XCOM: Enemy Unknown, Impresiones Gamescom

Viajamos hasta la década de los noventa para descubrir las raíces de la serie XCOM, que este año recibe el que será el primero de dos títulos que tratan de revivir una saga querida por los nostálgicos. XCOM: Enemy Unknown es un juego de estrategia por turnos basado en un futuro próximo donde la Tierra se ve asaltada por una desconocida amenaza alienígena. Una frase de Arthur C. Clarke inicia nuestra primera toma de contacto en los momentos iniciales de la campaña para un jugador: “Existen dos posibilidades: o estamos solos en el universo, o no. Ambas son igualmente aterradoras”.

La demo de la Gamescom nos traslada a la campaña principal mediante un tutorial donde recibimos las primeras órdenes en combate. Nuestro grupo de soldados es desplegado en territorio urbano invadido por una amenaza indeterminada. Alertados por una extraña emisión de voz, debemos avanzar al norte del escenario utilizando las coberturas que nos brindan los elementos del entorno y que son similares a las usadas en juegos de acción en tercera persona como Gears of War. Cada soldado cuenta con dos movimientos por turno, así que desplegamos poco a poco las unidades hasta vislumbrar el almacén desde donde se emite la voz.

En el hasta ahora plácido avance de las tropas descubrimos que el trabajo de Firaxis Games cuenta con un motor gráfico que desde la perspectiva aérea cumple con las exigencias del género, pero que también es capaz de recrear momentos cinematográficos aproximando la cámara a la acción. Los soldados avanzan, descubren cadáveres, se aproximan a puertas y ventanas para investigar, y las atraviesan desde una perspectiva que, en ocasiones, es más próxima a la acción en primera persona que a la estrategia. Llegados al interior del almacén, aprovechamos los turnos para aproximarnos al emisor de la misteriosa voz, quien resulta ser un soldado controlado por un alienígena de tipo gris (cabezón, ojos saltones) que termina inmolándose con una granada y acabando con la vida de una de nuestras tropas.

Comienza la acción. Nuestro escuadrón debe ponerse a cubierto, retrasando filas, para evitar que los extraterrestres consigan la victoria. Posicionamos los soldados próximos a los enemigos de manera táctica y pulsamos el gatillo derecho para desplegar el menú de acciones para ocultarnos, vigilar las proximidades, disparar al enemigo (también lanzar ráfagas a la desesperada) y arrojar granadas. La embestida finaliza con todos los alienígenas muertos, pero con un funesto saldo para el escuadrón, que ha perdido a casi todos sus efectivos. El único superviviente retorna a la base para reportar. Se trata de un centro de operaciones donde accedemos a información sobre las misiones, podemos efectuar mejoras de los soldados y realizar investigaciones.

La primera impresión con esta base central en el desarrollo de la campaña recuerda a Starcraft II y a su centro de operaciones, pues en esencia funciona de manera similar incluso en aspectos como la toma de decisiones que impactan sobre el desarrollo de los acontecimientos como la orden de investigar una u otra tecnología. De hecho, un ejemplo se presenta cuando se nos da a elegir entre dos países diferentes para investigar sobre el terreno las abducciones. “Sí, cada vez que juegues tendrás decisiones diferentes. Quizás en la primera tendrás que elegir entre España y Corea, y en la segunda entre Reino Unido y Brasil. Estas elecciones aportarán recompensas diferentes y también impactarán sobre el desarrollo de los niveles”, explica Jake Salomon, lead designer del título.

Las habilidades son específicas de la clase de personaje que controlamos, por lo que el escuadrón que empleamos en las misiones es único y mejora a medida que sobrevive, recibiendo experiencia y ascensos. Por otra parte, resulta curioso que la misión ha terminado y prácticamente no nos hemos percatado de que estamos jugando con el mando de Xbox 360 en lugar de con teclado y ratón. De hecho, el primer paso dado por el equipo de desarrollo fue analizar cómo trasladar los controles del teclado y del ratón al mando: “Lo primero que analizamos fue cómo conseguir que el control resultara natural en el mando […] Una de las razones por las que encaja tan bien es porque se trata de un título por turnos donde solo controlas un soldado a la vez”.

Multijugador híbrido
El modo multijugador de XCOM: Enemy Unknown fue anunciado recientemente y se ha enseñado por primera vez en la feria germana, donde hemos podido participar en una partida contra otro jugador. Antes de entrar en la acción, debemos configurar nuestro escuadrón formado por seis soldados de libre elección y entre los que podemos crear equipos humanos, extraterrestres o híbridos consumiendo los puntos disponibles. Todas las unidades de la campaña principal tienen hueco en el modo multijugador y pueden ser personalizadas con habilidades y armas a cambio de puntos.

La acción, tan táctica en el online como en la campaña, transcurre en turnos de dos minutos en los que debemos desplegar soldados por el mapa sin ver las acciones del rival, particularidad que añade tensión a las partidas. Solo localizaremos al enemigo cuando nos aproximemos a éste, por lo que es vital que nuestra táctica cubra el mayor número de flancos posibles. Lo mismo sucede con la búsqueda de un equilibrio entre la media docena de unidades que conforman el escuadrón. En nuestro caso, apostamos por cuatro soldados especialistas en armas de fuego y dos vigilantes, hombres de negro capaces de lanzar ataques extraterrestres venenosos a distancia.

El ritmo del multijugador es ligeramente pausado y acorde con la estrategia por turnos, por lo que premia más la táctica y el razonamiento de los movimientos que la velocidad extrema, aunque en ocasiones tengamos que apurar hasta el último segundo para dar órdenes a todas las tropas. “Estamos entusiasmados con el multijugador. Lo acabamos de anunciar ahora. La base es que el jugador tendrá su propio escuadrón a la hora de combatir, y podrá configurarlo bajo su propio criterio”. La configuración se podrá guardar para reproducirla en futuras partidas, pero no compartir con otros jugadores, funcionalidad por la que preguntamos y que despierta el interés en el diseñador.

Cuando XCOM: Enemy Unknown llegue a las tiendas el próximo mes de octubre, lo hará con la difícil tarea de combatir contra titanes comerciales del palo de Assassin’s Creed y Call of Duty. La valentía de 2K Games y Firaxis por embarcarse en un proyecto como éste es palpable en tan solo 30 minutos de demo. Saben que tienen un título diferente y con personalidad: “La ventaja de XCOM es que se trata de un juego muy, muy diferente y con una jugabilidad que, honestamente, no se ha podido jugar antes. Así que si estás buscando una nueva experiencia en términos de mecánicas de juego, XCOM es definitivamente tu opción”.