Héroes caídos en desgracia

Grandes, populares, exitosos, perseguidos, ricos, rentables, ambiciosos, prometedores, perfectos. Cualquiera de estos adjetivos sirven para definir a un gran personaje de videojuegos, a esa enorme leyenda que siempre es recorda cuando se habla de seres virtuales míticos que han destacado por alguna particularidad. Son los Cristiano Ronaldo o los Messi del ocio digital, auténticas fieras que funcionan tanto en el panorama comercial como en el sector de los fans y la crítica. Pero para que existan estos reyes, es necesario que también se presenta la cara opuesta, los grandes fracasados. El Yang de los triunfadores, el personaje que, como Maradona -por seguir con el símil deportivo-, tiene una larga mala racha, de la que consigue salir (o no) y que le marca de por vida. Son los llamados también juguetes rotos, personajes que una vez gozaron de gran éxito y que ahora están condenados al ostracismo.

Algunos de estos seres digitales defenestrados no levantan cabeza nunca; otros tienen intentos loables que los dejan como segundones supervivientes, un consuelo más teniendo en cuenta lo complicado que es alcanzar el éxito en un mercado tan competitivo como el de los videojuegos en la actualidad. Para ellos, pero sobre todo para sus creadores, aparecer en un reportaje como éste debe ser la peor condena. Conseguirlo es tan sencillo como toparse con varios fiascos consecutivos en su historial de juegos, practicar deportes de riesgo coqueteando con algún género equivocado o ser tapado por un secundario con exceso de carisma. Eso sí, los candidatos deben haber destacado previamente y ser reincidentes en el fracaso. No es fácil entrar en este listado de caídos, pues para meter la pata también hay que tener estilo, pero sí es difícil salir del círculo.

Crash Bandicoot

Si nos remontamos a la época de la primera Playstation, nos encontramos con el que para muchos fue un gran héroe de su infancia, el marsupial Crash Bandicoot. Antes de Uncharted y de Jak & Daxter, en Naughty Dog existió este personaje cómico, capaz de hibridar el tono de Donkey Kong con la diversión de Mario, añadiendo su propio sabor para dar como resultado un plataformas excelente. Tres entregas tradicionales más una cuarta de karts le convirtieron en el icono mayúsculo de PSX. En su nacimiento se implicó el ahora ingeniero jefe de PS4, Mark Cerny, antes en el área de videojuegos de Universal (Vivendi más tarde), para quedarse en la casa de Call of Duty, Activision, donde vivió una conversión que le llevó por derroteros de “malote” para atraer nuevos jugadores. Ni en la época de PS2 ni en la anterior generación consiguió recuperar su fuelle, algo que sí alcanzó Spyro con una rentable reconversión a Skylanders. La propiedad intelectual sigue en manos de Activision, aunque los rumores hablan de un posible retorno a SONY.

Duke Nuken

Se nos fue un mito con Duke Nukem Forever. El macho alfa de la industria del videojuego, el único y verdadero capitán de un ejército de mujeres en bikini y de los esteroides como forma de vida, ese gran patriota americano llamado Duke que tanta diversión y risa generó en la década de los noventa, no ha conseguido adaptarse a los nuevos tiempos. Los constantes cambios de manos en el desarrollo del shooter, que pasó tantos estudios como casi entregas tiene la serie, le han hecho pagar muy caro el paso de los años. Ni siquiera en Nintendo DS, donde lo tenía relativamente fácil, consiguió despertar el interés de sus fans. El machote está de capa caída desde hace años guiado por una mala racha que le hace ir de gatillazo en gatillazo con cada nuevo videojuego. Pero todavía queda un rayo de esperanza para Duke, pues desde 2K Games no tiran la toalla y esperan encontrarse con el soldado universal en los próximos años. Eso sí, como no cambie de fórmulas, no nos va a quedar más remedio que reservarle un espacio en el cementerio de ex grandes héroes.

Sherry Birkin

Suele suceder en esto de los personajes venidos a menos que van de la mano de una saga que ha sufrido el desgaste del tiempo. El caso de Resident Evil es particular, pues la conversión de Resident Evil 4 gustó a buena parte de los fans de la acción. La quinta y la sexta entrega siguieron este esquema, condenando la fórmula del survival horror tradicional y llevándose por delante a una joven víctima, la heroína Sherry Birkin. Pongámonos en situación: la hija de William Birkin, científico de Umbrella, estuvo años en el ostracismo secuestrada por Wesker y su presencia en Resident Evil 6 suponía un aliciente para creer de nuevo en la saga. Era un retorno esperado durante la última década. Una lástima que Capcom decidiera convertir a aquella frágil niña en una agente acrobática completamente vacía, en un personaje insulso que no transmitía nada y que, para sorpresa de todos, ni siquiera tenía especial interés en recordar qué le había sucedido de pequeña. Sin duda, todo un manual sobre cómo tirar a la basura un personaje esperanzador.

Príncipe de Persia

Tras una más que acertada aproximación durante la generación de Playstation 2, Xbox y Gamecube, la franquicia Prince of Persia sufrió el desgaste del tiempo y trató de reinventarse con uno de los primeros reinicios de la pasada generación guiado por un estilo visual de pinceladas, una jugabilidad cooperativa y exceso de movimientos por QTE’s. A Ubisoft, que por aquel entonces comenzaba a ver el potencial de Assassin’s Creed, o le salió bien la jugada, al menos no como antes, y decidió dar una pausa al personaje. El descanso se ha alargado más de la cuenta, tanto que desde 2008 no sabemos nada del príncipe árabe más allá de la cancelación de una entrega ambientada en un mundo contemporáneo. Se puede decir que Ezio Auditore y Altäir acabaron con la vida de su antepasado más directo, aunque desde Ubisoft están dispuestos a recuperar la saga si se dan las condiciones adecuadas. Eso sí, entre Watchdogs, Assassin’s Creed cada año, The Division, Splinter Cell y Rayman, equipos de desarrollo no tienen libres.

SONIC

Incluir a SONIC en un reportaje de personajes de videojuegos venidos a menos duele, y mucho. De hecho, en redacción se ha generado un extenso debate en torno a la idoneidad, llegando a la conclusión de que merecía la mención. SONIC: The Hedgehog fue el gran enemigo comercial de Super Mario cuando SEGA fabricaba consolas, un icono de la infancia para muchos, y ahora ha quedado como un “segundón” a la sombra del fontanero, co protagonizando juegos casi por caridad (en un mundo paralelo, un SONIC sin Juegos Olímpicos estaría tocado y hundido). Los últimos juegos de plataformas del personaje, salvo contadas ocasiones como Colours de Wii, no han conseguido captar la esencia de la serie. Y es que se puede decir que desde los Adventure, SEGA no ha alcanzado el baremo de calidad que se debe solicitar a una saga con la trayectoria de ésta. Ni mucho menos es de los personajes que salen mejor parados, pero para muchos jugadores sí uno de los heridos que ya no es lo que era, aunque todavía tiene oportunidades para redimirse con un plataformas tradicional que no mezcle fórmulas raras. Su creador, Yuji Naka, ahora está más interesado en los juegos de ballenas.

Tortugas Ninja

Si hacemos un viaje al pasado -nunca mejor dicho-, nos topamos con Teenage Mutant Ninja Turtles II: The Arcade Game, uno de esos videojuegos que todavía estará presente en la estantería de algún coleccionista. Lo mismo sucede con Turtles in Time. Dos juegazos protagonizados por las Tortugas Ninjas, Leonardo, Raphael, Michelangelo y Donatello, capaces de ofrecer horas de diversión de la vieja escuela. La serie creada por Kevin Eastman y Peter Laird tiene suficiente potencial como para destacar y convertirse en una licencia de acción, hasta con cooperativo a cuatro jugadores. Enemigos carismáticos no le faltan, de valor nostálgico no carece y en mecánicas jugables ejemplos hay para aprender. Pero el destino del cuarteto en lo que respecta a videojuegos recientes es digno de la cloaca más pestilente. Desde aquellos juegos bidimensionales de gran calidad no se ha concebido un título merecedor de grandes halagos. La última propuesta, Teenage Ninja Mutant Turtles: Desde las Sombras es un desastre que se ha llevado un 3 sobre 10 en esta casa, convirtiéndose en uno de los peores juegos comercializados en 2013. Hace la competencia con Pacific Rim.

Conrad B. Hart

Para diseñar una revisión de una saga antológica que atrae a miles de jugadores talluditos del mundo y quedarte en un subproducto, mejor no hagas nada. Éste es el caso de Flashback, que tras convertirse en uno de los míticos en el género de la exploración y la acción, en eso que comenzó con Pitfall, retorno en 2013 de la mano de Ubisoft con muy mal resultado. No dudamos que posiblemente la compañía francesa puso todo el amor del mundo en el proyecto, pero parece que no lo quiso lo suficiente. 20 años más tarde del lanzamiento del juego original se lanzaba un revival descargable para PC, PS3 y Xbox 360 que resultaba incapaz de actualizar las mecánicas de juego, eliminaba elementos fundamentales en el primer juego y le hacía perder toda la esencia. Flashback Origins ni replicaba el trabajo de los creadores del original, Delphine Software, ni destacaba por ser un juego de acción lateral divertido y atrayente, más bien todo lo contrario, un producto insuficiente e incapaz de convencer al seguidor. Conrad se ha venido abajo, y lo peor de todo es que parece no haber tenido ni siquiera la culpa. Siempre nos quedará el videojuego original.

Aya Brea

No lo vamos a negar: resulta un poco raro que Square Enix, con los habituales modelos de negocio que profesa, deje pasar la oportunidad de sacar partido económico a un personaje, pero el caso de Aya Brea es realmente singular. La protagonista de Parasite Eve consiguió convencer a los fans del survival horror y del rol en la época de PSX con dos juegos bastante bien hilados. Exigentes, divertidos y con una presentación a la altura. Era la oportunidad de conseguir un personaje icónico femenino fuera del linaje Final Fantasy, y la firma nipona lo estaba consiguiendo. Llegó el lanzamiento de Parasite Eve 2 en el año 2000 y el cambio de generación se llevó por delante a esta investigadora de lo paranormal. Tuvo que pasar una década (2010) para que Square Enix repescara Parasite Eve en Playstation Portable (PSP) con The Third Birthday, que a pesar de no ser un mal proyecto, no terminó de conseguir grandes resultados en ventas fuera de Japón. Desde aquel lanzamiento (casi cuatro años ya), Aya Brea está más que perdida en combate. Se ha caído de la plantilla de Square Enix, compañía a la que parece que le cuesta apostar por algo que implica un poco de riesgo (véase la demora en Kingdom Hearts 3). Teniendo en cuenta que ahora la firma cuenta con estudios occidentales, no sería una locura pensar en un Parasite Eve producido por las buenas gentes que están tras sagas como Tomb Raider o Hitman. Soñar es gratis.

Ryo Hazuki

Dolor intenso, náuseas y entusiasmo son tres síntomas que puede sentir un fan de Shenmue con cada rumor, comentario o anuncio que golpea a la saga. Ryo Hazuki protagonizó dos de los mejores juegos de todo el catálogo de Dreamcast, consola que terminó desapareciendo del mercado por nefastos avatares del destino. Nuestro protagonista se quedó literalmente huérfano. Desde entonces, ninguna consola ha dado cobijo a su aventura, por concluir, con una hipotética entrega de la que no se pierde la fe. Ni siquiera su creador, Yu Suzuki, tiene demasiadas esperanzas de concluir la trama algún día, aunque ganas no le faltan. Todos los amagos por repescar la saga se han quedado en vagos intentos. Es un experimento muy arriesgado para SEGA por las particularidades del juego, que se salen de la norma en lo que se entiende como un posible éxito de ventas en la actualidad. Eso sí, de Hazuki no se olvidan; le han condenado a modo de recordatorio a montarse en una recreativa motorizada para competir en SONIC & All Stars Racing Transformed. De aquel intento llamado Shenmue Online mejor ni hablamos, porque acabó clausurado por falta de atención.

Matt Hazard

MattHazard no encaja exactamente con el patrón de héroe que tuvo éxito yacabó tirado por las esquinas, pero tiene una particularidad que lo hacemerecedor de estar presente en el reportaje. Con el videojuego EatLead: The Return of Matt Hazard, la desarrolladora Vicious CicleSoftware tenía un objetivo extremadamente loable: jugar con la idea delpersonaje de éxito en el pasado que retorna con un nuevo videojuego, unaespecie de parodia que jugaba con su propia trama mezclando realidad yficción con humor. Las bromas, referencias y chascarrillos sobre juegoscomo Gears of War, Contra, God of War y Duke Nukem, entre otros, sesucedían en un intento de festival del humor que no tenía nada degracia. Uno de esos juegos que busca apostar por una línea inteligenteque termina siendo absurda y perdiendo toda la gracia por el camino.