XCOM 2: Impresiones para PC

XCOM 2: Primeras horas

A principios del mes de junio del ya pasado 2015, 2K y Firaxis nos anunciaban XCOM 2, la nueva entrega de una de las sagas más emblemáticas y a las que más cariño tienen los amantes de los juegos de estrategia (sobre todo los que prefieren los juegos por turnos) y los aficionados tanto a los videojuegos como todo lo relacionado con los extraterrestres, dada la gran carga argumental que siempre ha rodeado a la saga. A falta de unas pocas semanas para que el juego salga de forma definitiva en PC, hemos podido dedicarle unas cuantas horas a su campaña para poder comentaros lo que nos está pareciendo, por el momento, el juego de Firaxis, que, en esta ocasión, pese a que sigue respetando el clásico original, se atreve a dar aún más personalidad a su título.

Y es que, en XCOM 2 se han tocado suficientes cosas como para dotar al juego de una personalidad diferente, única, convirtiéndolo en un título ideal para todos los que quieran debutar en el género, gracias a un ritmo de las partidas rápido, sencillo y bastante fresco para lo que suele comprender este género, pero sin renunciar a la profundidad y a los miles de posibilidades con las que los jugadores más avanzados se sentirán como en casa. Una de las cosas que caben destacar durante las partidas es la destrucción de escenarios, lo que provoca que los jugadores tengan que renunciar a las típicas tácticas de enrocarse en una buena posición a salvo de los disparos enemigos. Ahora, las coberturas para nuestras tropas (y para las de los enemigos) pueden verse reducidas o completamente eliminadas, lo que provoca que tengamos que desplazarnos, que cambiar forzosamente de lugar si estamos bajo fuego pesado enemigo, dando más movilidad a los enfrentamientos en los diferentes escenarios. Además, dependiendo de que estemos usando para protegernos, la propia destrucción de nuestra cobertura puede reportarnos mucho daño o incluso la propia muerte si, por ejemplo, nos encontramos a cubierto tras un coche y el enemigo decide volarlo.

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Otro de los aspectos jugables más destacados de este XCOM 2 es el valor de la infiltración, del sigilo, y de las emboscadas. Y es que, la trama nos hace ser, en esta ocasión, el bando atacante, organizando nuestras propias guerrillas, infiltrándonos en el territorio enemigo en el que deberemos de intentar atacar por sorpresa para sacar una ventaja que puede ser muy útil a la hora de resolver cada una de las misiones que ya os adelantamos que no serán fáciles, tanto por el miedo a arriesgar y a perder de forma definitiva a algunos de nuestros soldados como por otra de las variantes que harán que el juego sea mucho más dinámico, la decisión de dotar a la mayor parte de los objetivos de nuestras misiones de un número máximo de turnos para conseguir los mismos, lo que hará que siempre tengamos que poner en la balanza el avanzar con cautela o el adoptar un rol más ofensivo y arriesgado antes de que se nos agote el tiempo para rescatar a cierto rehén, para salvar a algunos supervivientes o para asaltar un punto, por poner tan solo algunos ejemplos.

También se agradece, a nivel jugable, la sencillez de la interfaz y de la presentación de los diferentes comandos y acciones que pueden hacer cada uno de nuestros soldados, con unos menús limpios, sencillos y accesibles, pero aun así con la cantidad justa de información para que podamos acostumbrarnos a ellos rápidamente y para agilizar de una manera óptima lo que podemos hacer en cada momento. También resulta particularmente útil la posibilidad de rotar la cámara sobre el escenario a nuestra conveniencia, adaptándola como mejor nos convenga, cambiando nuestra visión de la posición del enemigo y la nuestra propia e incluso la perspectiva de cómo debemos de encarar nuestros combates.

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Antes de pasar a otros aspectos queremos destacar la relevancia que en XCOM toma no solo la muerte de nuestros soldados, sino que estos resulten heridos durante las misiones. Hay que tener en cuenta que cada unidad tiene su propia progresión, su propia subida de nivel y que podremos ir especializándolas individualmente para que tengan las mejores habilidades que se adapten de una mejor forma a las diferentes misiones según el tipo de especialidad. Esto hace que perder a un soldado en el campo de batalla sea especialmente doloroso, ya que puede provocar que perdamos una pieza clave de nuestro ejército, dificultando el resto de combates que tengamos por delante. Sin embargo, que resulten heridos también tendrá una fuerte repercusión negativa para nuestras tropas, ya que no podremos contar con los dañados durante un número de días elevado, días durante los cuales, a buen seguro, tendremos que encargarnos de otras batallas, para las que quizás deberemos de contar con personal menos cualificado.

Pero no solo de enfrentamientos vive XCOM 2 que, en esta ocasión, también potencia todo lo que podemos hacer fuera del campo de batalla. Gestionar unidades, investigar nuevas tecnologías, intentar contactar con fuerzas aliadas, construir laboratorios u otras salas que nos permitan avanzar más rápidamente, reclutar soldados, personalizarlos, gestionar su equipo, reclutar otro tipo de personal... Hay todo un mundo de opciones, posibilidades y decisiones que deberemos de tomar como comandantes que pueden marcar las líneas de la victoria o la derrota de nuestra particular guerra.

A falta de poco menos de un mes para que salga a la venta, XCOM 2 ya nos ha empezado a mostrar sus armas para volver a dar un puñetazo encima de la mesa y para volver a convertirse en un referente dentro de los juegos de estrategia y para volver a ser el líder de los títulos de estrategia por turnos. En esta ocasión, pese a que se sigue respetando la esencia original de la saga Firaxis ha ido introduciendo más novedades como la posibilidad de destrucción de coberturas y algunos otros elementos del escenario u otras fórmulas para hacer las partidas más dinámicas, además de profundizar en todos los aspectos de la gestión de nuestro ejército fuera del campo de batalla. De momento, con estas primeras horas, XCOM 2 promete ser un gran título dentro del género que dejará satisfechos a todos sus aficionados pero que también puede convertirse, gracias a sus partidas con un mayor ritmo, en una excelente puerta de entrada para todos aquellos que aún no se hayan aventurado en un juego de estrategia por turnos.