Game of Thrones Ascent

La cuarta temporada de Juego de Tronos se acaba de estrenar con gran éxito mundial y no queremos perder la ocasión de recuperar un título que llegaba a la AppStore unas semanas atrás para deleite de los fans de la obra de George R.R. Martin. Game of Thrones Ascent, desarrollado por el estudio norteamericano Disruptor Beam, ha logrado cierta repercusión como aplicación social en Facebook y navegadores ‒con más de 2,5 millones de jugadores‒, presentando ante los jugadores un vasto mundo inspirado en dicha obra literaria a modo de juego de estrategia y gestión con ciertos toques RPG. Y es que las diferentes adaptaciones de Canción de Hielo y Fuego al formato videojuego no han destacado precisamente por su calidad; ahora, nuestros iPad ‒próximamente también disponible para tablets Android‒ reciben un free to play con horas, semanas y meses por delante para aquellos que quieran profundizar en las intrigas y las batallas por el Trono de Hierro. Veamos en nuestro análisis si vale la pena tanta dedicación al enésimo juego freemium, esta vez, bajo el paraguas de una franquicia mundialmente conocida.

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Eso sí, desde Disruptor Games no se han olvidado de los grandes clásicos del género, numerosos títulos que durante los años 90 llegaban a nuestros vetustos PC como si de libros de rol se tratara, títulos de compleja estructura que nos invitaban a disfrutar de historias profundas amenizadas con todo tipo de ilustraciones y diálogos, infinidad de textos por leer, generalmente en inglés. Y aquí llega uno de los puntos clave de Game of Thrones Ascent; tanto es así que llega totalmengte en inglés, un hándicap muy importante para aquellos jugadores que no tengan un gran nivel de dicho idioma, debido a la complejidad de lectura de un título de este tipo, con infinidad de elementos, conversaciones y explicaciones mediante texto. Si bien es cierto que podemos seguir más o menos su desarrollo sin tener un gran conocimiento de inglés, nos perderemos multitud de detalles de vital importancia.

Lo primero que deberemos hacer una vez descarguemos la aplicación ‒poco menos de 100 MB‒ será crear nuestro propio personaje protagonista, ya sea hombre o mujer, así como su clase y nombre, predefinido o a nuestra elección. A partir de aquí podremos ir personalizando un buen número de elementos clave, como las habilidades en combate, la personalidad u objetos y armas preferidos, entre muchos otros. A medida que vayamos cumpliendo con todo tipo de quests, iremos forjando multitud de aspectos de nuestro protagonista y de nuestro entorno, lo que marcará el devenir de nuestra partida. Los fans de las novelas o de la serie deben saber que no se trata de una adaptación paralela a los hechos que todos conocemos o que vamos descubriendo con cada nuevo capítulo; Game of Thrones Ascent actúa de precuela a los inicios de la historia original, poco tiempo antes de la muerte de Lord Jon Arryn, Mano del Rey Robert Baratheon.

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Quizás este aspecto no termine de gustar a los fans más acérrimos de Juego de Tronos, aunque sí seremos testigos de constantes pinceladas a los futuros acontecimientos, además de todo un mundo lleno de constantes referencias a Poniente, como las familias que todos conocemos ‒Stark, Lannister, Targaryen, Tyrell o Greyjoy, entre otras‒, así como localizaciones tan famosas como Invernalia, Desembarco del Rey o el Muro. Una vez nos hayamos decidido por nuestra Casa favorita con el objetivo de emprender alianzas que aseguren nuestro futuro, ya podemos empezar a construir nuestra propia Casa. Si bien al principio apenas tendremos dinero o tierras ‒incluso podremos crear nuestro propio escudo y emblema‒, pronto empezaremos a crecer tras cumplir con nuestras primeras misiones.

Al inicio avanzaremos con cierta facilidad gracias a un tutorial bastante completo y ameno, que nos servirá para que empecemos a familiarizarnos con un interfaz realmente extenso y lleno de sub-menús y pestañas. Si bien ha sido rediselaño para adaptarse al control táctil, presenta tal magnitud y profundidad que pronto nos sentiremos intimidados. Y como decíamos anteriormente, el idioma no acompaña precisamente. A partir de aquí podremos entablar relaciones con otras Casas, cumplir misiones, construir edificios y lidiar con todo tipo de problemáticas relacionadas con la gestión de nuestra ciudad, además de estar pendientes de la evolución del resto de familias. Nada nuevo en un título de estas características, aunque Game of Thrones Ascent apuesta por un interfaz contextual basado en ventanas, globos de diálogos e iconos para aceptar o cancelar diferentes acciones.

En este sentido, recurre a una puesta en escena limitada aunque con un diseño artístico más que vistoso, basado totalmente en menús e ilustraciones. Olvidaos de cualquier concesión a secuencias tridimensionales o incluso animadas; todo se basa en imágenes estáticas. A nivel sonoro se mantiene en términos similares, con constantes evocaciones a la serie de televisión mediante conocidas melodías; con todo, artísticamente se mantiene muy fiel a la obra original. La parte de gestión free to play viene marcada por la necesidad de conseguir recursos para nuestras tierras ‒como piedra, hierro o dinero‒ para así lograr pasar de una pequeña aldea a una ciudad llena de vida. Y como buen título freemium, tanto los contadores de segundos, minutos y horas como la moneda premium y los micro-pagos harán acto de presencia constantemente.

De nosotros dependerá si queremos invertir algo de dinero real para avanzar con soltura o mantener un ritmo de juego más lento con grandes espacios de tiempo. Si bien no son obligatorios, sí hacen de Game of Thrones Ascent una experiencia más satisfactoria para el jugador medio poco acostumbrado a este tipo de títulos. Además, podemos formar clanes con jugadores de todo el mundo y llegar a interactuar en su vertiente más social. Está claro que Disruptor Beam ha pensado en los jugadores más experimentados, aunque los que quieran profundizar en su complejo interfaz, podrán avanzar y cumplir con sus primero objetivos sin muchos problemas. No aporta nada nuevo al género, aunque contar con una franquicia tan popular como Juego de Tronos es un plus que muchos jugadores sabrán valorar.

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