Far Cry 4, Impresiones E3

Far Cry 3 salió tan bien en otoño de 2012 que no era de extrañar que Ubisoft Montreal aprovechara aquel sistema de aventura sandbox tropical para un nuevo título. El ejército demente de la isla tropical con su carismático líder al frente, Vaas Montenegro, da paso ahora a un nuevo engendro extravagante, Pagan Min, como cara representativa de un título que realmente recuerda muchísimo a aquel tercer Far Cry, solo que ganando en actualizaciones y puestas al día jugables y técnicas. El nuevo viaje al Himalaya para cumplir una misión trascendental nos lleva hasta un entorno igual de vasto, frondoso y espectacular, pero mucho más vertical y accidentado, que además quiere sacar su mejor cara en PC, PlayStation 4 y Xbox One, pues este Far Cry 4 será transgeneracional aunque con ventajas importantes en las nuevas máquinas. Especialmente PS4 donde permitirá dar cabida a un amigo online de forma gratuita, solo con nuestra copia del juego.

Conocimos a Pagan Min rodeado de polémica en cuanto se filtró la portada, con un aire racista y macabro como todo el juego va a manifestar. En este E3 2014, lo hemos visto abriendo la conferencia de Ubisoft con una secuencia que unía cinemática y gameplay, y posteriormente en la de Sony para enseñar su agilidad, dinamismo y nueva verticalidad, tanto para uno como para dos jugadores que pueden coordinarse para acabar de forma aún más eficaz las misiones. Por supuesto, MeriStation también ha podido jugarlo a pie de pista -en PS4- y comprobar cómo se mueve a 1080p y a framerate estable, qué sensaciones transmite mando en mano y qué innovaciones de peso añade. Los animales, los vehículos y las particularidades de un entorno extremo como éste vuelven a ser la salsa de un FPS con bastante libertad, apertura y un puntito demencial.

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La historia nos pondrá en los ojos y gatillo de Ajay Ghale, un joven hindú que regresa en tren a su casa original en la comarca de Kyrat cuando ve el convoy asaltado por una especie de milicia muy extraña y gobernada por un chulesco moderno de flequillo blanco con ropa cara. Su misión no era otra que la de esparcir las cenizas de su madre recién fallecida donde ella había deseado, pero la demencia y la crueldad tienen otros planes para él y otros pasajeros. De esta forma que vimos bien reflejada en la conferencia de Ubisoft, Ghale tendrá que aprender a sobrevivir en un entorno tan hostil y lleno de espacios diferentes como riscos nevados, cascadas espectaculares, arenas movedizas o pobladísimos bosques. Un ecosistema virgen asdiado por este ejército asiático desconocido y que está implantando sus bases y vehículos en el paso montañoso.

La misión de la demo jugable no iba más allá de los 5 o 7 minutos de tiroteos y trampas para resolverla, pero decían sus responsables que "refleja muy bein el nuevo aspecto para Far Cry". Se trata de un asalto a un campamento fortificado, tarea que tendremos disponible al jugar en solitario pero también como una de las posibles a compartir con otro jugador. La primera gran baza y mucho más importante de lo que creíamos reside en el gancho de escalador, un arpón que nos dejará colgarnos de riscos, subir por paredes o dejarnos caer rápido al vacío sin miedo. La estructura en terrazas y escalonada de esta parte del mapa de la altísima cordillera obliga a jugar mirando tanto hacia abajo y arriba como a los lados, planteando una estrategia basada en el movimiento y la composición cruda del entorno. Y, con ello, los animales, partícipes absolutos de nuestra primera forma de tomar esta base enemiga.

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De todo tipo, aves, mamíferos, peces y reptiles, desde una serpiente que dé un buen susto a un soldado adormilado y solo hasta el elefante que vimos en el gameplay de Sony y que hemos confirmado que podremos montar como si fuera un caballo y hasta manejar como un destructor vehículo más. El tono serio de la historia de Far Cry 4 empieza a irse de madre en cuanto damos rienda suelta a nuestra creatividad y todas las opciones que dispone el título para que el jugador o los jugadores resuelvan las misiones como más les apetezca. Si optamos por una vía sigilosa, probablemente corramos menos riesgos de tener que volver a empezar desde el checkpoint inicial pero también tardaremos más y tendremos que medir bien cada paso. Ir como Rambo, en cambio, supone un despliegue armamentístico fenomenal pero llamaremos la atención de enemigos de media ladera, ahora bastante inteligentes y con tácticas de ataque y coordinación que nos han parecido interesantes.

Empujar o dar patadas a barriles explosivos en una cuesta por la que suben doce rivales es una alegría jugable y visual bastante exagerada pero que en Far Cry 4 sigue sin fallar en eficacia y diversión. Lo mismo para trucos como esparcir comida hasta hacer un cebo de animal en el suelo que llame la atención de un soldado al que noqueará un puma por sorpresa, o hacer ruido para atraer a otro enemigo a un punto que nos interesa y hacer un letal headshoot con la nueva ballesta automática capaz de disparar varias silenciosas flechas en décimas de segundo. Respecto a armas, regresa el arsenal previsible pero también algunas excéntricas como granadas de fragmentación y lanzamisiles bastante rápidos. Far Cry 4 es realista pero apuesta por la espectacularidad e intensidad jugable, ahora más que nunca al combinar todo esto con el traje de planeo, tirolinas, el gancho o vehículos voladores.

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Además, hay una buena resolución de comandos adaptados al mapeado de botones. Disparar desde vehículos y mientras conducimos ya es posible con solo anclar un rifle al salpicadero, así como saltar a vehículos en marcha para con suerte acabar con sus tripulantes y tomarlos, o colocar una torreta manejada por un compañero en el remolque de nuestra moto-camioneta todoterreno. Lo nuevo de Ubi en la serie original de Crytek parece sentirse libre técnicamente al fin y poder experimentar con mecánicas muy de moda hoy y que ya hemos visto en otros juegos pero conjugándolas en esta línea de paraísos que acostumbran a ser el escenario de los Far Cry. Recuerda mucho a FC3 pero con mayor verticalidad y sin límites. Ahora podemos viajar volando, destrozar más la naturaleza o cumplir cada nuevo paso hacia el malvado Pagan Min de bastantes formas posibles.

Parece lograr ese equilibrio arcade pero profundo y muy eficaz que tan bien funcionó en el anterior, también ahora con un aspecto gráfico que para quien venga de PS3 y 360 sorprenderá, aunque no tanto para los que jugaron FC3 en PC en su día. En definitiva, y por lo poquito jugado en esta toma de contacto inicial en el E3 2014, no se han querido tocar las bases que hicieron fantástico al de hace dos años pero sin embargo sí se han querido perfeccionar e intentar amortizar mejor la nueva tecnología para permitir un multijugador cooperativo persistente donde en cualquier momento un amigo puede unirse a nuestro periplo. Tendrá también competitivo y el elogiado editor de mapas, aunque estos detalles tendrán que esperar a sucesivas previews y datos oficiales para salir a la luz. Al menos esta gran y desmadrada aventura no se va a 2015. Será uno de los juegos de este otoño, en sus versiones de nueva generación preferiblemente, con lanzamiento simultáneo en todas el próximo 20 de noviembre.