Tinder estrena reacciones animadas para hacer más divertido eso de dar calabazas
Cuatro animaciones a pantalla completa entre risas, corazones y aplausos.
Denominada 'aplicación geosocial', Tinder permite comunicarse con gente geográficamente cercana a nosotros y que comparta gustos y preferencias, pudiendo quedar para charlar e incluso para una primera cita, encuentro o directamente un rollo de una noche como algunos y algunas la usan. Exitosa desde su estreno hace apenas cuatro años, Tinder es una de las apps para ligar más importantes y mejor consideradas, disponible para teléfonos Android y también para iOS y traducida a 24 idiomas, presumiendo de haber facilitado más de 11.000 contactos en 196 países desde 2012.
Tinder estrena reacciones animadas
Pero no es la única del mercado, y para mantenerse entre las más usadas, una app de evolucionar y crecer. Y Tinder es experta en aprovechar tendencias como cuando el pasado 23 de junio celebró el Día del Orgullo con el World Pride Fest en Madrid e incluyó nuevas identidades de género -Gay, Trans, Lesbiana, Bisexual, Genderless, Pansexual, Género Fluído-, y la opción que el usuario/a pueda escribir ‘otros’ en caso de no sentirse identificado
Hoy, la app de encuentros ha anunciado Reacciones Tinder, una nueva funcionalidad cuyo objetivo es "facilitar interacciones más expresivas entre los usuarios". Las Reacciones son exclusivas de Tinder, pero su función es como enviar un emoji animado que ocupa toda la pantalla. Se trata de respuestas animadas en forma de mensaje, que se muestran en pantalla en lugar de las respuestas de texto tradicionales.
Dile hola o adiós con estilo
De esta manera tenemos hasta 4 reacciones: Risas, Corazones, Aplausos y Mirada dubitativa (genialmente descrita como “Para cuando no sabes cómo tomártelo (o preferirías no haber leído ese comentario”). Las animaciones forman parte de la nueva actualización de la app, y sin duda serán igual de efectivas cuando nos guste alguien -nada más directo que llenarle la pantalla del móvil de corazoncitos) que cuando queramos darle puerta al típico pesado/a que no nos interesa (en el que los aplausos son ideales, a ver si pilla el hiperconocido meme de ‘¿le damos un aplauso y le dejamos que se vaya?’)