Army of Two: The Devil's Cartel, Impresiones

Parece que los países latinos están de moda en los third person shooters de la segunda mitad de generación. Si juegos como Max Payne 3 o Uncharted han sabido encontrar su identidad pictórica precisamente en escenarios como São Paulo o Cartagena de Indias, Visceral Games, y más concretamente su división de EA Montreal, probará suerte el próximo 29 de marzo en PlayStation 3 y Xbox 360 para poner a dos nuevos y eficaces mercenarios (Alpha y Bravo) en una nueva andanza contra el crimen organizado, esta vez en una peligrosa misión anti-droga a lo largo de varios puntos de México. Nuevas técnicas, más cooperación sincronizada, exaltación del Aggro y violencia por doquier son algunos de los encantos de esta nueva entrega. En Army of Two: The Devil's Cartel la marca busca evolucionar e intensificar la experiencia, empezando por el empleo prolífero que hará del cada vez más recurrente Frostbite 2 Engine.

Se ve que Electronic Arts quiere sacar pleno provecho a su motor por excelencia, que puso en pie juegos como Battlefield 3 o Medal of Honor: Warfighter, no tan vistosos en consola. Con The Devil's Cartel pasa un poco lo mismo, pero la experiencia con el engine de la productora en este año y medio de más ha dejado a Visceral pulirlo para que no estropee las sensaciones que produce sobre las actuales máquinas de Sony y Microsoft. Este Army of Two es el más vistoso de todos, qué duda cabe, pero por lo recorrido hasta el momento no parece que vaya a impresionar a quienes hayan contemplado maravillas como Skyrim, Uncharted 3, Crysis 2, Far Cry 3... Sin embargo, este asunto del poderío técnico también hay que mirarlo con perspectiva, pues el Frostbite 2 va a ser capaz de provocar un montón de situaciones inéditas en la serie y rompedoras dentro de los juegos de disparos en tercera persona.

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Me refiero sobre todo a sus capacidades de interacción y destrucción de los escenarios, una de las virtudes de este motor gráfico que en un producto de estas características encuentra una perfecta oportunidad. En The Devil's Cartel muchísimos elementos y coberturas se rompen con los tiros, golpes, explosiones y granadas; se vienen abajo paredes y techos, se ven partículas y escombros volar por los aires, etc. Y esto, en espacios cerrados repletos de enemigos y con unas conductas de IA bastante verosímiles crea momentazos de auténtica adrenalina. Lo que más se ha valorado de los anteriores Army of Two regresa en éste, pero convertido gracias a las posibilidades del Frostbite 2 y todas las ideas que Visceral ha querido imprimir al proyecto, "muchas recogidas del feedback", según aseguran.

También el trabajo con este motor ha permitido involucrar un mejor aparatado de sonido en el desarrollo de las misiones, otra ventaja del Frostbite 2 que hace estruendosas las explosiones, los golpes, las piedras cayendo... Y por supuesto el juego con las luces y partículas, con deslumbres cuando hay de frente fuertes focos o ceguera temporal al pasar de un interior a un exterior soleado. Todo esto, ya visto en Battlefield 3, se ha traspasado al concepto Army of Two y mejorado. No obstante, hay una serie de novedades de esta entrega que tienen más que ver con giros de mecánica o simples contenidos de más, también en el tono y argumento, mucho más desagradables y oscuros de lo que narraron 40th Day y el primer juego.

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En The Devil's Cartel los Army of Two se las tendrán que ver con nuevos personajes y algún conocido, presidiendo toda esta ola de delincuencia el temido Bautista, del que ya hemos podido saber más en la nueva demo del evento de EA en Munich hace dos semanas. Una iglesia abandonada con el cementerio contiguo y las catacumbas como almacén de rehenes, droga y armas sirven de escenario en una noche estrellada para los nuevos acontecimientos y tiroteos en todas direcciones. El armamento y la cooperación son los protagonistas en esta serie, más aún en este episodio que deja por primera vez unos niveles de personalización de arsenal extremos y, reespecto a multijugador, un buen abanico de mejoras para partidas compartidas online o a pantalla partida, empezando por el Doble Overkill.

Fiona lo sabe

Ya la conocíamos de otras veces pero en este nivel Electronic Arts ha querido que conozcamos más de su pasado y cómo puede ayudar a la pareja protagonista en el presente, llegando a desenfundar una pistola y uniéndose a la gesta como si de un cooperativo a tres se tratase, y todo con una IA envidiable que ya quisieran muchos NPCs de otros shooters, realmente destacable este aspecto. Ella es la informadora, la guía a través de las calles y los pasillos, una pieza clave en esta historia ruda como el más cruel asesinato. También ayudará a Alpha y Bravo en determinadas acciones coordinadas propias de la cooperación, como levantar una puerta pesada, empujarse para subir a una altura, repartirse zonas en emboscadas, deslizarse de la mano o activar mecanismos. Es el punto femenino y estilizado a un juego cargado de testosterona y brutalidad, donde los enemigos pierden la vida desmembrándose con explosiones o reventando sus cabezas ante una buena escopeta. Extremo. Censurado en Alemania.

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Y que haya tramos con tres personajes en el escuadrón aliado es bastante útil. La atención médica entre compañeros es constante en Army of Two debido al impulso al estilo de juego denominado en la franquicia Aggro, es decir, técnicas de disparos a descubierto, salidas de cobertura rápidas, tiroteos de varios personajes unidos desde la misma posición, acople en torretas, etc Jugar así nos dará más puntos de experiencia y rellenará más rápido el medidor de Overkill, ahora en el centro de la pantalla para que tengamos total consciencia de cuándo dispararlo, con el gatillo izquierdo secundario. Activar esta habilidad temporal hace nuestras balas auténticos fogonazos, nos proporciona granadas ilimitadas o atenuación de daños. Ahora también podremos sincronizanos con el compañero para lanzarlo a la vez, obteniendo el llamado de momento Double Overkill, que ralentiza el tiempo, dura más y nos hace completamente invulnerables. Usarlo al unísono es fundamental en situaciones de agobio o total superioridad enemiga -constantes-.

Pantalla dividida y online con chat de voz son las dos opciones que vuelven a conformar The Devil's Cartel para que junto a un amigo podamos recorrer todos los episodios de esta historia que se estima en unas 8 o 10 horas, pero con una clara faceta rejugable en tanto que la única forma de conseguir las mejores piezas y armas de entre un amplio arsenal se halla en dar varias vueltas completas a su campaña. También habrá que desbloquear máscaras para los protagonistas, incluyendo algunos guiños o gracias que ya hemos podido ver, como el casco de Isaac Clarke o una cabeza de caballo. Además incluye diversos niveles de dificultad, DLCs y modos adicionales -como Special Overkill con la reserva- para agrandar su contenido. Divertido e intenso como siempre pero acariciando nuevas fórmulas gracias al nuevo motor y sus posibilidades. Así se recarga el Army of Two más ambicioso de todos y probablemente el más sangriento y maduro.

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