Reivindicando el Cooperativo local

En un momento en el que palabras como Playstation Network o Xbox Live son archiconocidas por todos, donde incluso Nintendo ha dado el salto definitivo a la red con Wii U, todavía hay lugar para poder hablar de las partidas con amigos y familiares en una misma tele y una misma consola. El conocido como modo local de toda la vida. Y no sólo ese, sino el hecho de poder cooperar con alguien para conseguir los mejores objetivos conjuntos. Con esta voluntad nace el artículo de hoy: poder recordar algunos de los mejores juegos de la presente generación con cooperativo local. Porque aunque Internet y el juego online tiene muchas ventajas, tener a un compañero de aventuras codo con codo sigue siendo algo especial e insustituible.

Por todo ello, en este reportaje la idea principal es rendir homenaje a los títulos que durante años y años nos han propuesto superar desafíos con amigos. Desde el mítico ya Final Fight a otros arcades clásicos como The Simpson o las Tortugas Ninja, Pang, Bubble Bobble y tantos otros nombres. Porque todavía hay sitio para ellos y porque, como veremos, muchos de los juegos descritos en el reportaje son grandes propuestas también en modo local cooperativo. De hecho, aunque algunos títulos tengan modalidades online –y bien potentes- nos centraremos en las opciones locales de cada uno de los juegos elegidos.

Uno de los títulos que vivió la transición entre la pasada generación y la actual es Marvel Ultimate Alliance, un Action RPG que a través de una vista ubicada encima, tipo isométrica, nos ofrecía acción a raudales mediante los héroes de la factoría Marvel que tan de moda están –algunos de ellos- después de la película de los Vengadores. El juego, bien recibido en términos generales por crítica y público, contaba con un mulitjugador para hasta cuatro jugadores a la vez pudiendo luchar juntos en una misma pantalla, sin partirla en trozos. Tan sencillo como conectar un mando y controlar a uno de los personajes aunque la partida ya hubiera comenzado. Tres amigos amantes de los héroes de cómic y largas sesiones en una misma sala con personajes como Iron Man, Capitán América, Spiderman, Thor, Lobezno u otros exclusivos según plataforma como Cíclope, Hulk o Magneto entre muchos otros.

Una de las últimas iteraciones de uno de los personajes icónicos de Sony, Ratchet, llegó con una propuesta que se basaba principalmente en el uso del cooperativo hasta cuatro jugadores para poder solucionar los diversos desafíos a los que somete el juego. No se trata solo de acabar con enemigos, sino también solucionar puzles hechos para que arreglen entre todos y las batallas con los jefes finales, donde la cooperación es vital. Entre los jugadores deberemos ir todos a una y trabajar juntos para encontrar los puntos flacos de los enormes enemigos, ya que si cada uno hace la guerra por su lado está muerto. La presencia de ataques conjuntos o asistencias a compañeros que estén en peligro son algunos de los otros añadidos interesantes para un título que se juega mejor en compañía. Y más si se está todos juntos en un mismo salón.

La nueva plataforma de Nintendo ha llegado con una propuesta muy versátil de posibilidades, entre las que destaca el hecho de acercarse a los títulos de toda la vida pero también la clara diferenciación que se puede vivir con el nuevo mando tableta. El juego asimétrico se entiende mejor con un título pensado para ello como es Nintendo Land, el Wii Sports de la nueva Wii U. En este título encontraremos minijuegos de diversa índole, pero nos quedamos con algunos que nos permiten cooperar entre 2 y hasta cinco jugadores a la vez. Solo necesitamos tener a mano wiimotes de la Wii y complementarlos con la tableta. Luchar en parejas en el minijuego Zelda con uno llevando la espada y otro disparando flechas a lo lejos, acabar con alienígenas del juego de Metroid algunos por el suelo y otro sobrevolando la zona o superar las fases del minijuego de Pikmin colaborando para acabar con los enemigos son algunos ejemplos del cooperativo local de este título.

Trine sorprendió como un título descargable muy cuidado a todos niveles donde la cooperación era un elemento imprescindible para explotar al máximo el juego. Su secuela mejoraba la experiencia todavía más con nuevos retos. Es el caso que nos ocupa. Un título para hasta tres jugadores en una misma pantalla controlando a los tres héroes que protagonizan este cuento de hadas. Un guerrero eficaz en el cuerpo a cuerpo y duro de vencer, una ladrona ágil como pocos capaz de disparar flechas a larga distancia y de moverse con un gancho por todo el escenario; y por último un mago que puede mover objetos concretos y crear cajas cuadradas. Un trío que se complementa perfectamente para acabar con enemigos y solucionar puzles. En este caso y a diferencia de lo que se acostumbra a decir, tres no es multitud.

Castle Crashers fue uno de los nuevos proyectos de los creadores de Alien Hominid. Se trataba de un título creado el año 2006 que llegaba como un perfecto homenaje a los beat’em up clásicos de la época de los salones recreativos como Final Fight o Double Dragon. Un yo contra el barrio de toda la vida con multijugador para hasta cuatro jugadores, como debe ser. Con esta premisa, un acabado artístico de lo más simpático y divertido y un elenco de personajes simplemente bestial (casi 30 si contamos los desbloqueables entre los que hay el protagonista de Alien Hominid) para un título que fue un éxito de ventas en su momento y que es totalmente recomendable para partidas con amigos. Cada caballero tiene su propia magia (electricidad, hielo, etc.) y dos ataques, además de sistema de combos que iremos potenciando a medida que avanzamos. La subida de habilidades y la diversidad de armas que encontramos son otras virtudes del título.

Durante el verano pasado apareció una propuesta interesante sobre todo para la consola sobremesa de Microsoft: Awesomenauts. Se trataba de un videojuego que quería coger el espíritu DOTA y trasladarlo a un escenario bidimensional con equipos de tres jugadores luchando en un espacio simétrico. La idea tenía elementos clásicos del género popularizado por DOTA, como los droides a modo de infantería de defensa, las torretas en cada lado de la base y la premisa de destruir la base del otro equipo. Potenciar a los personajes recolectando dinero y comprando mejoras es otro elemento a tener en cuenta para un título que permite jugar en modo local con hasta tres jugadores cooperando para acabar con el otro equipo. Aunque la búsqueda de partidas online es lo suyo, poder jugar con un amigo o dos –pantalla partida- y cooperar para trazar ataques y estrategias no tiene precio. Y más teniendo en cuenta que la diferenciación entre personajes es notable y que más vale ir coordinados. Algo que se hace mejor con gente conocida que con extranjeros por Internet.

Los juegos de Lego son cada vez más habituales. El entrañable diseño que desprenden y la jugabilidad accesible para todos los públicos los han convertido en títulos sólidos tanto en acabados como en ventas. Uno de los más destacados de esta temporada fue Lego Batman 2: DC Heroes, que permitía recorrer las aventuras de Batman, Robin y Superman en Gotham City. La posibilidad de jugarlo en modo local con dos jugadores es clave para solucionar puzles, ya que en solitario debemos ir cambiando el control de cada personaje y puede hacerse pesado. Además, el elenco de personajes desbloqueable de la factoría DC es digna de mención. Junto a esta propuesta tenemos también otra muy similar y que salió posteriormente: Lego El Señor de los Anillos. Título con la misma premisa. Ambos además cuentan con escenarios semi abiertos, por lo que la libertad de acción es mucho mayor que en otras entregas Lego vistas anteriormente.

Valve se ganó el corazón de los usuarios –una vez más- cuando en la famosa Orange Box añadió un título curioso llamado Portal. Puzles en primera persona que se debían solucionar mediante la creación de portales. La propuesta tuvo tal éxito que la compañía decidió crear Portal 2, un videojuego totalmente completo donde además de portales había una serie de desafíos brillantes que solucionar. Darle a la cabeza. Uno de los añadidos más interesantes de este videojuego es la presencia del modo cooperativo con el que cuenta el juego, que se puede disfrutar online pero también offline a pantalla partida. Dos jugadores que deben superar puzles pensados para dos personajes, con lo que esto conlleva. Coordinación, opiniones, sugerencias… puzles desafiantes y cooperativos. Imprescindible para los amantes de los retos interesantes y el juego en compañía.

Uno de los experimentos más interesantes de Konami con la franquicia Castlevania es el juego descargable Harmony of Despair, un título que se instauraba en la saga con una premisa diametralmente distinta al camino principal que siempre ha tenido la franquicia. El multijugador y la cooperación pasaban a un primer término. Con una puesta en escena bidimensional clásica, la idea era unir a diversos jugadores para acabar con las hordas demoníacas de cada nivel, seis en total. Y luchando contra el tiempo: 30 minutos máximo para terminar la partida. Cuenta con un modo local para hasta cuatro jugadores, cooperando, acudiendo a las llamadas de ayuda de nuestros compañeros y luchando de manera coordinada contra los grandes enemigos que aparecen. Un título para disfrutar en compañía y más en local, entre otras cosas porque los servidores para el juego en línea (hasta seis en este caso) acostumbraban a estar poco poblados, menos ahora con el paso del tiempo.

Uno de los primeros grandes títulos de la generación fue Gears of War de Epic Games, el título de acción en tercera persona que marcaría las pautas a seguir en un género que se ha convertido en referente de estos tiempos junto a los FPS. Destacó, entre otras cosas, por la presencia de un cooperativo potente en campaña que permitía a dos jugadores en misma consola superar la aventura principal de Marcus y Dom. Es como más se disfruta de la campaña de Gears of War, con el desafío de la ya archiconocida dificultad Locura. Si gustan los tiros y jugar en compañía, la franquicia de Epic es clave para disfrutar de tiroteos intensos en una misma consola. Las dos entregas posteriores ofrecían también la posibilidad de jugar a las modalidades horda y derivados, un tipo de juego de supervivencia repartido por rondas a cada cual más dura. Sin duda, uno de los cooperativos más potentes para la campaña principal de título alguno en esta generación.

Spelunky es una de las grandes sorpresas que recibió el bazar arcade de Xbox Live. Una revisión del título original para PC que presentaba como principales bases el desarrollo plataformero en 2D clásico de otras épocas y una dificultad simplemente endiablada. Un título con aire retro –viejo pero molón, que diría Rompe Ralph- que cuenta además con un cooperativo para hasta cuatro jugadores en una misma consola que es la clave de todo. Cuatro jugadores son cuatro veces más oportunidades de sobrevivir en los distintos escenarios de Spelunky, llenos de trampas, enemigos, tesoros y personajes secretos que descubrir. La gracia del cooperativo de este plataformas, además, es que obliga a los jugadores a estar en una misma zona, cooperando en un mismo punto y no despejando por libre. El jugador uno tiene una bandera blanca que indica donde sigue la cámara, y si alguien está demasiado tiempo fuera de la pantalla morirá. Un título imprescindible a cuatro mandos.

Monster Hunter es uno de los grandes fenómenos de los últimos tiempos en la industria de los videojuegos. Sin ir más lejos, en Japón enloquecen directamente con cada nueva entrega de esta saga de Capcom. La compañía decidió trasladar el fenómeno a Wii, consola más vendida de la generación que está llegando a su fin –y que en su caso ya tiene sucesora- y este Monster Hunter Tri se convirtió en el juego con mejor soporte online de la plataforma de Nintendo. A ello se le añadió también el cooperativo local para dos jugadores, con contenido desafiante en el que lo importante es jugar de manera coordinada dado que los enemigos no acostumbran a ser precisamente sencillos. Cuando jugamos a Monster Hunter Tri en local tenemos la pantalla partida para poder movernos con total libertad.

LittleBigPlanet es una de las nuevas franquicias de Sony que mejor ha calado entre el público. La obra de Media Molecule combinaba perfectamente las plataformas con un toque clásico con el extenso y abrumador editor de niveles capaz de generar fases variadas que tocan géneros diversos más allá de las plataformas. Una de sus grandes virtudes es el multijugador sobre todo en componente local, donde pueden jugar cuatro jugadores a la vez cada uno controlando su propio sackboy. Cooperar para solucionar los puzles que ofrece el juego, recolectar el mayor número objetos posibles y disfrutar de las zonas específicas para más de un jugador, uno de los elementos más curiosos de la campaña de LittleBigPlanet 2. A todo ello le podemos añadir los millones de niveles creados por jugadores o el nuevo y reciente Cross-Controller, que permite a un jugador jugar con PS Vita y a los demás con Playstation 3, ofreciendo colaboración en los dos planos y caminos distintos.

Borderlands 2, uno de los mejores títulos de 2012, es también un referente absoluto en el juego cooperativo. Título de acción en primera persona con escenarios y estructura de mundo bastante abierta, lleno de decenas de misiones principales y secundarias y con la cooperación como principal elemento para explotar al máximo el juego. Se trata de una aventura difícil que precisa de ayuda entre compañeros. Y en las versiones consolas –por eso no citamos a la de PC- se puede jugar dos jugadores a pantalla partida, algo muy útil para superar sobre todo algunos de los grandes jefes finales que nos vamos encontrando. Tiene la particularidad que a pantalla partida podemos conectar online con otros jugadores, y también permite jugar a cuatro en modo LAN. Disparos, mucho humor y subida de niveles para un videojuego de lo más completo en contenido donde se precisa compañía.

Minecraft en PC era todo un éxito, y el gran desafío estaba en trasladar un juego pensado dentro de los marcos de la libertad de controles del teclado y ratón para la consola. Y la jugada salió bien en Xbox 360, donde ha vendido lo que no está escrito y es de los más jugados en Live mes tras mes. Una de las grandes novedades del título en consola es precisamente la presencia del multijugador local para cuatro jugadores a pantalla partida, algo que no está de serie en PC. De esta manera entre diversos jugadores podemos construir, cazar y hacer todo lo que siempre se nos ha propuesto en Minecraft, como explorar y combatir juntos. Eso sí, para poder jugar a pantalla partida tenemos que tener la consola en formato HD con resolución mínima de 720p. También podemos combinar nuestras partidas locales con otros jugadores en línea, llegando hasta ocho.

Retro Studios se consagró con la trilogía de Metroid Prime, pero poco después demostraron que su versatilidad y calidad daba para hacer auténticos juegazos de tipologías diversas. Donkey Kong Country Returns es un buen ejemplo de ello: una propuesta que recuperaba la esencia plataformas bidimensional de la época Super Nintendo, calidad altísima mediante. Uno de los elementos que destacan del título, además de la extrema dificultad y el espectacular apartado audiovisual, es la presencia del cooperativo para dos jugadores controlando a Donkey y a Diddy. De esta manera podemos conseguir algunos extras y desbloqueables que sinceramente parecen imposibles para un solo jugador. Además, Diddy tiene algunas características propias que se pueden combinar bien con Donkey. Y por qué no decirlo, a dos mandos es más sencillo terminar con los complejos niveles de la aventura. Aunque se combinen más bien poco en términos generales y la interacción entre personajes no sea tan grande como en New Super Mario Bros.

Los dos videojuegos que se han publicado hasta el momento dentro de la franquicia Splosion Man tienen, además de 50 niveles variados y bien diseñados, un componente cooperativo de lo más destacado para hasta cuatro jugadores en modalidad local. Podemos jugar de una manera concreta los niveles en solitario, pero todo esto cambia si tenemos a tres amigos más compartiendo partida, ya que hay 50 niveles específicos con puzles que exigen que nos coordinemos los que estamos jugando en ese momento, luchando contra la cuenta atrás de un reloj en algunos casos y evitando en la medida de lo posible quedarnos atrás en el nviel, sino tendremos que esperar a un check point para aparecer. Ofrecer contenido específico para esta modalidad significa tener desafíos pensados para solucionar en cooperativo, algo que se agradece. Y más desde una misma consola. Y siempre pensando en cuántos somos: si somos tres, habrá cosas para tres jugadores, no para cuatro.

Dead Nation es uno deesos títulos que la práctica mayoría de usuarios de Playstation 3 seguramente tienen, más que nada porque se ofreció como compensación por el tema del PSN Gate de hace un par de temporadas. Se trata de un título descargable ambientado en el apocalipsis zombi con una perspectiva que recuerda lejanamente al clásico Smash TV donde dos jugadores a la vez luchan por sobrevivir exterminando zombis. Una de las particularidades del título es precisamente la posibilidad de jugar en modo local con dos jugadores a la vez en una misma pantalla y zona de acción. Hay dos elementos curiosos del cooperativo a tener en cuenta: una es que si jugamos en cooperativo esto se ve también en las escenas cinemáticas, algo que no acostumbra a pasar normalmente, y otra es que tenemos un modo extra zombies, donde los enemigos son más poderosos y los hay en mayor cantidad que si jugamos en solitario. Ayudarnos es vital, ya que no renacemos si morimos hasta llegar a un nuevo checkpoint.

De todos es sabido que la gran baza que juega año tras años la franquicia Call of Duty es el multijugador competitivo, donde los usuarios gastan horas y horas matándose entre sí. Pero cuando Treyarch salta a la palestra siempre se mira con buenos ojos qué van a hacer con el modo zombis, la tercera pata de Black Ops 2 basada principalmente en el cooperativo. Y esta vez va a más. Contamos con tres modalidades distintas de Zombis que podemos disfrutar con cuatro jugadores en pantalla partida a la vez. Una nos presenta un mundo abierto donde debemos movernos por distintas áreas mientras descubrimos secretos, nuevas armas y cumplimos una serie de objetivos. A esta se le añade también el clásico modo zombi en un espacio cerrado donde vamos abriendo puertas y superando oleadas moviéndonos y coordinándonos sin cesar. Por último tenemos la mezcla entre cooperativo y competitivo, ya que cooperamos con un equipo pero nos enfrentamos a otro. Los amantes de los zombis, disparos y cooperativo tienen horas de juego en esta modalidad. El título nos permite jugar contra bots con equipos offline de jugadores, por si queremos practicar estrategias para luego presentarlas al online.

Ha sido el título más importante de todos los que se han lanzado en Wii U durante su estreno, y no es para menos. New Super Mario Bros presentó como principal novedad en Wii el poder jugar por primera vez cuatro jugadores a la vez en un Mario de corte clásico: 2D. La experiencia supuso un éxito y Nintendo repite con esta entrega en la que pueden jugar hasta cinco jugadores en una misma consola. La fórmula es sencilla y conocida por todos ya: cuatro personajes ayudándose y cooperando en un mismo escenario y pantalla, nada de partirla en trozos. Podemos interactuar entre nosotros saltándonos encima para llegar más lejos o cogiéndonos los unos a los otros, por ejemplo. La gran novedad de esta entrega es que un quinto jugador puede ayudar a los demás desde el mando tableta de dos maneras: colocando plataformas efímeras para evitar que caigan al vacío o hacerles llegar donde sería imposible solo y deteniendo a los enemigos. Si nuestras acciones con la tableta son buenas tendremos una estrella que nos permitirá matar enemigos desde la pantalla táctil también. Buen diseño de niveles y juego variado que gana mucho en compañía.

La presencia de Scott Pillgrim en los videojuegos llegó con un juego que desprendía olor a clásico arcade por los cuatro costados. La fórmula elegida fue precisamente la de un brawler tipo Final Fight o las Tortugas Ninja donde vamos luchando con hordas de enemigos mientras avanzamos por escenarios de scroll lateral. Lo más destacado del juego sin ninguna duda era el cooperativo para hasta cuatro jugadores en modo local, algo que nos permitía no solo disfrutar de los mamporros en compañía –que siempre se agradece- sino también gozar de una propuesta que permite combos específicos cuando jugamos más de un jugador y la posibilidad, no siempre disponible en estos juegos, de revivir a nuestros compañeros. La campaña se hace mucho más divertida así, pero es que además podemos tirar del modo zombis, una especie de modalidad supervivencia que gana enteros en cooperativo.

Halo, al igual que pasa con el ya mencionado Gears of War, es sinónimo de cooperación, y la nueva entrega creada por 343 Industries no se olvida del cooperativo online –básico y un clásico de la saga- ni tampoco del cooperativo local, que es el que nos interesa. El retorno del Jefe Maestro nos permite jugar en cooperativo local con pantalla partida para dos jugadores tanto la campaña, algo que es vital en altas dificultades si no tenemos online, como también el modo Spartan Ops, que son una serie de misiones cortas y cooperativas que narran acontecimientos paralelos a la campaña principal. Un modo que se va actualizando además con nuevas misiones. Eso sí, remarcar que en Spartan Ops es necesario tener conexión a Internet aunque queramos jugar en modo local. La experiencia cooperativa en Halo es imprescindible para disfrutar al máximo del juego, e incluso podemos cooperar a pantalla partida en partidas competitivas en el matchmaking.

Ilomilo es uno de esos títulos mágicos que dan valor añadido a las propuestas alternativas que se pueden encontrar en los bazares de las consolas y descargas digitales de PC. Se trata de un simpático juego de puzles que nos propone un reto: hacer que en cada nivel que presenta el juego Ilo y Milo se acaben encontrando en algún punto y de cara. Dicho así suena fácil, pero los cambios de ángulos por las plataformas cuadradas, los obstáculos y los movimientos que debemos coordinar unos con otros lo hacen un título desafiante como pocos. Y que cuenta con cooperativo para dos jugadores, permitiendo así que cada uno controle un personaje distinto y vaya haciendo su propio camino, eso sí siempre coordinado con el otro si no queremos quedar atascados para siempre en medio de un laberíntico escenario. Juego para pensar a la vez y colaborar.

Otro de los grandes plataformas de corte bidimensional que ha hecho renacer el género en esta presente generación de consolas. Rayman Origins se convirtió en uno de los grandes títulos de 2011 por ofrecer un apartado audiovisual preciosista y una jugabilidad a prueba de bombas. Gran diseño de niveles, un buen desafío para completarse al 100% y la presencia de un multijugador local para cuatro personas que multiplica la diversión hasta el infinito. Los niveles no cambian si los jugamos solos o en compañía, pero la experiencia mejora –todavía más- cuando hay más de un jugador superando los desafíos del juego, molestándose cuando intentamos saltar o tapando la visión del otro en momentos claves. Un videojuego excelente y muy trabajado en el que el cooperativo –en una misma pantalla- funciona a las mil maravillas. Expectantes estamos con la próxima llegada de Rayman Legends a Wii U y la cooperación del mando-tableta de por medio.

En el mismo sentido que el último Tekken se mueven juegos como los también recientes –ambos de 2012- Street Fighter X Tekken (PC, Xbox 360, PS3) o Dead or Alive 5 (PS3 y Xbox 360). Ambos títulos permiten crear partidas donde podamos luchar con un compañero contra la máquina o incluso hacer que cuatro jugadores compitan a la vez entre ellos en equipos de dos contra dos. Sí, es competitivo –algo que escapa a la naturaleza de este reportaje- pero también cooperativo, hecho que no se acostumbra a dar demasiado en los juegos de lucha. Otro nombre que permite cooperación para el Arcade o combates con la IA es Mortal Kombat (PS3 y Xbox 360), donde podemos disfrutar de los combates Tag con un amigo y coordinarnos para atacar y entrar en combate. En definitiva, el cooperativo local sigue vivo y con buenos representantes a pesar de la irrupción del sistema online. Y que así sea por mucho tiempo.