Fuse, Impresiones

No es fácil encontrar un hueco en los third person shooter esta generación pero aún hay quien lo intenta con nuevas IP. El género de Max Payne, Gears of War o Uncharted es de los más poblados del momento y las compañías buscan nuevas experiencias pulidas en un terreno realmente allanado por el paso de muchos otros, persecución plena de identidad diferenciada. Insominiac Games, padres de los brillantes Ratchet and Clank o la serie Resistance, abandonan la exclusividad con consolas de Sony y se lanzan junto a EA hacia un nuevo proyecto multiplataforma que llevan bastantes meses programando, solo para consolas de momento (Xbox 360 y PlayStation 3). Conocido hasta hace muy poco como Overstrike,  Fuse, que llegará en marzo de 2013, es un título pensado para evolucionar la forma en que nos enfrentamos a los modos cooperativos en videojuegos, una obra que narrará cuatro historias que se cruzan en una importante misión interplanetaria donde las lluvias de balas en todas direcciones son las claras protagonistas.

La Fuse es una energía escasa materializada en una sustancia líquida anaranjada capaz de producir efectos sobrenaturales y sorprendentes para el ser humano. La lucha por esta materia prima llevará al escuadrón protagonista, el Overstrike 9, al interior de una guerra contra la facción terrorista Raven donde todos los implicados la usan para sus armas, escudos y herramientas de ayuda o habilidades especiales, cada uno con una serie de atributos y rifle central muy distintos. Es munición y gadget de mejora, es la llave de toda la propuesta. En sistema lineal de misiones, el juego pondrá a cuatro superagentes a luchar codo con codo contra una buena variedad de enemigos y robots creados por éstos, incluidos enormes jefes finales, a través de una interesante gama de zonas y ambientes donde en solitario o acompañado el jugador debe saber afrontar diversos retos contra una IA capaz de gestionar perfectamente los movimientos de los personajes que no sean controlados por otro usuario.

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Fuse es un "4 contra el mundo" en todo momento, un título que recorrido en singleplayer deja ir cambiando en tiempo real de personaje, también en cooperativo siempre que alguno de los cuatro esté libre. Sus creadores hablan de un "letal teamwork" nunca antes concebido en otro videojuego del género. Desarrollar cada especialización será fundamental para poder superar con éxito objetivos que se caracterizan sobre todo por la cantidad de enemigos y tiros en pantalla, creando una experiencia jugable desenfrenada y donde moverse con cautela que Electronic Arts ya nos ha dejado probar en su EA Showcase de otoño de este año, celebrado la semana pasada. Una demo de unos 20 minutos explicó a los asistentes cómo de vital era colaborar en Fuse e incluso saber beneficiarse con un personaje de las habilidades del resto, a expandir con todo un árbol de mejoras.

A partir de aquí se dispara este juego de coberturas, armas extraordinarias y hasta cierto añadido de plataformeo y puzles a resolver entre varios, recordando ligeramente al gameplay de Uncharted, o incluso al de Halo por aquello de las lluvias de balas cruzadas. Fuse se controla ágil, y el diseño de los escenarios -según por lo visto y recorrido hasta el momento- está diversificado para que haya distintos caminos para alcanzar los puntos a tomar, puertas a abrir o items a recoger. No es estrictamente scriptado ni pasillero. La trama tendrá un peso contundente en toda la oferta del producto, siendo uno de los puntos que más han interesado a Insomniac desde el principio además de la capacidad de poner en pie un despliegue técnico que, sin demasiada identidad y con mucho elemento recurrente que lo hace genérico, es capaz de mover con suavidad y soltura la acción y los entornos, aparentemente tampoco muy inspirados, novedosos u originales. Hemos recorrido una parte de Hyperion, pero también habrá misiones terrestres, como la confirmada en la India.

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Cuatro historias, cuatro guerreros

Dalton Brooks es el líder del equipo Overstrike 9, "el tanque" del grupo y quizá el personaje más equilibrado en cuanto a especialización en armamento y habilidad protectora. A los pocos minutos de juego este robusto general aprenderá a manejar un escudo de plasma capaz de absorber las balas rivales y lanzar ondas expansivas con esa energía para dañar a lo que haya enfrente, permitiendo también disparar desde detrás de la gran pantalla de protección que genera. Junto a él está Izzy (Isabelle Sinclair) , la médico, capaz de lanzar curaciones a distancia como granadas para reanimar a aliados y con una poderosa habilidad Fuse que cristaliza a los enemigos en el aire para poder acabar con ellos de manera más rápida y eficaz, deshaciéndolos en brillantes pedazos. Jacob Kimble es el sniper, con un arco especial con mirillas de zoom y capaz de generar incendios a su alrededor gracias a las habilidades de Fuse, lo que le deja proteger áreas y la vez controlar las largas distancias. Por últimi está Naya Deveraux, con su Warp Rifle que ejecuta un potente rayo celestial final que puede duplicarse en cadenas de combos y limpiar zonas enteras en cuestión de segundos, además de poder hacerse invisible e infiltrarse en las líneas enemigas.

Estos cuatro nombres cada uno con su clase presiden Fuse. La distinción entre ellos es más marcada que en otros juegos de disparos pero lo cierto es que su especialización resulta recurrente al jugador habitual del género, que reconocerá rápidamente las clases (sniper, recon, apoyo...) y formas de moverse y disparar. Pero éstos son sus puntos de partida, a partir de aquí cada personaje desplegará un árbol de habilidades propio con 12 casillas, 4 skills autónomas ampliables a 3 niveles cada una. Subir de nivel no es fácil, y habrá que pensarse bien cómo evolucionar a los personajes para poder actuar con la mejor sinergia con el resto del grupo, pues ésa es otra de las claves de Fuse, la sincronización entre los cuatro protagonistas y sus distintas capacidades sobrenaturales.

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Por ejemplo, Dalton puede desplegar su enorme escudo de plasma y los demás colocarse detrás para disparar estando a cubierto, ya que las balas aliadas lo atraviesan sin problemas, y además darán un plus de experiencia al personaje protector. O la invisibilidad de Naya puede ser aprovechada por Jacob para que ésta coloque explosivos incendiarios en el mismísimo corazón de los acuartelamientos enemigos. También jugar con las distancias será importante para Isabella, que siempre tendrá que cubrir la retaguardia lanzando granadas curativas, o cristalizar a enemigos para que otro jugador con escopeta los desmembre de un balazo. Insomniac promete un buen arco de posibilidades cooperativas y coordinadas de este tipo. Habrá jefes finales y puzles que solo se zanjen sabiendo encajar en cada momento las capacidades de unos y otros personajes. Si uno muere, todos mueren.

El flujo de Fuse que permite todo esto se agota, pero hemos visto que se rellena con rapidez lo que deja abusar de las habilidades sobrenaturales tanto de las armas como de los propios protagonistas. Serán 8 las armas que utilicen Fuse aunque habrá un arsenal enriquecido, aseguran. En la misión jugada, hemos visto también cómo es importante aprovechar las capacidades del resto de personajes e incluso intercambiar de uno a otro para desarrollarlos a todos por igual si se recorrer en solitario. Además, el propio diseño bastante abierto de los mapas invita a alejarse en cierta medida del grupo y hacer la guerra por nuestra cuenta, por ejemplo infiltránonos en una alcantarilla para entrar en la base militar por una vía alternativa a la puerta central. No hay apenas destrucción del entorno ni demasiada interacción, pero los cruces de disparos que pueblan la superficie nos harán estar casi todo el tiempo a cubierto y buscando rodeos y flanqueos que nos permitan limpiar.

Hemos visto también torretas, ágil sistema de escalada por cajas y salientes, o zonas que vaciar de rivales para que se dispare una cinemática que nos abra la siguiente puerta y área. Parece ser que todas estas directrices formarán su mecánica, muy centrada en el disparo dentro de una atmósfera futurista pero que busca la variedad de situaciones y encontronazos. No es excesivamente realista, quizá más bien arcade, no se muere de un disparo. Y ahí entran en juego los jefes finales, de los que ya hemos visto uno de los primeros que es un rapidísimo robot gigante que dispara una metralleta, una especie de mecha que se mueve a toda velocidad y dando saltos por el escenario, al que habrá que endosarle cientos y cientos de tiros. El escudo de plasma de Dalton Brooks es una herramienta imprescindible en este enfrentamiento, y nos da que en muchos otros debido a su poderosa cobertura y protección que proporciona sin limitar demasiado su uso. Esperemos que el resto de habilidades queden igual de bien implementadas y con tanto uso, pues de momento parecen secundarias aunque, eso sí, atractivas todas ellas.

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Reparto y presentación

El apartado técnico de Fuse puede no parecer destacable a primera vista, pero lo cierto es que detrás de este juego con más de dos años de desarrollo a sus espaldas hay un buen número de horas de motion capture con actores reales, una arquitectura de escenarios que busca lograr más que el simple enmarcado de la acción, o un trabajo de sincronización labial y gesticulaciones de los personajes que visto con detalle alcanza los estandartes de la generación. Es la primera vez que Insomniac trabaja en formato multiplataforma, y aunque la estética y artes del juego no logran coronarse e impactar como muchos otros títulos ya consiguen en sus primeras fases de producción, lo cierto es que su principal proeza es colocar en pantalla todo el despliegue de explosiones, láseres y balas que veremos y ya hemos presenciado, connotando intensidad bélica en un futuro que se dibuja como siempre pero deja mayor sensación épica gracias al constante peligro que supone exponerse.

Actores de renombre de doblaje darán voz a Dalton (Brian Bloom), Jacob (Khary Payton), Naya (Jennifer Hale) y Izzy (Ali Hillis). El gusto por lo cinematográfico característico del estudio de Resistance no desaparece en este juego, de hecho se incrementa, con muchas secuencias cinemáticas que nos contarán la lucha de cada personaje y van describiendo poco a poco un argumento que asegura giros y saltos temporales para narrar una historia futurista que da forma a todo el conjunto de misiones a lo largo de muchas atmósferas distintas. Habrá también que escoger algunos caminos y decisiones valoradas, lo que enseñará partes distintas.

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Marzo de 2013

Han sido muchos meses de trabajo en un terreno realmente complicado, los TPS, y parece que Insomniac va a jugársela con una IP con ideas pero que ya no termina de impresionar, al menos por lo contemplado en este primer hands on. Especial mención hay que hacer a cómo se ha intentado que los jugadores se coordinen para resolver puzles y sobrevivir a descomunales tiroteos donde uno se siente casi desbordado por la situación pero que la llave  del éxito reside en lograr sinergias de ataque en grupo amortizando las habilidades únicas de cada personaje. A cambio, su diseño artístico y quizá algunos flecos del aspecto gráfico no llaman la atención como habríamos deseado, poniendo en pie un shooter cooperativo aparentemente genérico pero que quizá -ojalá- esconda mucho más de lo que esboza a primera vista. Dejaremos que Fuse invada nuestro cuerpo en próximas tomas de contacto hasta marzo que se estrene. De momento, es un disparo certero en diversión y compenetración, pero tiene más que recargar para dominar el género.