Plen Cube, tu robot R2-D2 de bolsillo

Los robots son el presente de la industria tecnológica. Pero antes que el desarrollo del hardware, las grandes empresas se centran en elaborar unos asistentes virtuales cada vez más útiles e inteligentes. A la vista está la cantidad de aplicaciones destinadas a ofrecer este servicio que han tomado smartphones, ordenadores y coches para hacernos la vida más fácil. Aunque los teléfonos inteligentes son los aparatos que mejor explotan estas capacidades, son los robots los que sacarían todo el partido y por fin hay uno que se acerca a estas características. Se trata de Plen Cube, tu robot R2-D2 de bolsillo.

Pequeño tamaño, amplias opciones

Los amantes del cine de ficción recordarán con cariño al androide R2-D2. Era el asistente mecánico más útil del universo en Star Wars hasta que BB8 llegó en El Despertar de la Fuerza. Abría puertas, retransmitía mensajes e incluso se comunicaba con Luke Skywalker, al que obedecía sin poner pegas. Con esta descripción no se aleja mucho de las funciones de un móvil actual, ¿verdad? pero y si te dijéramos que existe un robot similar en la realidad en miniatura.

Plen Cube es tu robot como R2-D2 que cabe en tu bolsillo. Se trata de un pequeño androide con inteligencia artificial capaz de conectarse a cualquier dispositivo cercano. Esta propiedad le permite desde conectarse a Internet para darte la información del tiempo o las noticias, apagar las luces inteligentes de tu hogar o reproducir tu playlist de Spotify. Tiene un display en la parte superior que te muestra la hora o la función que acabas de activar por voz.

Por el mismo precio que una GoPro

A muchos les llama la atención el hecho de utilizar Plen Cube como una GoPro Hero 5. Aunque no tiene la misma resistencia, el R2-D2 cúbico complementa las funciones de cámara deportiva con las de un asistente robótico capaz de publicar tus fotos y videos en redes sociales como controlar los aparatos inteligentes de tu hogar. Sus creadores tiene el proyecto en proceso de patrocinio en Kickstarter a un precio cercano a los 350 euros, más o menos lo que cuesta la cámara de acción.