Mercenary Ops

A mediados de 2012 se anunció un nuevo shooter on-rails para nuestros dispositivos iOS, Mercenary Ops. Ya desde un principio, el título causó gran expectación entre los fans del género por mostrar un apartado gráfico brutal ‒con el Unreal Engine 3 detrás‒ y grandes dosis de acción con la temática zombi de por medio. A pesar de mostrar grandes parecidos con la saga Resident Evil ‒el nombre del protagonista, además, es Leo, en clara alusión a Leon S. Kennedy‒ parecía que los jugadores iOS teníamos muy cerca un nuevo must have; nada más lejos de la realidad. A finales del pasado año se lanzó una primera versión del título que mostraba evidentes problemas técnicos y una jugabilidad táctil mal ajustada. Por ello ‒y después de más de dos meses‒ llega una nueva versión de Mercenary Ops con grandes mejoras y en formato free to play. Ahora sí, llega el momento de realizar un análisis más exhaustivo de un más que interesante shooter para nuestros iPhone, iPad e iPod touch. Si hemos jugado a Resident Evil 4 ‒los que no lo hayan hecho todavía no tienen excusa‒ tendremos constantes déjà vu mientras eliminamos los zombis y otras horribles criaturas de Mercenary Ops. Tanto es así que, más allá de una ambientación muy parecida a la de la popular franquicia de Capcom, la acción se desarrollará en un pequeño pueblo europeo y nuestro protagonista se llamará Leo; ¿simple coincidencia? La propuesta de juego, además, presenta enormes similitudes con la saga Chronicles de Resident Evil, es decir, shooters on rails totalmente enfocados a la acción más directa. Eso sí, en el caso de Mercenary Ops se muestra nuestra arma en pantalla. Si dejamos de lado estos aspectos y un argumento totalmente secundario ‒que sirve de simple excusa para meternos de lleno en su acción desenfrenada‒, nos queda un arcade de disparos bastante aparente. Acción programadaAsí, Leo se moverá de manera automática sin mucho más que hacer que disparar a todo ser que se cruce en nuestro camino; para ello, podemos elegir entre tres esquemas diferentes de control, cada uno de ellos ligados a un nivel de dificultad diferente. El nivel más accesible nos permite apuntar y disparar mediante un interfaz tipo point and click, es decir, sólo tenemos que realizar toques sobre nuestros objetivos para deshacernos de ellos; en dicho modo, los headshots serán muy sencillos de conseguir gracias a un nivel de precisión bastante elevado. Por otro lado, el nivel medio divide la pantalla en dos, lo que nos permitirá apuntar y disparar con total libertad; el lado izquierdo actuará de joystick virtual y sólo tendremos que tocar sobre el lado opuesta para disparar, además del icono de recarga situado en la esquina inferior. El último modo de dificultad ‒sólo disponible a partir de cierto punto de la historia‒ ofrece un interfaz prácticamente injugable, con el uso del acelerómetro de nuestro dispositivo para apuntar y los mismos toques sobre la pantalla para disparar. No es para nada recomendable y no entendemos muy bien la razón por la que se ha incluido un modo que nadie aprovechará. En la esquina superior izquierda de la pantalla se sitúan otros iconos importantes como el kit médico, que curará nuestras heridas tras varios enfrentamientos. También tendremos que superar pequeños quick time events deslizando el dedo en la dirección correcta. Durante los tiroteos podremos disparar a dianas que nos reportarán puntos extra que aumentarán nuestros beneficios, para así, invertir en nuevas armas o mejorar las que ya tengamos en nuestro poder. Será en este momento cuando entren en juego los siempre controvertidos micro-pagos; y es que algunas armas ‒como los mejores fusiles o escopetas, además de mejoras concretas‒ serán tan caras que ni jugando una y otra vez lograremos la cantidad necesaria. Así, podremos conseguir packs de 5.000 monedas a 0,89 euros cada uno, una opción que no es obligatoria en ningún momento pero bastante recomendable para aquellos que quieran exprimir al máximo Mercenary Ops. A nivel gráfico se muestra bastante competente, sin grandes alardes pero haciendo un buen uso del Unreal Engine 3 adaptado a iOS. Eso sí, los enemigos se repiten una y otra vez, aunque tanto las texturas como los efectos de iluminación están a gran nivel. A nivel sonoro, nos encontramos con los típicos sonidos y melodías de este tipo de ambientaciones; tanto las voces como los subtítulos llegan en perfecto inglés, aunque su presencia es testimonial.

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