¿Por qué debería comprar una Steam Machine?
Valve colabora con los principales fabricantes de hardware para el lanzamiento de máquinas amoldadas a su exitosa tienda online. Con la gama de precios y sus principales características técnicas, analizamos si merece la pena hacerse con una.
El CES 2014 nos ha dejado multitud de noticias relacionadas con los videojuegos, pero una de las más relevantes ha sido la presentación de las primeras Steam Machines.Hasta 14 equipos se han visto en la feria de Las Vegas con multitud deconfiguraciones que van desde los 500 dólares a mas de 2000, parasatisfacer a todo tipo de usuarios. La pregunta es, ¿quiénes son esospotenciales usuarios? En este artículo quiero analizar el futuro que leveo a estas máquinas y los desafíos a los que se tendrán que enfrentar.Personalmente, me ha sorprendido el hecho de encontrar un apoyo tanmasivo a la aventura de Valve, incluyendo una empresa tan importantecomo Dell detrás. Es cierto que es una oportunidad de negocio conrelativos pocos riesgos. Al fin y al cabo la gran mayoría de esosequipos se venderán por Internet y se ensamblarán justo antes deenviarse, utilizando componentes estándar de PC, y no se trata de cajasque acumularán polvo en tiendas si no se venden. Y si bien requiere unainversión probando componentes y drivers con Steam OS, nodebería ser significativa para el potencial beneficio si el negocio salebien. Sin embargo, para mí ahí acaba la parte segura del negocio, y elresto es un conjunto de incógnitas que hacen muy difícil que SteamOS sea una alternativa a Windows o cualquier consola. Un aviso, eso sí,en este artículo usaré indistintamente Steam OS o Steam Machine, ya queal fin y al cabo podemos instalar Steam OS en cualquier ordenador y"mágicamente" se convierte en una Steam Machine.
Imaginemosque soy un usuario de PC. ¿Por qué querría instalarme Steam OS en miordenador? Si todo lo que necesito lo tengo en Windows y me funcionaperfectamente, ¿qué ventajas me aporta Steam OS? A día de hoy, ninguna,ni siquiera el mando que lo puedo comprar a parte. Menos aún si ademásuso mi ordenador para cualquier cosa que no sea juegos, ya que aunquepuedo usar Linux sin más, para la mayoría supone una complicación en laque no querrán meterse. A lo mejor, claro está, lo que quiero es unordenador para poner junto a la tele para jugar más cómodo, perosimplemente quiero retransmitir lo que sale de mi PC principal.¿Necesito una Steam Machine para eso? No, hay muchas alternativas.¿Puede ayudar? Sí, aunque a un precio exagerado si ésa es sufuncionalidad principal. Digamos entonces que no soy usuario de PC oquiero sustituir my equipo y ponerlo junto a la tele. ¿Windows o SteamOS? Pues si quiero jugar a todo lo que existe, no hay duda alguna,Windows. Porque ahí está la clave, no sólo no hay nada que pueda haceren Steam OS que no pueda hacer en Windows, sino que si opto por elprimero estaré perdiendo una ingente librería acumulada a través de añosde rebajas. Es cierto que cada vez hay más juegos compatibles conLinux, pero fuera de la escena independiente aún son minoría. ¿Quépodría entonces hacerme decidirme por una Steam Machine? La respuesta esobvia: una exclusiva. Si Half-Life 2 llevó a la gente a instalarseSteam, ¿no podría Half-Life 3 conseguir que la gente instalase Steam OS?Potencialmente sí, pero es un escenario que ni la propia Valve seplantea a día de hoy a tenor de las declaraciones de Gabe Newell ycompañía.
"Por ese precio me compro una PS4 o una Xbox One y un montónde juegos. Claro que está el hecho de que los gráficos serán peores ytodos los demás argumentos a favor del PC"
También hay pie a mirar la situación no desde el prismade un jugón de PC, sino de alguien que opta entre una PS4, una Xbox One,una Wii U o una Steam Machine. Es decir, quiero una máquina casiexclusivamente para jugar. Lo primero a mirar es el presupuesto, yviendo el coste de las Steam Machines, las más básicas se van a quedarobsoletas en muy poco tiempo. Bajar de los 1000 € es tarea casiimposible. Por ese precio me compro una PS4 o una Xbox One y un montónde juegos. Claro que está el hecho de que los gráficos serán peores ytodos los demás argumentos a favor del PC, pero recordemos que ahora soyalguien que está optando por una consola y me es mucho más importanteel que me valga durante años que el tener siempre gráficos punteros. Siquiero asegurarme compatibilidad, una vez más es obvia la respuesta. Eneste caso lo que me puede mover una vez más es el contenido, pero si loque me interesa son los juegos exclusivos de PC, ¿no tendré ya unamáquina para ellos? Si no, en cualquiera de las otras plataformasencontraré un buen puñado de juegos exclusivos según mis gustos. ¿PodríaValve ofrecer algo así? A día de hoy, independientemente de quequisieran o no, es imposible, no tienen la capacidad de lanzar juegosque tienen Sony, Nintendo o Microsoft (que si no los tiene, los compra).De ahí viene mi sorpresa inicial de ver tantas compañías apostando porSteam OS, cuando la primera que tendría que comprometerse es Valve y nosólo no lo puede, sino que además no quiere.
¿Qué otros atractivostiene una Steam Machine? Sabiendo que en juegos, su principalfoco, no es capaz de sobresalir frente a ninguna otra oferta, ¿qué otromotivo me llevaría a comprar una? A día de hoy no ofrece servicios tipoNetflix o Spotify integrados, ni Steam tiene un catálogo de películas,series o música que comprar o alquilar digitalmente. Cierto es que como sistema operativo Linux que es tenemos un navegador con el que acceder a ellos, pero para eso también podemos usar cualquier PC.¿Una mejor experiencia en el salón? Estando Big Picture disponible paraWindows, en absoluto, y cualquier consola igualmente está perfectamenteadaptada. Entonces, ¿qué razón me llevaría a comprar una Steam Machine?Ninguna. Al menos para el usuario medio. Hay quien encontrará atractivoen usar Linux en vez de Windows, aunque si eres un fiel defensor delsoftware libre algo te chirriará usar juegos hechos con códigoprivativo. Hay quien querrá ahorrarse la licencia de Windows, siempre ycuando le valga con el contenido y aplicaciones disponibles para Linux.Hay quien simplemente querrá trastear para ver de qué va Steam OS, peropara eso seguramente optará por hacer una partición en su ordenadoractual. En cualquier caso, en definitiva, soy incapaz de ver qué usuariomedio optaría por una Steam Machine frente a una consola o un PC conWindows. Quizá me equivoque, pero creo Valve tiene que replantearse elmodelo y que su atrevida idea, que a mí como friki de la tecnología einformático me atrae, llegue realmente al gran público. Aunque quizátienen un plan maestro trazado e igual que me han sorprendido en esteCES con un apoyo tan masivo, lo hagan con futuros anuncios. Ojalá.
Esta columna es una opinión personal del autor que no representa necesariamente la de MeriStation.