Dark Souls II - La Corona del Rey Hundido
- Plataforma3608.5PS38.5PC8.5
- GéneroRPG, Acción
- DesarrolladorFrom Software
- Lanzamiento22/07/2014 (360, PC)23/07/2014 (PS3)
- TextoEspañol
- VocesInglés
Dark Souls 2: La Corona del Rey Hundido
El primer DLC de la trilogía que From Software y Bandai Namco han preparado para Dark Souls 2 llega con nuevos peligros, enemigos, armas, objetos y secretos. El desafío vuelve a llamar a tu puerta.
DarkSouls II salió durante el pasado mes de marzo –en PC, abril- y se convirtió en otro imprescindible dentro de la saga Souls. From Software no ha fallado en ninguna de las tres iteraciones que ha lanzado hasta el momento de sus exigentes Action RPG, pero querían más. Y eso pasaba por ampliar la aventura de DarkSouls II con una trilogía de contenidos descargables que está previsto que llegue entre este mes de julio y finales de septiembre. El primer DLC de ellos, La corona del Rey Hundido, ya está con nosotros. Y consigue mantener la esencia del juego y de paso estrenar de manera esperanzadora esta propuesta de contenidos descargables que amplíen la experiencia de juego. Aunque no lleguemos a tener ante nosotros una expansión del calibre del Abismo de Artorias.
La primera vez que vimos algo parecido a la Corona del Rey Hundido fue con motivo de la salida de DarkSouls en PC. El juego llegaba a compatibles con una expansión dentro de su Prepare to Die Edition en la que visitábamos una gran zona nueva llena de diversas áreas, enemigos y jefes finales. Para acceder al Abismo de Artorias, además, también teníamos que hacer una serie de cosas que todavía le daba más interés a la expansión en sí. Una especie de misión secundaria antes de poder adentrarnos en dicho universo. Eso era tan solo el preludio de una expansión con todas las letras. Con la Corona del Rey Hundido esto se ha perdido un poco, ya que no es necesario descubrir el camino hacía esta nueva zona ni hacer nada especial más allá de ir a un punto concreto: El desfiladero negro.
Como ya sabréis, y sino deberíais, el gran pozo que hay justo en el centro de la ciudad de Majula esconde dentro de sí un par de zonas, entre ellas las alcantarillas que nos llevarán hasta el Desfiladero Negro, una zona peligrosa que sirve de antesala para enfrentarnos a uno de los jefes finales del juego: el Podrido. Si todo esto no lo habéis hecho en DarkSouls 2 tal vez todavía no sea el momento de visitar el DLC. En todo caso, se accede a esta zona tirándonos al vacío –con el anillo del gato que amortigua la caída- o si ya hemos conocido al NPC que nos permitirá usar una escalera para llegar al fondo del pozo. En la sala donde vencimos al Podrido –es obligatorio haberlo matado- encontraremos un camino en el que podremos usar un objeto que se nos ha equipado al descargar el DLC. Y de allí nos trasladamos a la ciudad de Shulva, las mismas puertas del infierno.
Nuestros primeros pasos por el contenido descargable son toda una declaración de intenciones. Llegamos por un camino hasta toparnos con una imagen y unas vistas realmente impresionantes: vemos una enorme estructura a modo de pirámide al fondo. Hasta allí tendremos que llegar, pensamos. Una hoguera a los pocos metros nos da esa tranquilidad tan buscada en DarkSouls 2. Y empezamos el periplo por las afueras de la enorme estructura. Los primeros esqueletos armados avisan: no es un lugar para novatos. Ya no se trata solo que con niveles de 60-70 o menos la cosa sea complicadísima, sino también del equipamiento que llevemos. Anillos y armaduras que nos permiten ir protegidos y ligeros de carga y contar con armas-conjuros poderosos es clave. Agilidad y contundencia en nuestros ataques. Más que nada porque los enemigos que encontramos son duros y no están solos.
Uno de los grandes contratiempos en DarkSouls 2, algo que provoca muchas muertes, es precisamente los combates contra multitudes. Y aquí esto está presente cada dos por tres. No es raro estar ante cuatro o cinco enemigos capaces de quitarnos un tercio de vida –o más- de un solo golpe. A lo que se suman arqueros con una puntería y un rango desesperante. Por lo tanto, el desafío en este DLC está presente desde un primer momento, algo que muchos jugadores celebrarán. Además, también se ha añadido un sistema de puzle de lo más curioso. Mientras intentamos llegar a la gran estructura que vimos anteriormente tendremos que construir nuestro propio camino activando una serie de pilares repartidos por el mapa que mueven y cambian las estructuras de sitio. No es nada excesivamente complejo, pero le da un toque de reflexión interesante a la zona y también nos permite, si jugamos con estos pilares, acceder a diversos puntos en los que hay objetos y secretos.
Durante nuestro periplo en las diversas zonas de este DLC, y superado ya el exterior que estaba custodiado por un enorme dragón que nos encontramos a los dos minutos de empezar, los enemigos van apareciéndose y variando en tipología. Algunos esqueletos más equipados –escudos-, soldados que tienen mecánicas y patrones complicados –como movimientos evasivos con ataques que nos traerán de cabeza-, insectos con veneno, estatuas o monstruos a dos patas de tamaño considerable. Por no hablar de fantasmas blancos que son una auténtica trampa: parecen esos personajes de otros jugadores, pero en realidad son enemigos y de los duros.
Pero entre los enemigos de este contenido descargable destacan sobre todo dos tipologías: los enfrentamientos con algún que otro NPC y los jefes finales. En el primer caso y sin ánimo de destripar ningún tipo de batalla, contaremos que hay algún momento realmente duro y desafiante. De los mejores combates que recordamos ante este tipo de contrincante. En el segundo, los jefes finales que nos podemos encontrar destacan, sobre todo en dos de ellos, por el emplazamiento en el que nos enfrentamos –desprende épica pura- y por el combate en sí, sobre todo ante el Jefe final antes de conseguir nuestro gran objetivo. Aquí, en batallas contra jefes, tampoco nos libraremos de la norma que rige este contenido descargable: luchar contra un grupo de enemigos siempre es más complicado. Y si es un grupo de jefes, peor todavía.
Cuando avanzamos en otras dependencias de Shulva, como el Gran Santuario del Dragón, veremos como a la fauna y flora de la expansión se le añade, también, un sinfín de pasillos y habitáculos distribuidos de forma laberíntica. Como es habitual en cada una de las zonas que visitamos de DarkSouls 2, aquí también encontraremos todo tipo de secretos en forma de objetos y nuevas armas. Muchas de ellas nos pueden pasar desapercibidas si no vemos el camino medio escondido en una esquina o ese interruptor en lo alto de una pared que casi ni se ve. Esto alarga algo más la vida útil de un contenido descargable que se nos puede ir tranquilamente a las cinco horas de juego a poco que muramos más de una vez buscando nuestro camino o luchando con grupos de enemigos.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.