Injustice: Gods Among Us, Impresiones

Allá por el año 2009 cerraba la mítica Midway, propietaria de licencias tan relevantes como NBA Jam o Mortal Kombat, auténticos clásicos de recreativa. Tras un declive continuado con la entrada del nuevo milenio, su último gran lanzamiento fue justo un año antes, con Mortal Kombat vs DC Universe. Es significativo el hecho de que aquel título fue el primer paso hacia una nueva era para la saga, que incluía un regreso a los orígenes, a la jugabilidad en dos dimensionesLo que quedaba de Midway fue comprada por Warner Bros, incluyendo la licencia de Mortal Kombat, y el estudio de Chicago acabó bajo el nombre de NetherRealm Studios. En 2011 lograron reimaginar por completo la serie y sacar un excelente Mortal Kombat sobre los pilares que hicieron triunfar a los primeros juegos en los 90. Ahora, gracias al apoyo de Warner Bros, y habida cuenta de la trayectoria mencionada, nace Injustice: Gods Among Us. Partiendo de la sólida base del último Mortal Kombat, y sin duda tomando numerosos elementos del mismo, nos llega un juego de lucha que consigue una identidad propia, en gran parte otorgada por contar como protagonistas con personajes como Batman o Superman.

Tras Mortal Kombat vs DC Universe, y teniendo en cuenta que ahora tanto NetherRealm Studios como DC Comics comparten el techo de Warner Bros, parecía una consecuencia obvia el lanzamiento de este juego. Sin embargo, los desarrolladores no se lo han tomado simplemente como un cambio de apariencia de los protagonistas respecto al anterior Mortal Kombat. Elementos clásicos como el gore o los fatalities no tienen lugar en Injustice, o si aparecen de algún modo sin duda es con menos sangre alrededor.También hay algunos cambios en torno al sistema de juego de los que hablaremos a continuación, pero sin duda otro punto claramente distintivo es en el argumento. Injustice hereda el hecho de tener un gran modo historia, repleto de cinemáticas que justifican cada pelea y son interesantes de ver por sí solas, pero lógicamente la trama se aleja mucho de lo que se puede esperar de un Mortal Kombat.

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El guión está firmado por Justin Gray y Jimmy Palmiotti, escritores habituales del mundo del cómic quienes han colaborado con el mundo del videojuego en ocasiones anteriores, como con Dead Space: Downfall o, especialmente, Mortal Kombat vs DC Universe. Aún no se conoce mucho sobre lo que realmente acontecerá, pero sí sabemos que habrá una gran batalla a escala planetaria que involucrará a multitud de superhéroes y villanos, como Batman, Flash, Superman, Joker, Harley Quin, Wonder Woman... una lista de nombres todavía no completa. Los eventos ocurridos conseguirán incluso sacar el lado oscuro de personajes como Superman, que llegará a mostrarse despiadado y cruel. Sin duda el apoyo de DC Comics ha sido fundamental para confeccionar una historia que, no obstante, ha partido del propio estudio desarrollador. Hay más de tres horas de cinemáticas y, como apoyo complementario, desde enero de este año se está publicando en EE.UU. una nueva serie de comics bajo el nombre de Injustice que relata los hechos previos al inicio del juego y qué ha desatado el enfrentamiento entre los miembros de La Liga de la Justicia.

Poniéndonos a los mandos, lo primero que notamos es que los ataques han cambiado. Hemos pasado de cuatro a tres, débil, medio y fuerte. El cuarto botón principal es una habilidad especial que cambia radicalmente de un personaje a otro. En algunos como Flash puede ralentizar los movimientos del enemigo simulando que él se mueve ralmente rápido, en otros como Batman le permiten controlar unos batarang, Superman disparará rayos por los ojos, o Nightwing cambia entre un bastón de gran alcance o dos cortos mucho más rápidos. Qué produce ese botón está, por tanto, muy diferenciado dependiendo del luchador escogido y refuerza el disponer de un elenco como el de DC Comics. Además, la decisión de usar sólo un botón para ese tipo de técnicas especiales vino dada porque el objetivo del estudio es hacer un juego más accesible de partida. Eso no significa que no haya combos más complicados y poderosos, pero sí es cierto que un recién llegado puede ponerse y divertirse de forma mucho más directa y con una curva de aprendizaje más prolongada en el tiempo. Un claro indicio de esa barrera de entrada menor es algo que jugadores experimentados también encontrarán muy útil, como es el hecho de poder añadir en pantalla de forma siempre visible los combos que aún no tengamos memorizados, para no tener que acceder al menú constantemente. En el mando de Wii U también se pueden añadir dichas referencias a la pantalla táctil.

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Los medidores de energía que tanto gustaron en el anterior Mortal Kombat están de vuelta y con un uso más allá del de lanzar super-ataques. Desde luego podemos seguir lanzando lo que se podría definir como ultras pulsando los dos gatillos, de forma muy sencilla, y así gastar toda la barra. Y hemos de decir que las animaciones han ganado sin duda en espectacularidad, para suplir la falta de momentos sangrientos de los Mortal Kombat. Sin embargo, ése no es el único modo de aprovechar la barra de energía. Pulsando el gatillo derecho, mientras se realiza un movimiento especial, hace que éste sea más poderoso y tenga un efecto ligeramente distinto a la versión normal de ese mismo ataque. Esto provoca que se pierda un cuarto de la barra, pero a la vez duplica el número de ataques especiales de cada personaje y ofrece nuevas posibilidades tácticas o para enlazar combos. Los combo breakers han sido integrados de nuevo, pero con una mecánica bastante distinta. Al igual que en Mortal Kombat, podemos lanzarlos para detener una combinación del oponente perdiendo energía, pero en esta ocasión la acción no se acaba ahí. En ese momento se inicia una minisecuencia y ambos contendientes se sitúan frente a frente. Cada uno apuesta una porción de su barra de energía, y el que se juegue el valor más alto ganará el encuentro, noqueando temporalmente al perdedor. Si vence el defensor, evitará ese golpe fatal que se le venía encima e incluso quitará algo de vida al otro.

Si bien hemos querido remarcar algunas diferencias en la jugabilidad entre el anterior Mortal Kombat e Injustice, cabe decir que los parecidos son más que obvios en otros muchos aspectos. El tipo de peleas, con técnicas no demasiado poderosas y preponderancia de golpes rápidos sigue presente. La facilidad para fabricar nuestros propios combos es uno de sus mayores atractivos, aunque el juego nos dará algunas indicaciones para conseguir los más básicos. Quizá el mayor cambio que muchos notaréis es la ausencia de movimientosespecialmente rápidos, como los saltos de un extremo a otro de lapantalla o las teletransportaciones, con lo que las formas de enlazarcombos serán algo distintas. No obstante, en cualquier caso no tendría sentido compararlo con Street Fighter, Tekken o cualquier otro, el espíritu es claramente el de un Mortal Kombat.

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Los escenarios en Injustice cobran un protagonismo que no tenían en el anterior Mortal Kombat. En primer lugar, vuelven las transiciones típicas de la serie y que hemos visto de distintas maneras. Éstas, para aquellos que no estén familiarizados en qué consisten, permiten que los combates tengan lugar en más una arena sin cambiar realmente de nivel. Dando un golpe oportuno al oponente en cierta parte del escenario, se desencadena una animación en la que éste va sufriendo daño continuamente, hasta que termina cayendo en un nuevo entorno donde prosigue la pelea. En Injustice, estas transiciones son cíclicas y se puede volver a donde comenzó la lucha tras pasar por al menos un par de zonas. Lo cierto es que las cinemáticas que hemos visto hasta el momento son bastante espectaculares y transmiten perfectamente la idea de que son superhéroes los que están luchando, y que tal desencadenamiento de poderes tiene que tener un impacto real en el entorno, destruyéndolo según luchan.

Esto quizá carecería de mucha relevancia salvo por el hecho de que una transición resta una buena parte de la vida a quien la sufre. Sin embargo, en este juego el entorno puede llegar a tener bastante peso si se sabe usarlo, así que no es lo mismo pelear en un nivel que en otro. Hay numerosos elementos interactivos, como por ejemplo coches que se pueden lanzar al contrario, paredes contra las que se puede estampar a un adversario, lanzacohetes que se pueden encender y muchos más. La activación, siguiendo la filosofía del juego, es muy sencilla, simplemente pulsando uno de los gatillos siempre que se esté dentro del área de influencia de dicho elemento interactivo. El efecto que produce varía de un personaje a otro, ya que los más fuertes pueden levantar un objeto mientras que otros lo usarán para dejar la marca de la cabeza de su adversario. Ser consciente de su presencia y sacarle provecho puede suponer una gran ventaja en el desarrollo de un combate. Un ejemplo que hemos visto es el sacar partido de una metralleta en una tanqueta que, sin causar un gran daño, puede servir para prolongar un combo lo suficiente para que el oponente no caiga y seguir golpeándolo.

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La estructura de modos de juego también ayuda a que la barrera de entrada sea menor y el aprendizaje se realice jugando. Todo empieza con el modo práctica, donde además de las típicas peleas libres con todos los elementos configurables como la vida del oponente o cómo se recargan las barras de energía, hay tutoriales realmente completos que enseñan cada aspecto del juego. Existe también un modo de lucha directa en el que se puede elegir el personaje que llevará la CPU, la dificultad, y repetir esa pelea una y otra vez para entrenar contra un adversario en concreto. No faltará la típica modalidad en escalera en la que se va progresando hasta luchar con el jefe final, y esta vez en multitud de variantes, incluyendo algunas tan curiosas como estar envenenado durante toda la partida y perdiendo vida de combate en combate, o tener que enfrentarte a dos oponentes en vez de uno solo.

Cada una de estas versiones del mismo concepto se irán desbloqueando según se vaya superando la anterior. Junto a todo lo anterior tenemos las Misiones S.T.A.R. Lab, algo muy parecido a la Torre de los Retos del anterior Mortal Kombat. Se trata de un total de 240 desafíos, divididos en grupos 10 para cada personaje de manera que conforman una pequeña historia para cada uno de ellos. Por ejemplo, Superman deberá rescatar a Lois Lane de las manos de Lex Luthor, mientras que Catwoman intentará hacerse con el Batmóvil. Las misiones iniciales sirven de nuevo como aprendizaje para saber manejar cada personaje, y conforme se aumenta la dificultad también se incluyen minijuegos que se separan de lo que son las peleas puras, habiendo de todo tipo y de lo más disparatados.

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Para desbloquear niveles posteriores el sistema es similar al de juegos como Angry Birds, recibiendo hasta tres estrellas según nuestro desempeño, y requiriéndonos un número total de éstas para liberar fases posteriores. De esta forma se fomenta el rejugar y aumentar la duración de la experiencia para un solo jugador. De hecho, el contenido en individual casi resulta abrumador, teniendo en cuenta que aún no hemos hablado del modo historia. La estructura de éste es la conocida: cinemática – lucha – cinemática y así hasta el final. Vamos saltando de personaje en personaje conforme avanza el argumento y se justifican los combates, viviendo cada tramos del guión con un protagonista distinto. De vez en cuando, y para romper la rutina de peleas y vídeos, se introducen algunos minijuegos del estilo de las misiones S.T.A.R. Lab, con la peculiaridad de que éstos tienen un cierto impacto en el siguiente combate a disputar. Baste como ejemplo la previa a la batalla entre Batman y Lex Luthor, en la que el enmascarado héroe debe lanzar sus batarang para detener los misiles que le envía el archienemigo de Superman, y así también ir reduciendo su salud. Al iniciarse la auténtica batalla, la vida de Luthor se habrá visto disminuida según nuestra habilidad en el minijuego, dando algo más de variedad al modo historia.

Respecto al multijugador, aún no conocemos todas las variantes disponibles, pero sí se han presentado algunas de ellas. En primer lugar están los combates por clasificación y también los privados. Hay un modo llamado Rey de la Colina, también venido de Mortal Kombat, en el que se mete hasta ocho participantes en una misma sala, pero sólo dos de ellos combaten. El resto mira expectante hasta que les toca el turno de expulsar al rey y ocupar su lugar. Se ha incluido un modo práctica online bastante interesante para aquellos que quieran practicar con un amigo remotamente. Es como el modo entrenamiento en individual, pudiendo configurar contadores y otros parámetros y así luchar libremente por cuanto tiempo se quiera. Finalmente, hay al menos otros dos modos más todavía por anunciar, de los que os mantendremos informados pertinentemente.

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Injustice: Gods Among Us saldrá a la venta el próximo 19 de abril para Xbox 360, PlayStation 3 y Wii U. En esta última soportará, además de tener el listado de ataques especiales en el propio mando, la funcionalidad de remote play para jugar directamente en la pantalla táctil. El juego se distribuirá en distintas versiones con contenido adicional diferente, pero las ofertas definitivas para España aún no se han dado a conocer. Se sabe que en Gran Bretaña aparecerá la versión Red Son para los que hagan reservan anticipada, y que incluye diez misiones S.T.A.R. Lab adicionales contando la historia de Superman si éste hubiera aterrizado en Rusia en vez de en Estados Unidos. Por otro lado, la edición coleccionista incluirá algunos trajes alternativos extraídos de The New 52, la nueva oleada de cómics de DC. Hay que decir que el juego vendrá doblado en inglés, pero con subtítulos y textos en español.