¿Por qué el hechizo Ultima de Final Fantasy II era tan inútil?

Un programador de Final Fantasy II encriptó el código para que ni Sakaguchi ni nadie pudiera cambiarlo

A pesar de que el hechizo "Ultima" ha estado casi siempre presente en la franquicia Final Fantasy, la primera vez que se incluyó en la saga en la segunda parte de la franquicia, era todo lo contrario a una magia poderosa, aunque sí era caro.

Esta situación se debe al esfuerzo de uno de los desarrolladores por mantener la lógica argumental del juego por encima de todo, y para que no pudieran cambiarlo, encriptó el código de programación, algo que llegó a mosquear al propio Hironobu Sakaguchi, director de Final Fantasy II.

En la versión original de FF II, la de NES, Ultima hacía tan solo 500 de daño debido a lo que pensaron que era bug - en principio su daño iba a depender del resto de magias del personaje.

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A finales de 2014 el programador Hiromasa Iwasaki, que trabajó en juegos como Ys I y II, publicó en su blog la historia de cómo acabó pasando esto a raíz de uan conversación con Sakaguchi.

En aquel momento, Square descubrió el "bug" en la fase de testeo del juego, y Sakaguchi dijo "¿Cómo ha pasado esto? Arregladlo". Pero el encargado de programar esa parte se negó, y envió al director el siguiente comunicado:

"Todas las cosas legendarias provienen de una era en la que no tenían técnicas apropiadas. Si valoraras esas cosas desde el punto de vista del presente, sería natural que fueran inferiores. Por esta razón las habildiades Ultima son malas. Y para aquellos que se esforzaron y la adquirieron finalmente solo para darse cuenta de que era inútil... Bueno, eso es algo que a veces pasa en la vida. Así que no voy a arreglarlo".

El diseñador, cuyo nombre no menciona Iwasaki, no se quedó ahí. Sakaguchi le dijo: "da igual, tan solo dame el código fuente", para así poder arreglarlo él. Pero el programador había encriptado el código, por lo que tan solo él podía acceder a él.

Por ello, en el cartucho de Final Fantasy II, Ultima sigue siendo un hechizo que, a pesar del esfuerzo para conseguirlo, es inútil.

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Fuentes: @allisonzephyr / Siliconera / Blog de Hiromasa Iwasaki (en japonés)