Call of Duty: Ghosts
Tu soldado, tu mundo y en cualquier parte. Estos tres fundamentos marcan el modo multijugador de Call of Duty: Ghosts, título de PS3, PS4, Xbox 360, One, PC y Wii U que ya hemos jugado a fondo en la Gamescom de Alemania y que demuestra que en esto de la guerra vitual, una explosión espectacular es más contundente que un disparo a bocajarro desde la maleza.
Esencia
Infinity Ward ha decidido refinar la fórmula aunque manteniendo los ingredientes. La clave del éxito de Call of Duty es precisamente la propuesta Call of Duty, la combinación única que logra en cada entrega de disparos rápidos y divertidos con algo de épica y un gameplay muy marcado respaldado por la progresión del jugador y la adicción que generan la mayoría de sus modos online. Ghosts va a ser el capítulo que salte de generación –a caballo entre ambas- y el que estrene las nuevas consolas, pero no por ello significará un cambio de aires o un acercamiento a otras formas de hacer FPS. Este CoD sigue siendo puro CoD, aunque no nos quedan dudas de que sus desarrolladores han querido llevarlo un poco más allá, buscarle un nuevo sitio que lo mantenga al nivel que se espera de él y no lo haga peligrar pese a pesos como Battlefield 4 o Titanfall. Para ello, se ha escuchado a la comunidad –los especialistas en el multiplayer de la serie- y se han hecho caso a algunas sugerencias. Otras, en cambio, siguen siendo ignoradas, quizá por miedo a perder la identidad de la marca más vendida de la actualidad.
En Colonia, en Gamescom, hemos podido jugar bastantes partidas a sus tres nuevos modos presentados para comprobar si de verdad el salto va a ser tan radical como algunos esperan. Sus creadores hablan de tres pilares sobre los que han sustentado el nuevo multijugador, y lo cierto es que al echar unas partidas pronto estas columnas, estos tres pilares, quedan al descubierto. Tu soldado, tu mundo y en cualquier parte: Un planteamiento que acaricia bastantes matices del componente social que tanto se comenta que tendrán los juegos del futuro, al mismo tiempo que una apuesta en firme por la personalización extrema y la mayor interacción con los entornos del juego, entrando en este apartado el dinamismo de los escenarios y los cambios ingame, aunque no destrucción a lo Battlefield. A esto se suma todo lo que cabría pedirle a una nueva producción, como nuevas armas, otros 14 mapas algo más abiertos pero también para un máximo de 16 jugadores, un sistema de perks más acertado y ventajas que pedía a gritos la saga.
Los modos
El primero de los mostrados es Blitz, un interesante juego de carreras y puntos de equipo donde la cooperación no es demasiado necesaria y podremos jugar a nuestro albedrío siempre que no paremos de puntuar. Es curioso el planteamiento, con dos portales teletransportadores colocados en las dos esquinas del mapa (las bases de cada bando) y en los que hay que entrar el máximo número de veces posible en un tiempo dado para ganar la ronda. Esta disposición en esquinas genera un campo de fuego abierto en el centro del mapa por el que no es fácil pasar. El sigilo, la velocidad y la astucia harán puntuar, claves de lo que el escuadrón Ghosts hace en la campaña, claves de toda la propuesta más silenciosa y volátil que caracteriza a este Call of Duty 2013. Luego está Search and Rescue, la versión invertida de Buscar y destruir donde la clave es recolectar placas de compañeros caídos para salvarlos o no parar de hacer bajas para que caigan todos los enemigos. Y por último está Cranked, un modo que con cada baja te hace más poderoso (rapidez, velocidad de recarga, mayor visibilidad y dominio de minimapa, etc) pero que requiere hacer una baja cada 30 segundos o explotaremos en el intento.
Ritmo intenso y sin descanso, fundamental en Call of Duty y solo posible a sus -de nuevo- 60 frames por segundo absolutamente estables. Hay algunas novedades que también interfieren en el timing del juego, como el nuevo sistema de cobertura lateral para asomarse de forma diagonal o las cadenas de movimientos con saltos y escalada, que hacen algo más ágiles a los soldados. El nuevo armamento también interfiere sobre la experiencia de juego y no es un mero avance cosmético. Hay ametralladoras con balas explosivas, rifles de francotirador con nueva mirilla especial para ver alrededor de la retícula mientras se apunta -respuesta a los fans que lo exigían- o mejor rendimiento de las escopetas, para darles protagonismo. Se suman las nuevas perks y rachas de bajas, a repartir entre 8 puntos y cada una con un valor específico en estos puntos, entre las que destaca cómo no el ataque de perros, ahora solo uno, Riley, más inteligente y que además de hacer muertes va a nuestro lado para indicarnos la proximidad de un rival o trampas y explosivos. Brutal y con solo 5 bajas consecutivas.
Otro añadido de peso es el cooperativo, Squad, un modo donde los escuadrones formados por cuatro amigos pueden acabar dominando la escena online mundial de Call of Duty. La personalización completa gracias al editor de soldados nuevo –repleto de campos- y la decisión de estrategias y clases dentro de cada cuarteto es fundamental aquí, en una lucha contra el mundo en mapas diseñados especialmente para este modo. Además, la parte más social de Ghosts empieza en este apartado, pues tendrá integración total con redes sociales y, cómo no, con el servicio Call of Duty ELITE, ya gratuito y repleto de datos y estadísticas que aumentarán este otoño. En el editor se incluyen por primera vez mujeres-soldado y un sinfín de vestimentas para escoger. Además Ghosts incorpora selector de voces, de expresiones y burlas, y así hasta más de 27.000 posibilidades distintas para dar forma al participante que queramos.
Our World
Lo relativo al mundo, a “tu mundo”, habla de los escenarios. Ahora se han utilizado los llamados mapas dinámicos, es decir, mapas que pueden mutar en mitad de la partida de repente o de forma progresiva, pero que desde luego cambian el gameplay de forma aleatoria o pocas veces voluntaria. Catástrofes meteorológicas o hasta una bomba nuclear capaz de asolar todo el mapa y dejarlo en ruinas forman parte de estos elementos transformadores. La bomba es una valiosa racha de bajas difícil de conseguir ejecutar, pero cambia por completo el paisaje de juego y deja más espacios abiertos, un peligro que se transforma en locura. Esto no quiere decir, como señalábamos antes, que los escenarios de CoD: Ghosts sean destruibles, ni mucho menos, pero sí que tienen estas pequeñas debilidades o algunas trampas accionables para sacarles partido, como troncos apilados que se pueden desbordar o una inundación súbita. El motor para los efectos de audio se ha renovado para esta entrega, buscando la mayor contundencia de las armas y que ningún efecto que deba sonar se pase por alto.
La última parte habla de la posibilidad de seguir jugando o decidiendo sobre el universo Call of Duty desde cualquier lado, llevárnoslo a cualquier parte. Esto hace referencia a la aplicación que Infinity Ward tiene preparada para sistemas iOS y Android, lista para que desde un móvil o tableta podamos preparar encuentros, repasar estadísticas o hasta intervenir en las batallas con órdenes táctiles y ciertas interacciones ocasionales. Habrá modos de juego que busquen sacar partido a este juego asimétrico con dos pantallas. Una idea que trajo consigo Wii U y que no va a quedarse en agua de borrajas en Call of Duty: Ghosts. Habrá total integración, ahora más a fondo, entre el servicio ELITE y otras redes sociales estándar, como Facebook. Así podremos controlar la progresión de nuestro soldado en todo momento, progresión que por cierto regresa al sistema de perks y rachas con casillas compartidas, siete en este caso ya que el arma y los gadgets ya tienen slot propio. Esta idea fue directamente recogida de la proeza que logró Treyarch con Black Ops II y sus casillas de equipo y atributos compartidas para todo, de más libre elección para el jugador.
Todo esto es lo que se va apreciando al jugar unas cuantas partidas a Ghosts, de los juegos de más éxito en la Gamescom 2013. Engancha y funciona como siempre ha hecho. Aunque por esto mismo no se pueden esperar cambios revolucionarios en su fórmula ni una búsqueda de un formato que en realidad no es el suyo. La estela fantasma del sigilo y la astucia por encima de la bala fácil sí que está presente en su multiplayer, y parece que llega para quedarse puesto que cautivará a millones de jugadores un año más. No han estado quietos en Infinity Ward, ni mucho menos, y los resultados audiovisuales que cabría pedirle a la next-gen van a formar parte pronto de la carta de presentación del título, realmente vistoso y con un ritmo vertiginoso para nada sacrificado por sus cambios, de hecho puede que hasta se haya enfatizado. El habitual de CoD ya puede esperarlo con ansia. El debate encarnizado entre éste y Battlefield 4 acaba de abrirse, “cuestión de gustos” es lo único que se puede sacar en claro por el momento.
- Acción
Call of Duty: Ghosts es la nueva entrega de la serie de first person shooters más exitosa de los últimos tiempos a cargo de Infinity Ward y Activision para PlayStation 3, PlayStation 4, Xbox 360, Xbox One, Wii U y PC.
