Mortal Kombat X

Los años pasan pero las leyendas se mantienen vivas, al menos en el sector de los videojuegos. Hemos visto cómo un título de la dimensión de Street Fighter IV ha conseguido devolver al género de la lucha (no ahora en particular pero sí en los últimos años) a la primera plana y con su renacer, otras franquicias han hecho lo propio abrazando abiertamente las posibilidades que ofrecen los nuevos sistemas y adaptándolas a las mecánicas que siempre han caracterizado a cada uno de ellos. Pongamos como ejemplo el caso de Mortal Kombat, que en la época de PlayStation 2 partía de la base de tener a sus seguidores hastiados tras varios juegos mediocres en PlayStation (¿nadie recuerda los intentos de beat'em up?) o Dreamcast (Mortal Kombat Gold, quizá el peor de la saga) y que con Deadly Alliance ofreció un soplo de aire fresco mostrando personajes con varios estilos y la posibilidad de cambiarlos -y alternarlos- en tiempo real en mitad del combate. Sin embargo, la identidad de la seria parecía dudidativa. Deception apostó por otro estilo, al igual que Armageddon. Y luego, en 2011, llegó Mortal Kombat. Un reboot de los que hacen época.

NetherRealm Studios cogió el toro por los cuernos y consiguió que su licencia por fin se encontrase cómoda con su ADN. Nada de experimentos, simplemente recogía la materia prima de los originales y la exprimía para convertirse en un juego de lucha 1vs1 con movilidad 2D -al estilo, efectivamente, de Street Fighter IV- para crear un juego de lucha sólido y robusto, con sus movimientos salvajes, la predilección por el combo y la suma de mecánicas que hacían del título algo más dinámico que antaño. Aquel reboot fue el que marcó el devenir de la franquicia y es la base sobre la que se está construyendo este Mortal Kombat X, que si nada se tuerce podría ser el definitivo en términos de calidad. Es decir, lo que hemos visto hasta la fecha tanto en vídeos como en directo, a través de diferentes ferias internacionales en las que hemos podido ser testigos de su evolución (E3 o Gamescom, por ejemplo) apunta a la confirmación de que Ed Boon y su equipo están dando luz a un juego de lucha que -y esto es importante- por lo pronto va a estar disponible en el EVO de este mismo año. Es decir, que ya tiene la competición en mente y que apunta a ser una de las sorpresas del mayor evento del género a nivel internacional.

Sangre nueva
El núcleo de un buen número de juegos de lucha es evidentemente su capacidad para engancharnos a través de unas mecánicas sin fisuras, en las cuales haya un equilibrio entre la espectacularidad visual y la riqueza a nivel de mecánicas. Es decir, un juego con un motor gráfico excelso no serviría de mucho si el personaje se moviese lento, o golpease a destiempo, etcétera. Mortal Kombat X está cuidando todos estos aspectos para potenciar lo que vimos en la entrega anterior, añadiendo novedades que van desde lo jugable hasta, por así decirlo, lo pirotécnico. Y si hablamos de una saga con tanta solera como esta, conviene hablar de sus personajes y de la importancia que cobra la plantilla en un título de estas características. Hasta la fecha la gente de NetherRealm Studios ha confirmado la presencia de un total de catorce luchadores, trece de los cuales estarán en el juego de inicio mientras que el restante aparecerá como DLC a través de un código de reserva (aunque es de esperar que acabe pudiendo comprarse a posteriori). Veamos a continuación quiénes siguen optando al título de campeón en el Kombate Mortal.

Comenzamos por los clásicos, el icono de la saga: los ninjas. Sub-Zero y Scorpion son indiscutiblemente los personajes más visibles de la franquicia (este último, de hecho, aparece en el logo de NetherRealm Studios) y no se van a perder la posibilidad de seguir repartiendo tortas y alimentando su eterna rivalidad. Ambos contarán con todo un set de técnicas nuevas, además de las ya tradicionales como el gancho y la posibilidad de controlar el fuego de Scorpion, o el uso del hielo, generación de sombra gélida y proyectiles de Sub-Zero. Ambos cuentan además con un leve rediseño, haciéndolos más distintivos, más sólidos de cara a este salto generacional que experimentará la franquicia con Mortal Kombat X. Además de estos dos, se ha confirmado la presencia de al menos dos ninjas más, ambos con una distinción rotunda y que viene a ampliar la madurez de la franquicia en términos de diseño y estilo. Es decir, lo que en primeras entregas apenas era un palete swap (es decir, un cambio de color a nivel visual) se ha consumado en los últimos tiempos -y aquí en particular- como algo completamente único.


   
De esta forma, Reptile ya no es simplemente "Scorpion pintado de verde" sino que vemos cómo su diseño sigue evolucionando hasta ser prácticamente un hombre con escamas en lugar de piel, movilidad particular y ataques que se corresponden con esta condición. Si bien no se ha visto aún todo su repertorio desde luego cuenta con sus escupitajos de ácido y otras técnicas habituales del personaje. Lo mismo ocurre con Ermac, antaño simplemente un 'ninja rojo' y ahora todo un personaje con su aspecto amenazante y distintivo. Este último basa sus movimientos en el poder psíquico y es capaz de levitar, alzar al enemigo y además usa proyectiles. Su estilo podría recordar, por buscar un simil en Street Fighter, al de Rose. Quedan varios ninjas por confirmar de los clásicos en la franquicia (como Noob Saibot) pero de momento los cuatro que sabemos que estarán, lucen espectaculares y muy distintos entre sí.

Siguiendo con el plantel clásico, toca hablar por ejemplo de Kitana, princesa habilidosa en el uso del abanico y capaz de derrotar a prácticamente cualquier rival con sus salvajes movimientos de artes marciales. Por primera vez en bastante tiempo cuenta además con un diseño bastante elaborado, y es que parece que NetherRealm Studios está cogiéndole el punto de modelar personajes femeninos, una de sus tareas pendientes en entregas previas. Kung Lao vuelve al ring con un acabado visual más robusto, algo envejecido, pero perfectamente capaz de luchar usando su sombrero como proyectil (en algunos casos, de forma bastante salvaje) además de movimientos ágiles con puños y piernas. No faltará, claro está, otro icono como Raiden, Dios del Trueno, quien parece que saldrá realmente beneficiado en este Mortal Kombat X en cuanto a movimientos y posibilidades en pleno combate, como comentaremos más adelante. Quan Chi, hechicero y nigromante salido de Mortal Kombat Mythologies: Sub-Zero (un de las pocas cosas de aquel juego que se han rescatado a posteriori), también hará las veces de villano en este nuevo capítulo, al igual que pasa con Goro, el gigante de cuatro brazos, que estará disponible como extra con la reserva del juego.


 

Completando la terna de personajes icónicos, encontramos al asesino Kano, mercenario del clan Black Dragon que debutó en el primer juego de la saga allá por 1992. Sus habilidades, como en el caso de Raiden, parece que se verán potenciadas en este Mortal Kombat X, pudiendo aprovecharse tanto de sus movimientos a corta distancia como de las bonificaciones que le confiere su ojo robótico. Por supuesto, habrá también nuevos luchadores y de momento se conoce la identidad de cuatro en total. Relacionada con Kano, encontramos a Cassie Cage, la hija de Sonya Blade y Johnnie Cage -dos iconos de la franquicia- que parece contar con habilidades de ambos: combos aéreos, como su madre, predilección por las patadas, como su progenitor, y una fuerza que parece reunir ambos espíritus para dar forma a una luchadora con capacidad para enfrentarse a cualquiera. La historia de Mortal Kombat X se desarrolla 25 años después del último juego de la saga con lo que si contamos con este personaje, es poco probable que veamos a sus padres. Al menos, con el aspecto original, por motivos evidentes.

Más rostros nuevos los suponen los de Ferra/Torr, una dupla de luchadores conformada por un hombre musculoso, con aspecto animal y salvaje, y una niña que siempre va a su espalda. Sus ataques varían entre los físicos y lentos, con los cuchillazos de la joven, ágiles pero menos dañinos, por lo que habrá que encontrar un equilibrio para ver qué preferimos explotar con este luchador dual. D'Vorah es bastante más literal ya desde sus propias habilidades, porque esta mezcla de mujer (humana) y avispa es capaz de lanzar proyectiles en forma de insectos que dañan al rival además de tener una movilidad bastante particular. Es de todos los personajes confirmados por ahora el más sorprendente a nivel de diseño y movimientos, recordando más a un personaje de Darkstalkers o de Killer Instinct, aunque por lo que se ha visto se adapta bien a las mecánicas de Mortal Kombat X. Para terminar tenemos a Kotal Kahn, el que parece ser el sustituto de Shao Kahn -villano legendario de la saga-, con un aspecto imponente de luchador azteca (imposible no acordarse de Ogre en Tekken) y una fisicidad  reservada sólo para los verdaderos jefes finales. Se desconoce si ocupará este rol en Mortal Kombat X pero todo apunta a que sí.

Haciendo añicos al rival con estilo
Sabiendo ya los personajes que confirman la plantilla, toca hablar de las mecánicas de juego. Aquello que ha permitido la continuidad de sagas como Street Fighter, Tekken, Soul Calibur, The King of Fighters o Guilty Gear (entre otras). Y por supuesto, Mortal Kombat. Porque en este género en particular no se puede errar el tiro y hay que buscar algo diferente, pero sólido. La franquicia empezó siendo algo esquemática, apostando por el combate sobre el suelo y poco a poco se fue abriendo a los combos aéreos y los juggles, con ese ataque de launcher que tan bien se ha sabido explotar y otros comandos a distancia -proyectiles, gancho- que permiten tener al rival controlado, amén de teletransportes, disponibles para gran parte del casting. Cuando mencionábamos previamente Deadly Alliance lo hacíamos no sólo como nota cronológica, sino también como ejercicio de memoria: en aquel título, cada luchador tenía tres estilos alternables en batalla, dos de lucha física y un tercero con arma. En Mortal Kombat X se recoge aquella metodología con cambios importantes, por lo que podemos hablar de una evolución en toda regla de un concepto que funcionaba bien pero que ahora apunta a ser incluso mejor.

De esta forma, aunque no podremos cambiar de estilo 'al vuelo' en mitad de batalla, al elegir a nuestro personaje en la pantalla de selección tenemos la opción de marcar qué variación queremos aplicarle. Esto afectará moderadamente al aspecto visual del personaje -detalles en la ropa, en sus animaciones o efectos- pero sobre todo a nivel de mecánicas. Pongamos un ejemplo con un personaje clásico, como Raiden. Si decidimos elegir su variación Thunder God, es decir, Dios del Turno, el personaje mejorará sus ataques con relámpago, lo que le permite ampliar sus combos y registrar más hits de forma única, y derivando -además- en generar más daño con estos ataques. La variación Displacer es quizá la más compleja, o pensada para jugadores avanzados, pues sacrifica el daño que otorgaba la anterior para permitir al personaje teletransportarse y moverse con gran agilidad por el escenario. Las utilidades son varias: esquivar ataques que de otra forma nos impactarían, colocarnos en una posición donde el rival no cuenta que estemos, etcétera. Su tercera variación, Storm Lord (señor de tormentas) llega además con un cambio visual (su sombrero muestra pequeños rayos en movimiento) y su particularidad es permitir crear trampas electrificadas. ¿Qué significa esto? Que podemos crear una zona en la que si el jugador impacta, bien por un salto o porque le empujemos hacia ella, recibirá daño extra.



Cada uno de los 14 personajes anunciados por el momento contarán con estas variaciones y se extenderá a todos los demás que acaben entrando en plantilla, lo que de alguna forma, puede significar que la lista de luchadores se pueda considerar "multiplicada" por tres. Si dominar a un personaje en un juego del género tiende a ser complicado, hacerlo con sus tres variaciones permitirá a los jugadores pro -principalmente- y a los que quieran sacarle jugo al título, que habrá que echarle bastantes horas y dedicar tiempo a dominar cada movimiento. La idea es muy, muy buena, y sólo cabe esperar que estas variaciones se exploten con total soltura de cara a que el juego sea realmente completo. Es decir, que no haya cuatro movimientos distintivos mientras que todos los demás se comparten. Del mismo modo en Mortal Kombat X encontramos novedades o mecánicas expandidas con respecto a juegos anteriores. Tal es el caso -hablando de esto último- de los ataques X-Ray (dos por personaje), que se realizan cuando una barra de energía llega al máximo y rompen literalmente los huesos del rival, haciéndole un daño masivo (de la lógica no hablemos: algunos son tan bestias que impedirían seguir peleando al personaje) y, cómo no, porque esto es un Mortal Kombat, no faltarán los Fatality. Más salvajes que nunca, algunos de ellos tan complejos que parecen un juego de matrioskas: bestialidad dentro de bestialidad. Los amantes del ultragore cartoon están de enhorabuena. Por cierto que éstos son sólo uno de los cinco finishers que habrá en el título.

Entre las novedades, de alguna forma, encontramos cómo por ejemplo los escenarios serán mucho más dinámicos que antaño. Mortal Kombat siempre ha llevado la delantera en este aspecto a otros juegos del género (una de las novedades de Street Fighter V, por ejemplo, será permitir romper zonas del escenario para desplazarnos a otras posiciones; una de las señas de identidad de MK) pero aquí implementará algo que se exploró en el juego anterior de NetherRealm Studios, el sólido Injustice Gods Among Us: interacción con mapeado en forma de objetos determinados o zonas en las que podemos rebotar o generar un daño extra. En Injustice, aunque podía desactivarse, podía poner las cosa a nuestro favor -o nuestra contra- si se abusaba de ellas en ciertos escenarios, por ejemplo lanzando robots que aparecían continuamente por escenarios como el hangar. Aquí por lo que se ha visto se ha reducido hasta lo puramente razonable: usar una rama para colgarnos y dar un salto, una roca para lo mismo, etcétera. Si tenéis malas experiencias con el juego de los superhéroes (y villanos) de DC Comics no temáis: aquí parece mucho más equilibrado.



Por último pero no menos importante, Mortal Kombat X muestra un acabado espectacular a nivel de animaciones, efectos de luz, diseño de personajes y puesta en práctica, con modelos robustos y detallados. No podíamos pedirle menos a su estudio, pero la cosa no va a quedarse únicamente en -como apuntábamos al principio, lo pirotécnico- sino que el estudio ha hecho todo lo posible para ofrecer una experiencia a nivel de modos de juego y sobre todo, potenciación del online, que va a permitir poner en práctica todo lo aprendido hasta la actualidad con la licencia. Por lo pronto, al poner el disco en nuestra consola podremos elegir una facción entre Lin Kuei, Hermandad de las Sombras, Lotus Blanco, Fuerzas Especiales y Black Dragon, y encontraremos funciones online que -se espera- vayan más alla´del competitivo 1vs1. Por otra parte, como en Injustice Gods Among Us, MKX ofrecerá desafíos diarios, modos Rey de la Colina o Superviviente, entre otros, además de varios lobby tanto privados como públicos, con posibilidad de enviar desafíos individualizados a cada jugador. NetherRealm Studios nunca decepciona en cuanto a llenar sus juegos de contenido (modos, desbloqueables, etc.) así que total confianza en lo que hagan aquí.

El Kombate Mortal, en abril
Si después de leer todo esto estáis como locos por ponerle las manos encima a Mortal Kombat X, estáis de enhorabuena porque queda muy poco para que podáis hacerlo: el juego llegará a las tiendas el próximo 14 de abril tanto en consolas de actual generación (PlayStation 4, Xbox One) como las de la pasada (PlayStation 3, Xbox 360) además de PC (estos son sus requisitos mínimos). Queda por ver pues el resultado final, si ser multigeneracional no hace que sus versiones 'new-gen' no acaben de dar la talla ( tranquilos: nada apunta a ello de momento) y su sus promesas se convierten en ideas en firme sobre la mesa. NetherRealm Studios y Warner por lo pronto ya ofrecen varias opciones para hacerse con él, habiéndose anunciado hasta cuatro ediciones (al margen de la básica, claro) que incluirán distintos contenidos y que oscilan entre los 90$ -la más barata, una Premium Edition con DLC, sólo digital-  y los 180$. Esta última incluye una figura de Scorpion entre otros extras. Lo único que compartirán estas versiones es el llamado "Kombat Pack", un DLC que dará acceso a cuatro personajes extra entre los que habrá, además de luchadores clásicos, algunos "invitados icónicos". En el Mortal Kombat anterior tuvimos a Freddy Krueger... ¿Qué sorpresas se guardarán Ed Boon y su equipo en la manga? En poco más de dos meses, saldremos de dudas.