The Cave

¿Cansados de los juegos de acción en primera persona? ¿de las texturas marrones clónicas derivadas del Unreal Engine? The Cave parece ser la respuesta a vuestras plegarias si las dos preguntas anteriores han sido respondidas con un "si". Anunciado el pasado año, durante el E3 2012 pudimos conocer de primera mano los entresijos del título en una presentación a puerta cerrada llevada a cabo por su mismísimo responsable, Ron Gilbert, a quien conoceréis más por haber sido el creador de la saga Monkey Island o del juego de culto Maniac Mansion. Con este nuevo proyecto su ambición es más alta que nunca, habiendo declarado que "The Cave es una aventura, pero no un plataformas. La aventura es el mejor género del mundo, y The Cave es su evolución."

Palabras que en boca de otra persona podrían tomarse a broma pero que saliendo de Ron Gilbert hay que tener muy en cuenta. Cuando vimos el juego el pasado mes de junio advertimos que gran parte de las obsesiones de su creador han sido recuperadas y revividas para este proyecto. Luego supimos que en realidad el concepto de juego llevaba rondándole la cabeza desde hacía unos 25 años, cuando trabajaba en LucasArts. El título iba a tener tres personajes, frente a los siete que se incluyen finalmente, todos ellos complementarios entre sí para que la aventura progrese de forma más variada. Gilbert admite que su objetivo es pues apuntar a todo el público posible respetando su inteligencia, ofreciéndole retos y situaciones en un heredero de la mecánica de Maniac Mansión, como el mismo admite, pero con los añadidos necesarios para convertirlo en una experiencia moderna.



"Cuando Maniac Mansion salió a la venta la gente no creía que fuera una aventura (...) porque tenía mucha animación de personajes. Desde entonces el género ha cambiado mucho, por lo que con The Cave hemos querido demostrar qué hace ahora una aventura gráfica," explicaba Gilbert el pasado mes durante una presentación del título. Lo primero que cambia con respecto a los clásicos point'n'click es que definitivamente... no hay point'n'click. Esta mecánica de pulsar por zonas del escenario para moverse fue erradicada para introducir un desarrollo de plataformas 2D de avance lateral, pero sólo como método móvil y no tanto como género, como Gilbert se ha empeñado en recalcar, apuntando a que no se le dan bien los plataformas, pero que buscaban "algo que permitiera moverse en el mundo sin que fuera necesariamente un desafío (...) hay una energía nerviosa en The Cave (...) incluso cuando no estás haciendo progresos o nada concreto, puedes saltar de lado a lado... lo que indirectamente ejercita una parte diferente de tu cerebro."

De estas declaraciones puede extraerse una ambición por parte de Ron Gilbert y es la de hacernos pensar. Según ha declarado, la dificultad del juego es variable dependiendo, cómo no, de la persona que esté jugando. "Yo, conociéndome cada puzle de memoria, habiéndomelo acabado cientos de veces, he intentado hacer un speedrun y me ha llevado unas cuatro horas, cuatro horas y media," explicaba, añadiendo que un seguidor del género bien nutrido en los desafíos propuestos en éste podría igualar la hazaña, mientras que  un neófito tardaría considerablemente más. Al respecto a la duración explicó cómo la primera partida será sólo un paso inicial en el desarrollo del juego, pues los personajes elegidos en ésta determinarán lo que encontremos por el escenario. Para verlo absolutamente todo en The Cave habrá que completar el título al menos tres veces.



Cooperativo... sólo local
En la última demo que se ha podido probar del juego se ha dejado claro que The Cave es un título pensado para jugar con la mente bien abierta. Como ya os explicamos en nuestro primer texto, aquí iniciaremos la partida pudiendo elegir entre siete personajes diferentes, teniendo cada uno una habilidad única que le permitirá avanzar en la historia. Todos responden a estereotipos y tienen su propia historia que se irá desarrollando a medida que juguemos bien de forma natural o participando en submisiones dedicadas a cada uno. Así, mientras el Granjero busca a su verdadero amor, lo que le llevará a una extraña feria, el Caballero de brillante armadura deberá "rescatar" a la princesa para hacerse con el poder del reino. El resto de personajes está formado por una Científica, un par de mellizos, un aventurero, un viajero en el tiempo y un monje.

Para explicar mejor el funcionamiento del juego habría que recuperar al Granjero, que protagonizaba -junto al Aventurero y al Caballero- la citada demostración. Avanzando por el nivel se llegaba a un punto en el que podía entrarse en una extraña feria. La única forma de acceder a ella era llevar a este personaje en el equipo, por lo que si no era éste el caso habría que iniciar otra partida para poder entrar aquí. Es sólo una muestra de cómo los recorridos podrían variar en base a la elección inicial, claro. Bien, con el Granjero en el equipo había que superar una serie de puzles para finalmente dar con la ansiada amada del protagonista. Lamentablemente ya había entregado su corazón a un hombre forzudo, por lo que el siguiente paso del nivel era quemar la feria con todo lo que había dentro de ella. La realización de los puzles respondía a la lógica de las aventuras de LucasArts, de esta forma, cualquier objeto del escenario podría estar implicado: hasta el más insignificante. El toque de Gilbert se podía ver en el sentido del humor y en el propio diseño de cada desafío.



Con respecto a esto último habría que hacer un inciso y es que el juego ha sido pensado para jugar en cooperativo, bien sea en solitario (suena contradictorio, lo sabemos) o en compañía. El elegir a tres personajes de forma inicial nos permitirá poder alternarlos en cualquier momento del juego para ir realizando acciones útiles para cada uno de ellos, por ejemplo nadar con el Granjero, o defendernos del fuego con el Caballero. En ocasiones los puzles obligarán a usar a dos personajes simultáneos, pero la parte cooperativa -que permite hasta a tres jugadores entrar a la partida- viene más dada a modo de evolución natural del género, siempre de acuerdo a palabras de Gilbert, que explicaba de la siguiente manera, "Los juegos de aventuras son los títulos multijugador originales para mucha gente," apuntando a cómo en su momento recogían a varias personas frente a la pantalla del ordenador para dar respuestas a los puzles, "The Cave es como esa experiencia, pero en lugar de decirle a tus amigos qué hacer, puedes directamente entrar con el mando y controlar a otro personaje."

Añadía, además, cómo The Cave puede ser un juego fantástico para parejas: "Muchas veces juego juegos con mi novia, incluso aunque a ella no le interese a lo que juego, o viceversa, nos sentamos en el sofá juntos y observamos. Si ella pudiera coger el otro mando y participar, eso mejoraría la experiencia (...) se trata de obtener una proximidad física para interactuar de forma más directa." The Cave, sin embargo, tiene un punto negro y es que no existe pantalla partida y si un jugador elige a cierto personaje los demás tendrán que esperar a que acabe para volver a controlar a otro. Esto no es tan problemático en PS3/360/PC, pero la versión de Wii U por ejemplo no permite a dos jugadores hacer cosas distintas en la pantalla de la TV y de mando al mismo tiempo, algo que ha sido criticado por los medios americanos puesto que no aprovecha en absoluto las posibilidades que brinda el sistema de la plataforma.



Gilbert explicaba que esto está hecho así aposta, incluyendo la imposibilidad de jugar online, así que habrá que ver cómo funciona cuando podamos probar el juego en primera persona en cuestión de semanas. Por ahora The Cave tiene muy buena pinta: todos coinciden en que el toque retro de títulos como Maniac Mansion está presente, si además le sumamos ingenio a nivel de diseño de puzles, personajes y escenarios, que las microhistorias de cada personaje están repletas de imaginación y humor negro, y que parece bastante rejugable, podemos anticipar que cumplirá las expectativas y que nos devolverá un tipo de juego que se creía prácticamente perdido. Saldremos de dudas muy pronto, pero de momento las vibraciones son buenas. ¿Y vosotros qué pensáis? ¿creéis que será un nuevo añadido a la gran lista de juegos de Ron Gilbert o que estará por debajo de sus grandes clásicos?