Sleeping Dogs: Definitive Edition

Hace no demasiados años el que era True Crime: Hong Kong pasó a manos de Square Enix y United Front Games para remodelarse en 2012 en Sleeping Dogs, un sorprendente, fresco e inesperado sandbox que recogía lo mejor de otros de su género como GTA, Batman Arkham City o Yakuza para dar forma a una experiencia tan bien acabada como divertida, una aventura de mucha acción espectacular y violencia que nos llevbaba hasta las calles de la inconfundible y lluviosa ciudad oriental para adentrarnos en las tríadas y las mafias chinas menos amigables desde una doble perspectiva. Así conocimos a Wei Shen, un joven agente que debía empuñar su destino en secreto a base de hacerse un codiciado hueco entre las altas esferas del crimen organizado. Aquí su Análisis original.

Sleeping Dogs ganó desde su lanzamiento una buena base de fans y aún son muchos lo que desean probarlo pero no terminan de convencerse. Nueva IP, una ciudad muy distinta a las convencionales urbes norteamericanas cuadriculadas y una historia dual realmente diferente, pero en definitiva un sandbox tan bien acabado y repleto de variedad de situaciones y misiones que llama la atención hasta de los menos asiduos al género de las ciudades abiertas y los encargos. Para todo este cúmulo de gente que no lo probó en su día y para los fans que quieran revivirlo como el gran juego merece, Square Enix lanza este 10 de octubre Sleeping Dogs: Definitive Edition en las tres plataformas de nueva generación capaces de correr con soltura unos mejorados gráficos 1080p, PlayStation 4, Xbox One y PC. Eso sí, a 30 frames por segundo, estables.

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Los 24 contenidos descargables lanzados para el juego se incluyen en esta edición definitiva y bastante limada técnicamente. Ya la hemos probado a fondo, para comprobar que se ha logrado un nivel de remasterización como el que corrió Tomb Raider: Detinitive Edition para PS4 y One, es decir, en algunos aspectos particulares un juego rehecho y muy perfilado. Por ejemplo, las calles de Hong Kong tendrán un 25% más de transeúntes o todas lass superficies mojadas cuentan con una nueva tecnología de reflejos que crea charcos reflectantes y masas de agua hiperrealistas y cambiantes. Muchas texturas ganarán en definición, los modelados de los personajes cuentan con mejores curvas, dibujado del rostro no tan plastificado o elementos como la bruma y el humo adquieren una apariencia volumétrica y más creíble y natural.

En pantalla, esta Definitive Edition al lado del original realmente supone un buen paso adelante. Lo hemos visto en los fragmentos de la trama que seleccionaba esta demo previa para enseñarnos cómo se han impuesto las novedades, cómo se manejan diversas armas y vehículos, así como para que veamos que todos los DLCs y expansiones estarán en esta versión. Los combates cuerpo a cuerpo, heredados del sistema de los Batman de Rocksteady y uno de los aspectos que más se elogiaron de Sleeping Dogs, ahora cuentan con entornos más destruibles y elementos que se rompen en más piezas, lo que crea un entorno de peleas callejeras más espectacular y pulido en detalles. No es que Shen tenga nuevos movimientos o haya nuevos enemigos, sino que la ejecución de los combos y llaves se expone de otra forma en escenarios que se destrozan con facilidad y verosimilitud.

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La iluminación y las partículas mejor resueltas quedan expuestas en la misión de aprendizaje del combate, una de las primeras donde Shen acompaña a su amigo a través del Night Market exterior lleno de vida y gente, ahora más todavía. Al acabar el asalto de matones y aprender los golpes básicos para luchar cuerpo a cuerpo vemos uno de los detalles tratado como incorporación inédita, la nueva animación de Pork Bun Man. Tras ello ponemos a prueba las armas y los nuevos comportamientos. El arsenal, gigantesco y más enorme aún con los añadidos de los DLCs, incorpora todo tipo de armamento, con mejor efecto de fogueo, animación de recarga, etc.

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La conducción en la calle, con vehículos que ajustan sus físicas, tienen mejores reflejos en las carrocerías, mejores faros, efecto de deterioro con las colisiones... Todo el garaje es también enorme, y se moverán en una Hong Kong refinada en texturas, detalles, población en la calle y con comportamientos más creíbles. Por supuesto, se cambian algunos de los trajes de los personajes y se añaden todos los incorporados con los DLCs que tuvo el juego original, también con el coche por DLC Trans Terra 5. Eso sí, todo con un máximo de 30 frames por segundo.

Con todo esto viene armado Sleeping Dogs: Definitive Edition, exactamente el mismo estupendo, grande y variado sandbox de hace dos años pero con todos los contenidos adicionales incorporados y un refinado técnico que en los primeros minutos ya queda perfectamente latente. Costará 59,90 euros, un precio algo elevado para una reedición por muy remasterizada y con los DLCs que llegue, pero que será apetecible para quienes no lo jugaron en su día y quieran sacar todo el partido realista y técnico a la experiencia.