El Circuito de Montmeló acogió la final nacional de Forza Motorsport 4

El circuito de Montmeló alberga cada año decenas de pruebas automovilísticas de primer nivel, incluido el siempre emocionante Gran Premio de Formula 1. Esta vez el mítico trazado reunió en uno de sus box a más de un centenar de personas que, entre aficionados, familiares, televisiones y medios de comunicación especializados, querían presenciar la mejor competición nacional de Forza Motorsport 4, evento que organiza Microsoft y que tiene como objetivo nombrar al mejor piloto virtual del país y otorgarle los 15.000 euros de premio.

El torneo reunió a los 8 mejores pilotos nacionales que, tras haber competido contra más de 5.000 jugadores online de toda España y haber pasado unas terribles competiciones durante el mes de diciembre en 16 Mediamarkt de todo el país, se enfrentaban al reto final de ser los más rápidos en completar 3 vueltas al circuito de Cataluña.

Para ello, como si fuesen verdaderos pilotos de competición, tuvieron toda la mañana previa a la carrera para poder entrenar, ajustar los reglajes y conocer mejor el coche con el que todos iban a competir. El vehículo elegido fue el potentísimo Ferrari F458 Italia, una maravilla de la ingeniería con un motor V8 de 4,5 litros y 570 CV de potencia que, al igual que en la vida real, debía ser controlado en cada curva con total delicadeza y agresividad.

Tras una larga jornada matinal de test los pilotos realizaron sus respectivas vueltas rápidas en el Circuit de Catalunya, que era el trazado virtual que albergaba la competición. El resultado final de la calificación fue que el favorito Ángel Borrego, vigente campeón del torneo, saldría desde la Pole Position.  Una vez recuperada las fueras, los pilotos fueron llegando de nuevo a sus vehículos entrada la tarde. En ese momento los nervios estaban a flor de piel y algunos debían recurrir al fisioterapeuta para descargar su musculatura o tratar algún tipo de problema físico.

Aparte de los cuidados corporales los participantes ajustaban sus asientos, colocaban sus cascos para oír perfectamente los motores en el cambio de marcha y se descalzaban para poder competir con la mayor precisión posible. Rituales que les mantenían dentro de su rutina habitual y que les permitían no perder la concentración ante lo que estaba a punto de suceder.

Cada vez más cámaras, periodistas, familiares y amigos se aglutinaban en el box del circuito para animarles, algo que sin duda presionaba a los competidores. Para añadir más tensión se confirmó que Daniel Alves, jugador del F.C. Barcelona, y Laia Sanz, 11 veces campeona del mundo de trial y mejor mujer participante en el Dakar en los años 2011 y 2012, iban a ser los padrinos del torneo, algo que siempre genera algo más de nerviosismo.

Finalmente el lateral brasileño del Barcelona no pudo asistir al evento por recomendación de Pep Guardiola, que quiere tener a todos los futbolistas concentrados. La que sí apareció y estuvo de lo más simpática fue Laia Sanz que no rechazó hablar con la prensa en ningún momento y estuvo muy atenta a la competición. Tras todo el revuelo habitual que generan las grandes competiciones los pilotos estaban preparados y dispuestos a demostrar que se habían ganado el derecho a ganar el título nacional de Forza Motorsport 4. Con todo en orden el speaker fue presentando a cada competidor y recordó las reglas del torneo. Tras una vuelta de calentamiento la carrera dio comienzo ante los aplausos de los allí presentes.

El sistema de carrera impedía que los coches pudiesen impactar unos con otros lo que favoreció a dar más valor y justicia al resultado final evitando maniobras dudosas, algo que estaba siendo vigilado por un juez que buscaba que todos los participantes respetaran los límites legales de la competición.

La prueba se desarrollo con gran pasión desde el primer momento aunque rápidamente Ángel Borrego, que partía desde la Pole, demostró por qué es el mejor piloto nacional.  Ángel lució un pilotaje preciso a gran velocidad y con agresividad en cada uno de los tramos del trazado, quedándose solo en cabeza a mediados de la segunda vuelta.

El resto de pilotos nada podían hacer para seguir el ritmo que imponía e intentaban ir lo más rápido posible esperando un fallo que les hiciese recortar tiempo, Ángel, sabedor de su ventaja, miraba constantemente por el retrovisor para controlar a sus rivales. La última vuelta fue realmente un paseo para el líder que demostró por qué había ganado el año anterior.

Tras su paso por línea de meta celebró la victoria con sus familiares y amigos, especialmente con su mujer que en todo momento le estuvo apoyando. Tras pasar por el fotocol, los 3 primeros clasificados, emulando a estrellas como Fernando Alonso o Sebastian Vettel, subieron al pódium del circuito para celebrar su resultado. La ceremonia de entrega de premios contó con el speaker habitual, con Laia Sanz y con el tradicional baño en cava.

El ganador del 2º Certamen nacional de Forza Motorsport consiguió 15.000 euros en metálico, una experiencia de pilotaje con un coche de competición y una Xbox 360 edición especial de Forza 4. Por su parte, el segundo ganó la videoconsola especial de Forza 4 y una experiencia de pilotaje de competición, mientras que el tercero se llevó únicamente una Xbox 360 edición especial.

Tras un duro día de competición y liberándose finalmente de los nervios y la prensa, los pilotos fueron abandonando el recinto con mejor o peor cara pero habiendo disfrutado de una experiencia magnífica que engrandece cada vez más el profesionalismo de los jugadores. Una realidad competitiva que dentro de unos años puede volverse más habitual, llegando incluso a considerar los videojuegos como un deporte con el que poder ganarse la vida.