Revelan los problemas de Uncharted 4 durante su desarrollo

Uncharted 4 tras la marcha de Amy Hennig: vuelta a empezar

Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón se ha convertido en uno de los proyectos más importantes de la presente generación de consolas. El título de Naughty Dog no fue un camino de rosas, pues como mucha gente ya sabe la marcha de Amy Hennig obligó al estudio californiano a comenzar casi de cero cuando ya se habían marcado las líneas a seguir a nivel argumental. La guionista original del juego, que reconoció trabajar más de 80 horas a la semana en el título, afronta ahora nuevos proyectos profesionales en Visceral Games, pero gracias al libro Blood, Sweat and Pixels de Jason Schier hemos sabido algunos detalles más sobre cómo hubiese sido la historia original del título. 

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Aviso: posibles spoilers en los siguientes párrafos del artículo

La idea original de Hennig pasaba por hacer de Sam, el hermano de Drake, uno de los villanos principales de este episodio de Uncharted, además que su personalidad iba a distar bastante de lo que vimos en el producto lanzado el pasado año 2016. “Durante el transcurso de la historia, al tiempo que Nathan trataba de alejarse de sus raíces como cazatesoros, descubriríamos que él y Sam eran hermanos. En cierto momento de la aventura se reconciliarían y lucharían contra el enemigo real del juego, Rafe, que estuvo en prisión con Sam”.

Las discrepancias entre Neil Druckmann y Bruce Straley –directores de The Last of Us y el finalizado Uncharted 4- con Hennig terminaron con muchos enfrentamientos personales, discrepancias que les impedían trabajar acordemente. Una vez Hennig se fue de la compañía, se firmó un acuerdo de confidencialidad que impidió que hacer públicos los comentarios sobre estas convulsiones.

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En esta historia hay por tanto dos caras de la moneda: por un lado, los que interpretan que fue Hennig la mala de la película, quien engendraba los problemas en Naughty Dog que hacían que el proyecto tambalease; por otro, están los que dicen que Druckmann y Straley impedían que hubiese cohesión de ideas al tratar de imponer sus intereses por encima de todo.

Uno de los detalles a tener en cuenta es que de cara a la publicación del libro, Blood, Sweat and Pixels, Hennig rechazó participar en las entrevistas propuestas. Sea como fuere, la marcha de la veterana guionista derivó en un nuevo guión que convenció a prensa y público, un juego que se ha consolidado como uno de los juegos más importantes de Sony en toda su historia reciente.

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