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Buenos juegos abandonados por la comunidad

The Division ha sufrido una caída de usuarios tremenda para un juego pensado para perdurar en el tiempo. Y es que no son pocos los títulos que tuvieron buenas críticas y buena acogida entre los usuarios pero que por uno u otro motivo, acabaron abandonados por la comunidad.

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Los videojuegos actuales están intentando perdurar en el tiempo más allá de la clásica partida en la que inicias y terminas una campaña. Esto es algo que se empezó a ver en la pasada generación de consolas con la eclosión definitiva de los juegos con una fuerte vertiente online y cada vez son más los que intentan convencer con una fórmula más o menos novedosa y adictiva. Pero la sensación es que cada vez salen más títulos de géneros similares, que muchos se suben a la ola de el hit de moda y la tasa de abandono acaba siendo elevadísima una vez ha pasado el boom inicial. Y en esta nueva generación ya hemos visto varios casos en los que a pesar de tener una propuesta atractiva, el título no ha llegado hasta donde se había marcado. 

No es algo que se pueda ceñir exclusivamente a géneros como los FPS o los MOBA, aunque son claros exponentes de esta montaña rusa que supone estar en lo más alto y a las pocas semanas caer en el olvido. El género de la lucha, por ejemplo, vivió una segunda juventud con el boom Street Fighter IV, que revitalizó el formato 2D de toda la vida, pero la gran cantidad de nombres que salieron se vieron afectados por un mal: apostar por el online como manera de perdurar en la memoria y en los ránkings de los más jugados pero sin tener suficiente gente como para que la experiencia sea satisfactoria. En los últimos años, en definitiva, no han sido pocos los que por uno u otro motivo han acabado lejos de perdurar. 

Con esta premisa y con algunos ejemplos recientes como puede ser el de The Division de Ubisoft, un título que dejó muy buen sabor de boca en sus primeras semanas y que ha ido desapareciendo  de las plataformas de los usuarios que lo adquirieron, buscamos repasar juegos que en los últimos años han sido bien considerados y atractivos, pero que han acabado abandonados más pronto que tarde por la comunidad de jugadores.

The Division

Es uno de los ejemplos más claros y probablemente el más reciente de todos. Cuando llegó el título que mezclaba acción, RPG y MMO de la mano de Ubisoft, las primeras sensaciones fueron muy positivas. La campaña tenía una gran duración, el sistema de progreso era adecuado y el potencial de la Dark Zone, pensada para el endgame, atrapó a los jugadores entre los que nos incluimos durante muchas horas. Pero el juego, que se convirtió en la nueva saga más exitosa en ventas de Ubisoft, se topó en una encrucijada pasadas las semanas. El contenido no acababa de dar la recompensa esperada en los más altos niveles, empezaron a aparecer tramposos que rompían la experiencia en PC y el nuevo contenido en forma de raid y cambios de gestión no convencieron. El resultado fue que un 80% de los usuarios de Steam habían abandonado el juego, que eso sí todavía no ha dicho la última palabra. Veremos con la actualización 1.2.

Street Fighter V

Otro de los nombres que estaba llamado a ser referente durante la generación de consolas y que de momento lo que tendrá complicado es restablecer la confianza de los usuarios que se han encontrado con todo tipo de contratiempos. Que llegaba justo de cierto contenido se sabía desde un primer momento, pero si un título de este calibre apuesta todo al online y al competitivo, no puede fallar como lo ha hecho. El lag presente en partidas de jugadores del mismo país y con buenas conexiones, los Rage Quits sin penalizar y otros errores han disminuido la moral de un público que ha abandonado en masa. Las estadísticas de Steam indican que más del 50% dejó de jugarlo al mes de salida (marzo) y actualmente no llegan a los 2.000 los usuarios de media (ventas estimadas en PC sobre las 150.000) que están en esta versión. Si tenemos en cuenta que el juego tampoco ha alcanzado los dos millones de unidades previstas (se ha quedado en 1,4 al cerrar el año fiscal) la sensación es que está lejos de Street Fighter IV y de ser el rey absoluto del género. Aunque con los nuevos contenidos y actualizaciones quién sabe, porque como hemos defendido la base jugable del título es excelente. Pero no acompaña todo lo demás. 

Evolve

A Meristation y también a muchos otros medios les gustó Evolve. En medio de un tipo de multijugador online tremendamente machacado y reinterpretado de mil maneras, 2K y Turtle Rock Studios aportaban una propuesta distinta, asimétrica y con elementos muy a tener en cuenta. Las partidas que disfrutamos durante la fase review con la cooperación necesaria entre jugadores, o la estrategia totalmente distinta que debíamos seguir a la hora de controlar a la bestia mientras intentábamos transformarnos en nuestra fase final eran intensas, variadas y divertidas. Pero el juego no cuajó entre los usuarios, con varios motivos como el sistema de DLCs anunciados o la falta de ciertas modalidades o novedades que realmente llamaran la atención. En tres meses no lo jugaba ni el 10% (Steam) de su salida y pasó a ser totalmente residual. 

Titanfall

Una de las sorpresas negativas que muchos, entre los que se incluye el redactor de este artículo y varios compañeros de redacción, no esperábamos en ningún caso. Titanfall apostaba claramente por un multijugador poderoso y los chicos de Respawn, varios ex Infinity Ward, hicieron a nuestro entender un juego adictivo, divertido y muy frenético. Un título veloz, con momentos épicos, con los titanes como elemento diferencial y un buen diseño de niveles. Parecía que podía ser un competidor de nombres gigantescos, pero la fórmula no cuajó. Ni en PC, que era su mejor versión, ni seguramente le acompañaron las ventas de Xbox One, consola en la que salió en exclusiva y que no estaba creciendo al ritmo de su competidora Playstation 4. La realidad es que el para muchos mejor Multiplayer de la generación, o uno de ellos, se desinfló rápidamente, y no era raro encontrarse a los tres meses con una base de jugadores de unos 3.000 usuarios, algo que impedía encontrar partidas en ciertos modos. Tampoco ayudó una política de DLC que no invitaba a nadie a volver al juego. Veremos qué pasa con Titanfall 2, ya totalmente multiplataforma en consolas. 

H1Z1

La moda de los juegos llamados de supervivencia también ha tenido algún caso de juego con mucho potencial que ha acabado abandonado. Un ejemplo es el de H1Z1, inicialmente desarrollado por Sony Entertainment Online y que llegaba como un competidor de primer nivel para DayZ, entre otros. Pero el título, que ofrecía una gran cantidad de propuestas interesantes a nivel de acción y looteo, ha sido víctima de las propias malas decisiones. La falta de nuevo contenido desde que se estrenó como Early Access, problemas de hackers y tramposos y alguna que otra controversia le hicieron ir perdiendo usuarios por el camino, pero la debacle llegó en marzo cuando decidieron separar el juego -presumiblemente para ganar más dinero- con la modalidad Survive y con la King of the Hill. La caída de usuarios en Steam fue importante. La versión original ha quedado en poco más de 3.000 usuarios cuando eran casi 30.000 de pico tres meses antes y la nueva King of the Hillha ido perdiendo en este tiempo más de un 40%. 

Wildstar

Wildstar es de esos títulos que estaba llamado a conseguir una parte del gran pastel de World of Warcraft en el mundo de los MMO pero que acabó como muchos otros a medio camino. Un título que en su salida era más que atractivo por su ágil y frenético sistema de combate, por ofrecer una cantidad de contenido inusual para un juego de salida de este tipo, por su acabado artístico y por el hecho de ser un título desafiante pensado para el jugador hardcore. Era un juego completo de inicio y eso sumó muchos puntos. Pero el título llegó en modelo de suscripción, algo que no estaba funcionando en los últimos años y eso le pasó factura. Poco a poco vio que el modelo no funcionaba y pasó a ser free to play en el mes de mayo de 2015. Ni por esas remontó el vuelo con contenidos como las raids de decenas de personas que otros habían desechado tiempo atrás por la poca funcionalidad que tenían. En febrero de este año, los servidores del PVP se cerraron por falta de jugadores y actualmente solo hay dos servidores PVE. 

Street Fighter X Tekken

Capcom había tocado el cielo a nivel comercial con Street Fighter IV y todo parecía indicar que el acuerdo con Namco (quien por cierto parece que se ha olvidado definitivamente del Tekken X Street Fighter) iba a traer un crossover definitivo con las dos grandes sagas del género en 2D y en 3D. Pero Street Fighter X Tekken acabó con un online desértico a los pocos meses de su salida. Y es una lástima, porque el título tenía un sistema de juego menos encorsetado que el propio SFIV, contaba con una plantilla de personajes impresionante a un lado y otro y era, por encima de todo, un juego muy divertido de disfrutar. Pero varias de las decisiones polémicas de Capcom le pasaron factura. Los contenidos bloqueados dentro del disco que salieron posteriormente como DLC, el tema de las gemas que te hacían pasar por caja para algunas de las mejores y el hecho de que el mercado tenía ya una enorme cantidad de juegos de lucha, tanto 2D como también 3D, hicieron que un buen título como este acabara abandonado. 

Warhammer Online 

Warhammer debería ser un éxito por si solo con el universo que representa. Y muchos juegos bajo esta licencia han acabado siendo grandes títulos. Todo parecía ir de cara con este Warhammer Online que salió a la venta en 2008, que recibió grandes críticas (85% de media en Metacritic) y que cosechó varios premios durante su presentación y posterior salida. DEstacaba por tener un contenido PVP muy potente, una recreación del mundo Warhammer ideal para los fans, pero no tardó en ir hacia abajo y sin frenos. De los 1,2 millones de ventas a finales de septiembre se pasó a un 25% menos de usuarios diez días más tarde. Las suscripciones cayeron antes de acabar el año 2008 hasta los 300.000 usuarios en occidente con unas pérdidas de más de mil millones de dólares a principios del año siguiente. Se empezaron a cerrar servidores en diversos puntos y finalmente el juego acabó cerrado en 2013. El pobre PVE que tenía, una salida muy incompleta en contenidos no ayudaron a construir una base sólida que, además, fue reduciéndose drásticamente y no se supo reconducir con decisiones más que discutibles.

Y vosotros, ¿Qué juego os pareció muy bueno pero acabó desterrado por falta de comunidad? Os leemos en los comentarios.