Shenmue 3, Impresiones E3 2015

Shenmue III. Pocos nombres han llegado a ser tan recurrentes en la industria a lo largo de los años como éste, que para aquellos que lo mencionaban era más, mucho más que un simple título seguido de una cifra en números romanos. Shenmue III era un deseo, una esperanza, la ilusión de ser testigo, al menos una última vez, de que en esta industria ya tan masificada y mercantilizada aún quedaba sitio para el arte, para la obra de autor, para un juego que no acabara viéndose encadenado a la moda o tendencia de turno como requisito indispensable para poder ver la luz del día. Unas semanas antes del E3, y a raíz del éxito alcanzado por Koji Igarashi con el Kickstarter que se levantó para poder sacar adelante una secuela espiritual del mítico Castlevania: Symphony of the Night, en el podcast de esta casa elucubramos sobre la posibilidad de que, visto el triunfo (más de cinco millones de dólares recaudados en total), IGA solicitara a Konami la sesión de la licencia de los Belmont para poder rebautizar a su Bloodstained como un Castlevania con todas las letras. Y, ya puestos, también nos preguntábamos lo siguiente: ¿Por qué no hacía lo mismo Yu Suzuki, creador de Shenmue? Pedir la licencia a una Sega que lleva 14 años sin saber qué hacer con ella, montar un Kickstarter y financiar la tan anhelada tercera entrega de la inconclusa franquicia con la ayuda de aquellos que llevan tanto tiempo esperándola. Obviamente, solo pensar algo así era una locura, pero soñar es algo que ni siquiera Montoro ha conseguido impedir que siga siendo gratis, así que…

Luego llegó el presente E3 y, horas antes de que Sony diera inicio a la que ya queda (y seguramente quedará por siempre) registrada como la mejor conferencia de la historia de la feria angelina, se confirmó la presencia de Yu Suzuki. El genio nipón rondaba por el E3 sin que nadie supiera muy bien para qué. Y claro, entonces saltó el chiste recurrente, el mismo de todos los años: ¡Ha venido para presentar Shenmue III! Pero era solo eso, un chiste, una broma interna intercambiada tanto por profesionales como por aficionados al medio. Era como decir “Eh, este año seguro que Sony presenta y pone fecha a The Last Guardian”. O como asegurar entre risas “¡Esta vez sí, esta vez Square anuncia el desarrollo del remake de Final Fantasy VII!”. Todos sabíamos que no era ni la primera, ni la segunda, ni la tercera vez que Yu Suzuki acudía a un E3, como también sabíamos que no sería ni la primera, ni la segunda ni la tercera vez que lo hacía para algo que no tenía nada que ver con Shenmue.

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Pero resulta que este año Sony no estaba para bromas. No lo estaba para The Last Guardian, no lo estaba para Final Fantasy VII, y tampoco lo estaba para el más improbable de este histórico triplete: Shenmue III. Alrededor de las cuatro de la madrugada en horario español, saltó el megatón. El mismo Yu Suzuki nos narraba a través de un vídeo que, no importa dónde fuera en los últimos 14 años, todo el mundo le preguntaba lo mismo: ¿Para cuándo Shenmue III? Pues bien, por primera vez en casi tres lustros, a continuación dio respuesta a dicha pregunta: Había decidido financiarlo a través de Kickstarter. Eran las tantas de la madrugada, así que seguro que no pocos se pellizcaron para asegurarse de que no se habían dormido encima del teclado del ordenador y estaban soñando. Pero no, no era un sueño. Nada de spin-off, nada de remake, nada de reboot, nada de FPS online, descerebrado y pasillero, con Ryo masacrando a los secuaces de Lan Di a golpe de plomo. La secuela del extraordinario Shenmue II lanzado en 2001, la continuación de la inconclusa saga, al fin era posible.

El destino de Shenmue ya no se encontraba en las manos de una Sega que llevaba años asfixiada, agotada y casi extinta. Ahora, el destino de Shenmue había pasado a las manos de los usuarios. El vídeo terminaba mostrando la dirección de Kickstarter desde la que se podía financiar el proyecto; y los usuarios, tras pellizcarse unos segundos más para cerciorarse de que aquello no era un sueño, acudieron en masa a la llamada. La cantidad necesaria para financiar Shenmue III era la de unos nada desdeñables dos millones de dólares. Pues bien, después de que la página se colapsara debido al alto número de internautas que accedieron al mismo tiempo, el dinero comenzó a subir. En poco más de cuatro horas, se había superado el millón y medio de dólares recaudados. En apenas ocho horas, el listón de los dos millones quedaba atrás. En el momento en que redactamos las presentes líneas, Shenmue III suma ya 2.911.701 dólares, lo que, por cierto, garantiza que el juego llegará con los textos traducidos al castellano, un lujo que ni el primer ni el segundo Shenmue pudieron disfrutar en su momento. Cuando vosotros leáis este texto, ya seguramente se habrán sobrepasado los tres millones de dólares recaudados, casi nada. (Actualización 18-6-15: La cosa ya va por los 3.133.521 $, increible).

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Los detalles del proyecto presentados en la web de Kickstarter son tan numerosos como jugosos. El juego ya está confirmado para PC y PS4, y correrá bajo el motor Unreal Engine 4, lo que garantiza un acabado visual a la altura de las circunstancias. Se intentará llamar la atención de una nueva generación de jugadores, pero Yu Suzuki ya deja claro que los aficionados a la franquicia de toda la vida pueden estar tranquilos: Shenmue III se encontrará repleto de elementos familiares inherentes a la saga. Todas las virtudes que convirtieron a los dos Shenmue anteriores primero en juegos de culto y luego en leyendas se encontrarán presentes en la tercera parte, aunque por supuesto no faltarán las novedades, y también se potenciarán elementos como las mecánicas de lucha, la interactividad con el entorno y el desarrollo de esa inolvidable narrativa que ha dejado huella en todo aquel que se ha acercado a la obra maestra de Yu Suzuki.

La historia arrancará justo donde terminó Shenmue II, aunque no es nuestra intención resumir aquí dichos acontecimientos. Ahora cobra más sentido que nunca jugar a esas dos piezas patrimoniales de la historia del videojuego que son Shenmue I y II, así que, si aún no lo habéis hecho, poned en marcha todos los medios posibles para remediarlo, os aseguramos que el esfuerzo merecerá la pena. El vengativo Ryo, la encantadora Shenhua y el malévolo Lan Di os están esperando. Dicho esto, ¿quiénes son los responsables de sacar adelante el proyecto? La cabeza visible, obviamente, es Yu Suzuki. Leyenda de la industria ya desde mucho antes del desarrollo del primer Shenmue, este genio nipón también cuenta en su currículum con títulos de la talla de Out Run, After Burner, Virtua Racing, Virtua Fighter o Daytona USA. Pocos son capaces de igualar tales logros.

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Otros nombres que sonarán al veterano que lleva más de una década aguardando el regreso de Shenmue son los de Takeshi Hirai (en labores de director creativo), Masahiro Yoshimoto (quien vuelve a encargarse del guión), Kenji Miyawaki (diseñador de personajes), Ryuji Iuchi (banda sonora), Manabu Takimoto (diseñador de escenarios)… En definitiva, Suzuki se ha asegurado de que la mayor parte del equipo que le ayudó a desarrollar los dos primeros Shenmue se encontrará a cargo de la anhelada tercera entrega de la serie, toda una declaración de intenciones que además asegura de cara al usuario que nos encontramos ante una continuación con todas las de la ley.

Como todos los proyectos financiados a través de Kickstarter, existen una serie de recompensas a las que el patrocinador tendrá acceso dependiendo de la cantidad de dinero que done al proyecto. Sorprendentemente, la mayor de las recompensas (una cena junto a Yu Suzuki para aquellos que contribuyan con diez mil dólares o más, limitada a tres plazas) fue de las primeras en agotarse. La chaqueta original de Ryo (también para aquel que soltara diez de los grandes y eligiera dicha chuchería) también tiene ya dueño. El resto de recompensas incluyen figuras de los protagonistas, una ilustración firmada por Yu Suzuki, un CD con la banda sonora, libro de arte, edición física de coleccionista, camiseta… En fin, todo lo que un seguidor de Shenmue pueda desear.

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Los objetivos también son ya clásicos en las campañas de Kickstarter. El objetivo inicial es alcanzar una determinada cifra para financiar con éxito el proyecto, pero a partir de ahí se suelen fijar otra serie de cantidades para hacer dicho proyecto más grande. En el caso de Shenmue III, ya se han alcanzado las metas que permiten poder contar con una serie de cortos que resumirán la historia de las dos primeras entregas, además de las que posibilitan disfrutar el juego con subtítulos en alemán, francés, español e italiano. Aún quedan en el aire tres metas (sistemas mejorados de relaciones entre personajes y árbol de habilidades expandido para Ryo, así como nuevos minijuegos), pero seguro que se acabarán alcanzando a no mucho tardar, no en vano a Shenmue III aún le queda algo menos de un mes para ver cerrado su Kickstarter. (Actualización 18-6-15: Al superarse los tres millones de dólares, se han fijado nuevos objetivos hasta los cinco millones, todos destinados a expandir las posibilidades jugables e interactivas de la ciudad en la que se ambientará el juego).

Obviamente, la gran pregunta que se hace todo usuario que no posea una PS4 o un PC es la de si podrá llegar a jugar a Shenmue III algún día. En principio, si de algo podemos estar seguros es de que jamás llegará a ver la luz para Wii U, sobre todo tras ser testigos en el último Nintendo Direct de cómo la gran N ya comienza a cavar la tumba de su malograda e infravalorada consola (por no mencionar el proceso de adaptación que sería necesario para trasladar el UE4 a su hardware). Pero, ¿llegará a Xbox One o NX? Los propios desarrolladores del juego contestan a esta pregunta en la página de Kickstarter con un escueto “Aún no se ha decidido nada sobre otras plataformas”. Sin embargo, en las últimas horas ha saltado una noticia que puede alejar Shenmue III de las plataformas de Microsoft y Nintendo. Gio Corsi, uno de los responsables de SCE Third Party Productions (la división de Sony encargada de las relaciones con desarrolladoras externas), ha desvelado lo que muchos ya intuían: tanto Shenmue III como su Kickstarter son hoy una realidad gracias a la propietaria de la marca PlayStation.

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Así que Sony se encuentra implicada en el desarrollo del juego al 100 %. Sorprendentemente, el nombre de Sega sigue sin aparecer por ninguna parte, así que aún no se sabe si ésta ha cedido la licencia o la ha vendido directamente, aunque todo apunta a una sesión dado que la compañía nipona renovó la marca el año pasado. Aun así, es poco probable, por no decir imposible, que Shenmue III llegue a ver la luz fuera del universo PlayStation y el entorno del PC. Pero no estamos dispuestos a poner la mano en el fuego para corroborar del todo dicha afirmación. Primero, por no caer en el error de creer a pies juntillas las informaciones provenientes de una compañía que, obviamente, está más que interesada en convencer a todo el mundo de que esto es una exclusividad permanente para su consola, al menos sin dejar la puerta abierta a algo más. Cosas más raras se han visto al respecto, hay muchos ejemplos, como aquél en el que todo el mundo aseguraba que las recordadas expansiones de Grand Theft Auto IV eran coto exclusivo de Microsoft (incluso llevaron el sello “Only for Xbox” en su edición física), y sin embargo éstas acabaron convirtiéndose en multiplataforma. Por ahora, Sony calcula que el juego estará listo para dentro de dos años, así que habrá que esperar y ver cómo se desarrollan los acontecimientos a partir de entonces.

Bien, una vez repasada la actualidad y todo lo que está dando de sí, es el momento de echar un vistazo al pasado. Seguramente, el nuevo lector que se haya sumado a esta afición a lo largo del presente milenio se pregunte ahora a qué demonios viene tanto revuelo por el anuncio de un juego. Dar una respuesta a esta pregunta es muy difícil, pero trataremos de hacerlo. Y no recurriremos a lo obvio de que Shenmue sentó las bases del sandbox actual, de que reinventó los quick time events presentados por Dragon’s Lair largo tiempo atrás (QTE que Suzuki tiene intención de reinventar de nuevo con este juego, por cierto), de que su apartado audiovisual y su manera de entender la narrativa marcaron un antes y un después… No, en lugar de ello, responderemos dicha cuestión con lo siguiente: Para aquellos que lo disfrutaron en su día, Shenmue, más que un juego y una secuela lanzados inicialmente en una consola de escaso éxito (la malograda e inolvidable Dreamcast), es un sentimiento, al igual que para el aficionado culé el Futbol Club Barcelona es más que un club. Para aquellos que han tenido el privilegio de vivir la experiencia, Shenmue es como un amor inolvidable al que no tuvieron más remedio que decir adiós cuando la relación se encontraba en su punto álgido. Un amor que no pudieron ni quisieron dejar atrás, al que llevan recordando y añorando desde hace muchos años y que siempre habían tenido la esperanza de volver a abrazar a pesar de que todas las circunstancias señalaban que el reencuentro jamás sería posible.

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Los desengaños al respecto han sido muchos. Por supuesto, la posibilidad de un Shenmue III siempre ha estado ahí. Los rumores han sido continuos e insistentes. En 2005 ya se apuntó a que un recopilatorio de los dos primeros Shenmue, junto a los capítulos que formarían la tercera entrega, llegaría en algún momento para la por entonces inminente sexta generación de videoconsolas. Por supuesto, aquello jamás llegó a cuajar. Las campañas, peticiones, firmas e iniciativas llevadas a cabo por los usuarios a lo largo del tiempo también han sido innumerables. Pero Sega, la propietaria de la licencia, siempre hizo oídos sordos a ellas. El desarrollo del primer Shenmue ya fue en su día el más costoso de la historia de la industria del videojuego, lo que hizo que Sega se hundiera aún más en el abismo. Y el intento de relanzar la saga en la primera Xbox cuando Microsoft compró la exclusividad de Shenmue II para su consola también acabó en desastre. Así que hasta podemos entender que cada vez que alguien mencionaba la palabra “Shenmue” delante de un ejecutivo de la compañía nipona éste reaccionara apretando los dientes y tapándose los oídos.

Ya hemos mencionado que a lo largo de los años Yu Suzuki no dejaba de ser interrogado acerca de las posibilidades existentes de desarrollar una continuación de la inconclusa saga, y siempre solía responder que si fuera por él, se pondría manos a la obra de inmediato (Shenmue es su gran obra, una creación enormemente ambiciosa que en su día no logró sacar adelante), pero que cada vez que mencionaba el proyecto a Sega, el portazo que recibía como respuesta se escuchaba hasta en Cuenca. La posibilidad de financiar el proyecto vía Kickstarter llevaba rumiándose desde que Tim Schafer dio la campanada con su Broken Age, pero esa era una posibilidad que solo los más optimistas creían que algún día llegaría a hacerse realidad. Pues bien, Shenmue III ya es una realidad. Ahora esperemos que tanto la primera como la segunda entrega vean de una vez la luz bajo plataformas digitales (de ordenadores, consolas, portátiles, smartphones, tabletas, y hasta en las de los relojes inteligentes si se da el caso) para que el público más joven pueda llegar a conocer y enamorarse de la franquicia antes del lanzamiento de la tan anhelada tercera parte.

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