que retroceder en el tiempo, a la época medieval, para evitar un gran problema en el presente… o, tal y como lo presentan algunos niños dentro del propio juego, Cartman se aburre de jugar a los combates medievales y prefiere cambiar a jugar a los superhéroes, algo que ya hicieron en su momento en la serie de televisión (de hecho, casi todos los héroes de aquellos capítulos aparecen en este juego). Cartman es el líder de Mapache y Amigos y sueña con montarse su propia franquicia cinematográfica con películas, series de televisión, lanzamientos directos en DVD… vaya, lo que está haciendo Marvel, básicamente. Y para tal fin, reúne a todo el superequipo para ponerlo a buscar un gato, por el que dan una recompensa de 100 dólares que se podrían usar para financiar las producciones de la franquicia.
No obstante, del mismo modo que Marvel tiene a DC como enemiga acérrima, Mapache y Amigos tienen a los colegas de la Libertad, que también quieren montar su propia franquicia. Pero esto es South Park y, tal y como ya sabemos desde hace más de dos décadas, lo que empiezan siendo juegos de niños acaba siempre liándose sobremanera para acabar involucrando a todo el pueblo. Y aquí no iba a ser menos, ya que durante el primer tercio del juego ya se ven involucradas mafias y prostitutas, por ejemplo. Destacamos solo ese primer tercio para evitar caer en destripes innecesarios, ya que cuanto menos se sepa más allá de este punto supondrá más risas y sorpresas a lo largo del desarrollo de la aventura. Solo destacar que, como siempre en la franquicia, las risas son constantes y los guiños a la historia de la misma son abundantes.
Salen prácticamente todos los personajes importantes que se nos puedan ocurrir, y si no tienen relevancia en la historia principal nos darán alguna misión secundaria. En nuestro garaje tenemos la colección de chimpokomones, Cartman todavía tiene en su patio montada la fortaleza de La vara de la verdad, el pueblo tiene todos los lugares emblemáticos, etcétera. De hecho, el pueblo ha cambiado bastante poco desde el juego anterior, pero es lógico dado que se supone que es un pueblo y, como tal, sus edificios no se van cambiando de sitio así como así. Sin embargo, tiene mucho por hacer y, sin darnos cuenta, nos vemos vagando por sus calles completando todas las misiones que podamos. Tampoco es que sea un juego muy largo, ya que se mueve sobre las 16-18 horas para hacerlo casi todo (según pericia, igual se puede ir a unas 20 horas), así que perdernos en sus calles tampoco llega a hacerse repetitivo ni agotador.
Las misiones principales son todas de historia y giran en torno a la historia principal de las franquicias de superhéroes; en cambio, las secundarias son algo más aleatorias y relacionadas con las rarezas de cada personaje. Una de las más constantes durante toda la aventura es la de encontrar los dibujos yaoi de Craig y Tweek. Esta misión es un guiño profundo a uno de los capítulos de la serie que más han dado que hablar, en la temporada 19, cuando unas niñas asiáticas piensan que Tweek y Craig hacen buena pareja y empiezan a hacer dibujos yaoi sobre su relación homosexual. Todas las misiones siguen un poco esta directriz de referenciar algún capítulo de la serie y, al mismo tiempo, de buscar la parodia a diversas problemáticas y polémicas de la sociedad actual.
Tal es así, que la dificultad del juego vendrá definida por nuestro color de piel. Es algo testimonial, ya que hacerte de color negro no afecta a los combates, sino “al resto de aspectos de tu vida”. Del mismo modo, cuando tenemos que decidir nuestra sexualidad, merece la pena ver todas las posibles variantes, ya que todas ellas tienen un mensaje y un análisis social interesante. Y bueno, qué decir de una de las herramientas principales del juego: la red social Mapachegram. A lo largo del juego, tendremos la misión secundaria de ser influencers, de tal modo que tendremos que hacernos selfis con la gente para sumar seguidores. Te puedes encontrar de todo en este aspecto, desde gente para la que no eres lo bastante digno para que te sigan hasta otros a los que tendrás que hacer favores para que lo hagan. ¿Hasta qué punto puedes venderte por sumar unos cuantos seguidores? Seguro que un cuarto oscuro con dos curas no es la solución.
Más allá de la parodia, la crítica social, el humor negro y los guiños autorreferenciales, Retaguardia en peligro es un juego muy divertido, que abandona los combates por turnos de La vara de la verdad para sustituirlos por combates tácticos. Estamos ante una versión simplificada de un Tactics (Fire Emblem, Disgaea…), en el que tendremos unas casillas por las que podremos movernos para situarnos con respecto al enemigo y elegir entre diferentes opciones de combate. Cada personaje podrá tener equipadas 3 habilidades más un especial, todos ellos relacionados con las características propias de cada superpoder (Cometa Humana tiene poderes cometiles, SuperCraig tiene super fuerza y tú, como protagonista llamado Ojete, tienes poderes con pedos). Son combates sencillos y se dominan en un par de enfrentamientos, aunque luego van teniendo más complejidades.
Por ejemplo, cuando tengas el poder de peerte para retroceder en el tiempo, podrás hacer que el enemigo pierda turno; o, cuando sepas reconocer las microagresiones racistas, podrás disfrutar de un ataque extra contra el que lance los improperios en cuestión. Lo mejor de los combates es que los personajes no dejan de hablar en todo momento comentando la jugada, con comentarios diferentes según a quiénes tengas en el grupo. Además, pueden pasar cosas aleatorias como que pase un coche y tengáis que apartaros todos de la carretera, o que al enemigo lo llame la esposa por teléfono y tenga que desatenderos durante unos instantes. Es South Park y cualquier cosa puede pasar en cualquier momento, y eso es algo que te recuerdan a la mínima.
A nivel de desarrollo de personaje, hay numerosas opciones. Según cumplas misiones y derrotes a enemigos, irás subiendo de nivel; con las subidas de nivel, desbloqueas la posibilidad de equiparte cosas que mejorar tu poder de combate. Para obtener estas cosas, tendrás que comprarlas (casi siempre muy caras para la calderilla que manejas) o que crearlas desde el inventario del móvil, para lo cual tendrás que recoger objetos por todas partes (mochilas, cubos de basura, estantes y cajones…). Es un sistema de creación muy básico también, pero que aporta bastantes posibilidades gracias a la ingente cantidad de artefactos, trajes y objetos que puedes llegar a conseguir.
Por lo que respecta al apartado técnico, poco más que decir con respecto a lo que ya se comentó en el análisis de La vara de la verdad. El juego es un capítulo de South Park puro, de tal modo que, salvo que estés en un combate, en todo momento parece que estamos viendo la ficción televisiva. Y cuando se trata de una secuencia de vídeo, directamente es como haber cambiado de canal para ver el capítulo de esa semana. Está todo muy cuidado, con muchos detalles, todo muy nítido y muy bien definido, y sin grandes problemas técnicos. Incluso los tiempos de carga son bastante rápidos y llevaderos. Donde sí se ha dado un paso adelante es en el apartado sonoro, ya que esta nueva entrega cuenta con doblaje total a nuestro idioma, el cual respeta la mayoría de las voces de la serie de televisión. Se ha hecho un gran trabajo en este aspecto que es muy de agradecer, ya que además de ayudar a la inmersión en la aventura, facilita el comprender todos los chistes a quienes no dominen la lengua de Shakespeare y, por ejemplo, son muy útiles en los diálogos de los combates, ya que no tienes que distraer la atención para leer los subtítulos.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.