Juego de Tronos - Temporada 1, Análisis

Cuando se anunció que Telltale seencargaría de narrar a su manera los acontecimientos que conocemos enJuego de Tronos, la expectación era máxima. El gran éxito de la primeratemporada de The Walking Dead y el buen trabajorealizado en otros frentes como Wolf Among Us hacían esperar lo mejor deuna temporada que se centraba en una casa sin importancia en la serie yuna trama que se ubicaría entre la tercera y la cuarta temporada de lamisma. Además, la propuesta de controlar a personajes de la Casa Forrester tambiénbebía directamente del formato adoptado por los libros de George RRMartin y trasladado a la serie: historias de distintos personajes que sevan entrecruzando. Esta semana ha llegado el sexto y último capítulo,un cierre que seguramente ha dejado demasiado frío a los jugadores peroque sirve, ahora ya sí, para hacer balance de la primera temporada alcompleto.

Elinicio de la temporada no podía ser más esperanzador, en plena BodaRoja con un escudero escapando hacia la fortaleza de los Forrester.Después de un trepidante punto de partida empezamos a conectar con lospersonajes, hasta cinco, que controlaremos a lo largo de la serie. Y esuno de los grandes ganchos del juego, la ubicación y camino que siguecada uno de ellos. Tendremos a Gared, a Ethan Forrester, la hermana mayor de la casa Mira, el exiliado Asher o Sir Rodrick,heredero de la casa. La clave para entender el éxito de esta entrega esel hecho de que están repartidos en distintos puntos de los SieteReinos, algo que nos permite interactuar con casi todo lo que nos atrapade los libros y de la serie.

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Yes que desde el primer episodio hasta el último vamos encontrandopersonajes recreados como en la serie de HBO que juegan un papel más omenos relevante en nuestro avance. Margarey en Desembarco del Rey con Cersei, Tyrion Lannister o el salvaje Ramsay Snowson algunos de los primeros que conoceremos, pero no los únicos.También desfilarán ante nosotros otros iconos como Daenerys Targaryen.El papel de estos personaje es importante, no roba protagonismo a lacasa Forrester y podemos decir que la integración denuestros protagonistas en el universo Juego de Tronos es acertado,aunque tiene ciertos altibajos (como algunas actitudes de la propia Daenerys en los últimos episodios).

Despuésde un arranque interesante con diálogos y decisiones importantes, Juegode Tronos pega cierto bajón en el segundo capítulo, donde veremosnuevas localizaciones como el Muro y conoceremos a dosde los mejores protagonistas del juego. Pero a cambio, se pierdeintensidad en decisiones y puesta en escena y la trama sigue sinarrancar del todo, algo que sorprende ya que la puesta en escena delprimer capítulo permitía avanzar sin demasiados problemas.  En los dosprimeros capítulos se ve una tendencia que se mantendrá en toda latemporada: no hay rastro de puzles ni tampoco exploración –salvocontados detalles- y todo gira alrededor de los diálogos, las decisionesy algunas secuencias de acción que se superan vía Quick Time Event. Lafuerza narrativa es importante, pero son elementos que habíamos vistoanteriormente y que parece se están perdiendo en las nuevas series deTelltale.

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Sípodemos decir que en el ecuador de la temporada el juego aumenta enritmo narrativo, en sucesión de acontecimientos para varios personajes(destacando sobre todo la tensión en Desembarco del Rey ola intensidad de lo que pasa en la otra parte del mundo con losmercenarios) y con decisiones muy complicadas que tomar. El desfile depersonajes conocidos no cede (como Jon Snow) y se empiezan a entrelazarhistorias ente los personajes que estamos controlando. Las decisionesque vamos tomando nunca se sabe si son las acertadas, no hay un win-winclaro, y el rol que adoptan ciertos personajes de peso del universoJuego de Tronos añade picante a lo que queremos hacer con o ante ellos.

De hecho, encaramos el tramo final (dosúltimos episodios) con la sensación que todo lo que conocemos puededesmoronarse en cualquier momento. El papel de Ramsay es letal en estetramo clave de la historia y personajes a priori fuertes y sólidos comoRodrick o Asher acaban al límite, algo que se agradece. También venimosde ciertas decisiones en manos de Gared y de situaciones complejas comola de Mira que son de difícil solución, esperando que todo llegue a sucatarsis total y absoluta en el último capítulo y cierre de temporada. Yaquí, por desgracia, llegan las grandes decepciones.

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Lasensación que teníamos en el capítulo 5 es que no se había progresadolo suficiente en ciertos aspectos con algunos personajes, y que todotendría que solventarse en el último episodio. Pero el último capítulo noconsigue ni convencer a los que hemos creído en la Casa Forrester ni alos que esperan un desenlace crudo made in Juego de Tronos. Sin ánimo deentrar en destripes, tendremos decisiones complicadas que tomar yciertos puntos de no retorno en los que lo que decidamos cambiaráelementos de la historia para siempre. Pero se quedan muchos cabosabiertos, el final no tiene el punto álgido de “no puede ser” de Juegode Tronos y se desaprovechan tramas que eran muy esperanzadoras.  Quedaclaro el camino a una todavía no anunciada temporada 2, pero eso nojustifica que se pudieran haber resuelto varias tramas de mucha mejormanera.

El juego mantiene lo que ya sabíamos a nivel audiovisual.Apartado técnico en el que destacan los escenarios y larecreación de grandes protagonistas de la serie con sus actoresreales, pero ciertos fallos a nivel técnico en acabados,detalles y algunas animaciones además de alguna recreación facial de dudosa calidad hacen que no sea lo mejor del juego precisamente. La banda sonora mantiene el nivel porlas voces originales de los actores de reparto de la serie. El juego contiene ya traducción al castellano con el último capítulo. Y eso escomplicado para quienes no dominen la base del idioma de Shakespeare, yaque hay construcciones y abreviaciones cada dos por tres.

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