Diablo III, Bárbaro

Tras darle un vistazo a todo lo que puede dar de sí el Demon Hunter, es momento ahora de profundizar en las mecánicas jugables que van a definir a la que posiblemente sea la clase más carismática de la saga Diablo III: el mortífero y letal Bárbaro. Este maestro de armas, que domina a la perfección todas las técnicas de combate cuerpo a cuerpo con un amplio arsenal a su disposición, se perfila como un versátil personaje que no sólo será capaz de infringir ingentes cantidades de daño sino también soportarlo, algo que será fundamental para poder combatir con las numerosas hordas de enemigos que nos encontraremos a lo largo del juego. Así pues, repasemos las principales característica de este letal guerrero.

Por lo visto hasta el momento en los 13 primeros niveles que hemos podido probar tanto en la beta cerrada del juego como en la beta abierta del pasado fin de semana, es evidente que el Bárbaro de Diablo III hereda muchas de las características que definen al Guerrero de World of Warcraft, el otro título de corte rolero de la compañía de Irvine. A diferencia de su homónimo en Diablo II, la fuente de poder del Bárbaro en esta ocasión no es el maná, sino la furia. Es un sistema mucho más acorde con el perfil y lore del héroe, que acumula furia a medida que infringe o sufre daño para después hacer uso de ella para llevar a cabo los ataques más devastadores en el terreno cuerpo a cuerpo de todo el juego. Como era de imaginar, el Bárbaro es un personaje con un amplio repertorio de habilidades orientadas a la lucha física, aunque a medida que subimos de nivel obtenemos otras que le dotan de mayor movilidad y no lo limitan a un tanke.

Al crear el personaje (cuyo modelo es, de lejos, el más corpulento de todas las clases, y uno de los que posee mejores animaciones), se nos brinda automáticamente una de las habilidades básicas, Bash, que propina un poderoso golpe al enemigo que genera furia con probabilidad además de aplicar un "knockback" que aparta al contrincante. Sin embargo, una de las primeras runas aplicables a Bash nos permite modificar ese afecto secundario para que aturda en vez de lanzar al enemigo hacia atrás. El Bárbaro, por su propia concepción como guerrero limitado al combate cuerpo a cuerpo, es uno de los héroes que más se beneficia del uso de las runas aplicadas a las habilidades, pues alteran notablemente la función de cada una de ellas.

A nivel 2 obtenemos la primera habilidad secundaria, Hammer of the Ancients, que golpe de forma devastadora a todos los enemigos que se encuentran frente al Bárbaro, a cambio de 20 puntos de furia. Es a partir de entonces cuando vemos como funcionan las mecánicas del héroe: la habilidad principal, enlazada al botón izquierdo del ratón, genera furia, y la habilidad secundaria la gasta. A medida que vamos subiendo de nivel obtenemos nuevas habilidades de cada tipo. Dentro del grupo de las principales obtenemos algunas "Cleave", un ataque en el que se balancea el arma atacando a los enemigos de alrededor, o "Frenzy", que aumenta progresivamente la velocidad de ataque del Bárbaro. Y en el apartado de secundarias recibimos "Rend" y "Seismic Slam", la primera enfocada al daño en área y la segunda para "desengancharnos" de todos los enemigos que nos rodean con otro poderoso "knockback" masivo.

Por último, en la beta también se han podido empezar a ver algunas de las otras habilidades asignables a la barra de cuatro botones inferior derecha. Por el momento, hemos probado las técnicas defensivas "Ground Stomp", que paraliza a todos los enemigos a rango, y el "Leap", un ataque que ralentiza a los afectados, además de otras dos ofensivas: "Ancient Spear", un ataque a distancia que ralentiza al objetivo, y "Revenge", un devastador ataque reactivo que tiene una probabilidad de activarse cada vez que somos golpeados. Aún nos faltan por ver muchas más habilidades defensivas y ofensivas, así como las otras dos restantes, "Tactics" y "Rage". Al igual que con el resto de clases que estamos repasando estos días desde MeriStation, parece claro que la personalización y adaptación de cada héroe a los gustos del jugador y a las características de la batalla será uno de los puntos más refinados y atractivos de Diablo III.

En definitiva, nos ha gustado tanto como sorprendido el Bárbaro. Las clases "melee" siempre corren el riesgo de resultar algo monótonas de jugar, pero como decíamos, la experiencia de Blizzard con el Guerrero de su franquicia hermana ha dotado al Bárbaro de unas mecánicas variadas entre sí, lo que completará un personaje que no sólo será capaz de aguantar daño y provocarlo con las armas y armaduras más poderosas del juego, sino también tener las herramientas necesarias para desenvolverse en cualquier situación y demostrar que, en el campo de batalla, nadie está más preparado que él para acabar con los males que nos esperan en Diablo III.