Sly Cooper: Thieves in Time

Sly Cooper: Thieves in time es uno de los juegos interesantes e importantes que Sony ha mostrado durante la Gamescom de Colonia. No en vano se trata del retorno de una de las franquicias a la que tanto cariño se le cogió durante la pasada generación. El trabajo que está realizando la compañía desarrolladora Sanzaru Games espera superar las expectativas que se están generando alrededor de un proyecto que va creciendo a pasos agigantados. Tanto por lo visto como también por lo prometido de parte de sus creadores.

Si en algo se puede decir que Sly mejora claramente respecto a las anteriores entregas en las posibilidades técnicas con las que cuenta por el hecho de correr en Playstation 3. Esto es un factor determinante que han aprovechado los desarrolladores para intentar potenciar mucho más las mecánicas que triunfaron en un pasado reciente. Significa ofrecer, también, un apartado visual que vaya acorde con lo que se quiere llevar a cabo jugablemente, por lo que técnicamente Thieves in Time va a más. No solo por mantener los 60 fps como seña de la saga, algo que también se equipara al Sly Collection, sino también por el acabado general a nivel artístico.

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Lo que hemos podido ver durante la Gamescom es un estilo cel-shading bien trabajado, fluido en movimiento y con efectos más que interesantes que acompañan a los personajes y escenarios. Uno de ellos es la iluminación, que le da un salto cualitativo al estilo gráfico elegido y que demuestra que se están esmerando en ofrecer algo realmente de dibujos animados ahora que la consola para la que sale esta entrega puede ofrecer mucho más que en el pasado. Los mundos vistos en las demos dejaban todo tipo de detalles gráficos y una fluidez digna de mención. Pero la propuesta quiere ir más allá. Más lugares para explorar, más libertad.

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La premisa de esta nueva aventura es sencilla, con nuestro mapache sigiloso cogiendo una máquina del tiempo para viajar al pasado y recuperar el legado de su familia. En frente, un curioso enemigo que intentará impedir nuestros pasos. Se trata del jefe, al que veremos en más de una ocasión tal y como pudimos comprobar durante las demostraciones que se vieron del juego en la Gamescom. La primera de ellas nos ubicaba en Japón, con sus clásicas montañas y árboles ambientando este espacio. El objetivo principal, pasar desapercibidos entre los enemigos usando distintos disfraces para la ocasión. Como es el traje de samurai que confunde a los enemigos pensando que somos uno de ellos.

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Los disfraces serán una de las bases del juego, tanto para la trama principal como para las misiones secundarias que vayamos encontrando a nuestro paso. Con este nuevo traje en la zona de Japón, por ejemplo, teníamos mucha más protección  ante según qué ataques del jefe, pero a cambio nuestra agilidad a la hora de movernos y saltar por los escenarios estaba totalmente ausente debido al peso de dicho disfraz. También se comprobó que personajes viejos como Murray, hipopótamo rosa clásico de la saga, se podrán controlar en según qué fases y momentos.

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De hecho, colaborar entre los distintos personajes que tiene este Thieves in Time será primordial para poder seguir adelante. No se trata solo de decidir acabar una fase con Sly y ya está, sino que tendremos que tener conocimiento de las posibilidades de otros de nuestros compañeros, al mapache y a Murray se le añadirán otros protagonistas, para poder entre todos superar los obstáculos que el malvado tigre intenta ponernos a cada paso que damos. Nos podemos olvidar, según la compañía desarrolladora, de tener un multijugador que pudiera potenciar más estas colaboraciones. No está contemplado al menos de momento.

Durante la demostración que se mostró a los asistentes a la feria de Colonia se pudo ver distintas secciones más, como una zona de plataformas móviles con todo tipo de cajas y barriles que estaban colocadas en un río. Las habilidades con las que contaremos en esta nueva entrega nos permitieron seguir adelante, ya que teníamos una especialidad que permitía ralentizar el tiempo, algo que facilitaba cruzar esta zona de plataformas respecto a si todo fluía y se movía de manera normal y corriente. Sly está guiado en todo momento por una serie de indicaciones para no perderse, además de que las partes interactivas del escenario resaltan más que las otras.

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Por último también se pudo comprobar la importancia de los jefes finales, entre ellos el Tigre malhumorado del que hemos hablado anteriormente. En esta ocasión, se encuentra en unas plataformas de madera desde las que nos disparaba todo tipo de bolas de fuego y prendía partes del escenario. La mecánica para acabar con él era clara: intentar llegar hasta la plataforma en la que se encontraba, saltando de un lado a otro hasta poder golpearlo. En ese momento el Tigre saltaba a otro lugar y debíamos repetir la secuencia, moviéndonos por el escenario esquivando sus ataques hasta poder dar con él.

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La dificultad en este caso fue in crescendo, ya que los círculos de fuego con los que atacaba se expandían más que en el primer encontronazo, algo a lo que se sumaba también a un lanza rayos que debíamos esquivar para poder continuar. Una vez llegábamos de nuevo a dar con él, una pequeña secuencia en la que rompía una columna nos complicaba más nuestro avance. Hasta aquí se pudo ver lo que tiene dentro de sí Sly: Thieves in Time, lo nuevo de Sanzaru Games para Playstation 3. Antes se pudo ver también como desde el menú principal se tenía acceso a la colección de objetos, vestimentas y todo tipo de elementos que vamos recogiendo durante la aventura.

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