Sea of Thieves, Avance

Sea of Thieves: ¡Al abordaje, piratas!

Mar adentro, en los confines del océano, los tiburones, las tormentas y el oleaje no son las únicas amenazas a tener en cuenta. Banderas con el emblema de la calavera se izan y ondean en los mástiles de barcos fantasmagóricos. A lo lejos, a una distancia prudencial, la tripulación de una pequeña embarcación tiembla al escuchar un coro de voces in crescendo que se aproxima poco a poco, fundiéndose con el siseo del viento y el batir de olas espumosas. Es una melodía animada, cantada con las cuerdas vocales de gargantas rasposas, que consumidas por el ron y otros brebajes hiela la sangre de las venas e infunde el terror más irracional. Su letra habla de tesoros y fastuosas riquezas; de espadas y cañones; de muerte y sangre; de piratas y bucaneros. Así es el mundo de Sea of Thieves, un lugar donde la piratería es una profesión y un divertimento, donde el humor se fusiona con las canalladas de tripulaciones tacañas ávidas de oro y de aventuras.   

Los juegos de piratas se han vuelto a poner de moda, o al menos en los últimos años hemos apreciado un repunte de títulos de esta temática. Han pasado más de dos décadas desde que la saga de filibusteros por antonomasia salió al mercado. The Secret of Monkey Island fue la primera de una serie de aventuras gráficas que hacían del humor y de la vida pirata su bandera. El equipo de Lucas Arts liderado por Ron Gilbert ya no existe, y la licencia permanece en manos de Disney tras consumarse la compra de la empresa de George Lucas. Aunque Gilbert ha expresado públicamente su deseo de recuperar la licencia, no parece que la casa de Mickey Mouse esté por la labor de desembarazarse de ella, muy a pesar de que en la actualidad no hay ningún producto de la serie en la sala de máquinas.

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Ubisoft se ha especializado con sus Assassin’s Creed en revivir diferentes períodos históricos de la humanidad. Fruto de ese trabajo se gestó Black Flag, la cuarta entrega numerada de la conocida franquicia de asesinos y templarios. La perspectiva del tiempo ha colocado a la obra de los franceses en la posición de ser considerada como un estupendo producto de temática bucanera, pero un mediocre Assassin’s Creed. El estudio de Singapour fue capaz de refinar las batallas navales introducidas en el tercer capítulo y de construir un sistema sencillo y divertido que reproducía con asombrosa fidelidad los combates entre barcos: nos hacía sentir como si fuéramos un capitán pirata surcando los mares y comandando una verdadera tripulación. Por si eso fuera poco, en la conferencia que Ubisoft ha ofrecido durante el E3 2017 se ha anunciado el desarrollo de Skull & Bones, una producción del mismo estudio que recupera las mecánicas navales de Black Flag para ofrecer un videojuego multijugador online centrado en la guerra marina. Diferentes buques piratas lucharán por la hegemonía en impresionantes batallas estratégicas.

Una aventura multijugador de Rare

Muy alejado de propuestas más serias como los mencionados Assassin’s Creed IV: Black Flag y Skull & Bones está Sea of Thieves. La nueva producción de Rare prescinde de los gráficos realistas y presenta un estilo visual desenfadado con personajes y escenarios de estilo cartoon.

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La veterana desarrolladora británica dio a conocer el proyecto por primera vez durante el E3 2015. El equipo había dejado atrás varios años de notorio ostracismo. Sus trabajos realizados para Kinect y su colaboración en la creación de los famosos avatares de Xbox 360 mermaron la confianza de los jugadores. Lejos quedaban los tiempos áureos de la época  de Nintendo y los compases iniciales en Microsoft. Después de la publicación de Kameo, Viva Piñata y Banjo-Kazooie: Baches y Cachivaches parecía que el futuro de Rare estaría ligado a juegos poco ambiciosos y de entretenimiento rápido. Por eso cuando Sea of Thieves salió a la palestra se abrió paso un pequeño resquicio a la esperanza.

Los seguidores de la Rare clásica siempre esperan un tipo de videojuego muy concreto. Aunque a lo largo de su historia han elaborado ideas muy diferentes (nada tiene que ver Golden Eye con Donkey Kong Country o Killer Instinct con Jet Force Gemini), las experiencias profundas para un solo jugador han imperado en su cartera de proyectos. Con Sea of Thieves el enfoque es fresco y novedoso si lo comparamos con el tipo de producción que solían hacer antaño. Al principio algunos lo describieron como una especie de MMO, pero sus creadores no lo han ideado de esa forma. Lo definen como un título cooperativo de aventuras cargado de humor y divertido de jugar. La idea es dar rienda suelta a una experiencia para todos los públicos en un mundo pirata. Colaborar,  competir, luchar, navegar, disparar cañones y buscar tesoros forma parte del concepto base. La propuesta pretende que cada jugador elija su camino y decida qué tipo de pirata quiere ser. Por otra parte, es cierto que el título se ha diseñado para jugarse en compañía, pero también podrá disfrutarse en solitario. Aun así es evidente que el componente multijugador exprimirá el juego hasta la última gota. 

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Todo pirata que se precie dispone de un barco o forma parte de una tripulación. En Sea of Thieves los desplazamientos serán un fragmento importante de la jugabilidad. Junto a otros usuarios podremos viajar a islas remotas o más cercanas con el objetivo de explorar distintas localizaciones. Con un mapa del tesoro en las manos tendremos la oportunidad de indagar y buscar el cofre que quizá nos haga ricos. Para que todo salga viento en popa será mejor mantener las armas prestas y bien cuidadas. Nunca se sabe cuándo van a presentarse los problemas. Además de otros piratas rivales, los escenarios no estarán desiertos ni muchos menos. Criaturas sobrenaturales custodiarán las islas y no cejarán en el empeño de retorcernos el pescuezo al menor despiste: esqueletos, sirenas, tritones y otros seres mitológicos tratarán de complicarnos la vida más de la cuenta.

El juego utilizará una perspectiva en primera persona y nos permitirá disparar como si de un shooter se tratara. Obtener los botines y llevar los cofres a un lugar seguro nos exigirá la colaboración con otros jugadores. Mientras cargamos con el tesoro los demás deberán acabar con los enemigos e impedir que nos roben la mercancía. Por encima de todo este será un videojuego en el que las alianzas tendrán un papel relevante. Así, la persona que esté al timón requerirá la ayuda de otros para saber a dónde dirigir la embarcación.

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Las aguas raramente se hallan tranquilas, sobre todo cuando los barcos piratas navegan a toda vela. No es de extrañar que los combates navales vayan a ser una pieza central del planteamiento jugable de Sea of Thieves. En la presente conferencia de Xbox se han mostrado en todo su esplendor. Los personajes podrán utilizar cañones para noquear a la nave enemiga gracias a unas mecánicas que recuerdan vagamente a las de Assassin’s Creed IV: Black Flag. También aquí podremos abordar a los enemigos, saquear su barco y matar a toda la tripulación. En el último tráiler de jugabilidad se observa que es posible impulsarse desde nuestro propio buque y caer en el del enemigo para, sin inmutarse—da la impresión de que sólo baja un poquito la barra de vida—, continuar con la lucha.

Después de una jornada de duro trabajo, ¿qué mejor que un buen trago de ron? Ya sea en el barco o en las tabernas, los personajes saborearán las delicias del licor de los piratas. Ya sabemos que los bucaneros no tienen moderación en lo que se refiere a la ingesta de alcohol, pero hay cosas que no deben hacerse en estado de embriaguez. Por ejemplo, no creemos que sea muy recomendable zambullirse en las aguas y buscar un tesoro entre arrecifes y corales cuando la cabeza da vueltas y no se distingue la derecha de la izquierda. Mayor razón para no hacerlo es que los tiburones peinarán la zona, así que mejor sumergirse acompañado de un par de amigos. Y no, no sugerimos esto para que sirvan de alimento, sino para que despisten al animal mientras el otro personaje se dedica a recoger el premio.

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Como en muchos títulos de corte multijugador, Rare está preparando una serie de eventos de carácter temporal que han denominado Live Campaign  (campañas en directo). De acuerdo con las declaraciones de Christina Parker, integrante del estudio, se tratará de experiencias exclusivas: “Sólo están disponibles durante un tiempo limitado, y se han diseñado para aderezar el juego del día a día y brindar una experiencia y una recompensa única”.

Microsoft y Rare han anunciado que Sea of Thieves desembarcará en tiendas a comienzos de 2018 y saldrá para todas las consolas de la familia Xbox One, así como en PC. Al igual que los demás videojuegos first party de Microsoft, estará integrado en el programa Xbox Play Anymore, por lo que los jugadores que adquieran el juego en digital se llevarán la otra edición de manera gratuita. Desde ya está abierto el formulario para inscribirse a la beta cerrada en el sitio web oficial del título.

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Por muchas dudas que haya generado el proyecto a lo largo de estos años,  el olor a ron se respira en el ambiente. Los piratas regresarán a la primera línea con esta aventura desenfadada que esperemos esté a la altura. Y en algún lugar del océano, lejos de la civilización, puede que un grupo formado por una pequeña tripulación esté en un aprieto…

Los cañones retumban, las olas chocan contra el casco y violentos truenos resuenan entre relámpagos, lluvias incesantes y casquillos. A pesar de la niebla vaporosa, el contorno de una espada curva se dibuja frente a los ojos de las desdichadas víctimas. Zozobra su nave y también sus corazones cuando la silueta del hombre se materializa con claridad cristalina: el sombrero ligeramente ladeado, el ojo sanguino, el otro cubierto con un parche,  nariz hinchada y ganchuda, barba, cicatrices, sonrisa irónica, pata de palo y mosquete en posición de ataque. Una milésima de segundo de escrutinio mutuo. Un disparo, gritos, caos, muerte. Uno de los comerciantes cae a las aguas embravecidas y un escualo aletea en busca de su banquete principal. Los piratas dan palmadas con las manos, pues han encontrado el cofre del tesoro. Lo abren: un puñado de monedas, suficientes para comprar un par de botellas de ron en la taberna. Celebran la victoria con el licor deslizándose por las comisuras de los labios. Con otra alegre canción nos dan la bienvenida al mundo de Sea of Thieves.