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Section 8: Prejudice, Impresiones

Probamos Section 8: Prejudice, nuevo juego de acción de TimeGate Studios que se presenta como un título con un fuerte apartado multijugador. Un argumento de ciencia ficción y una experiencia jugable dinámica para compartir con usuarios de todo el mundo.

En MeriStation hemos tenido la oportunidad de probar una primera versión de Section 8: Prejudice, nuevo título de acción de TimeGate Studios y sucesor directo de Section 8. Hace unas semanas os ofrecíamos un avance con las características del juego, y hoy ampliamos el contenido con nuestras primeras impresiones tras haber podido entrar de lleno en la lucha por la supervivencia de la humanidad.

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A falta de unas semanas para la publicación oficial del título, nos hemos encontrado con una versión muy avanzada del producto, que nos ha permitido probar algunos de los modos de juego que se incluirán en la versión final. Por supuesto, algunas de las opciones todavía se encuentran bloqueadas, pero a juzgar por lo que hemos podido experimentar, el juego se encuentra casi listo para ser distribuido. Section 8: Prejudice continúa con la historia de su predecesor, un argumento habitual en la ciencia ficción pero con los suficientes detalles como para apreciar sus enormes posibilidades a la hora de narrar una historia.

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El primero de los modos disponibles es el de campaña. Por supuesto, no hemos podido avanzar lo suficiente como para evaluar la duración de la misma pero, como avanzábamos hace casi dos meses, todo apunta a que se ha trabajado en aprovechar las posibilidades de la historia de la Sección 8 y su lucha contra El Brazo de Orión. En este modo volvemos a tomar el control de Alex Corde, ahora capitán del destacamento al que pertenecía en el primer título, y las primeras fases nos servirán como introducción y tutorial. De esta manera, nos familiarizaremos con los controles del juego en su versión para PC.

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El manejo es bastante intuitivo, sobre todo para los acostumbrados al género. La cámara, siempre en primera persona, se controla con el ratón mientras que la combinación W, A, S, D será la encargada de gestionar la dirección del movimiento de Corde. La tecla E se usa para realizar acciones sobre elementos del mapa, y la F para usar los objetos del inventario que pueden alternarse con Q. Botón izquierdo para disparar y derecho para entrar en el modo de puntería, que se reduce a poner mayor atención sobre nuestro objetivo a menos que estemos portando un arma con mirilla o visor de puntería.

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La barra espaciadora servirá para saltar o usar el ‘jet-pack', mientras que ‘shift' se usa para iniciar el movimiento en carrera. Como todos los soldados del 8º cuerpo de infantería, portamos armaduras especiales de combate que nos permiten alcanzar una gran potencia de movimiento en cuanto cogemos algo de carrerilla. En ese momento se activa el ‘Overdrive' y si pulsamos E empezaremos a movernos a toda velocidad en cámara en 3ª persona. Esta misma tecla, E, también se usa para montarnos en vehículos o colocarnos en la posición adecuada para aterrizar cuando saltamos desde un transporte aéreo.

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Aparece un modo especial de puntería que nos servirá para fijar blancos en movimiento, muy útil contra enemigos que no paran quietos. Este modo necesita de un reposo, que depende de las características de nuestra armadura como veremos más adelante, y se activa con la tecla Control. La verdad es que la elección del mapeado de teclas es bastante cómoda, y aunque al principio no recordemos la utilidad de cada una, irán apareciendo indicadores en pantalla para ayudarnos a identificar el momento en el que tenemos que utilizar algunas de las combinaciones citadas.
Todo lo que hemos explicado se aplica tanto al modo para un jugador como a las partidas online, pero en estas últimas también existe la posibilidad de construir elementos que nos ayuden en el mapa, como zonas de suministros, torretas de defensa… Para ello hay que gastar puntos obtenidos mediante muertes y logros, siendo esta opción accesible mediante la tecla B, y gracias a un indicador visual del espacio que ocupará el elemento junto con un código de color (blanco si no tenemos recursos suficientes, verde si es posible o rojo si somos incapaces de construirlo) tendremos perfecto conocimiento de las posibilidades existentes.

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En la primera misión somos sorprendidos por un intento de huida de algunos prisioneros de guerra que hemos hecho durante la campaña contra El Brazo de Orión, quienes se apresuran en cortar cualquier vía o vehículo que nos pueda servir para perseguirlos. Por supuesto, nuestra valentía y buen hacer nos va a permitir salvar un transporte para lanzarnos en su captura, lo que nos lleva a una zona diferente en la que tendremos que ir detrás de los prisioneros fugados, encontrándonos con distintos reductos enemigos que es necesario superar para continuar.

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Tanto en la campaña como en el modo online podremos configurar nuestra armadura. Existen distintos tipos en función de su resistencia y movilidad, orientadas a variantes para el concepto de personaje: soldado, artillero, asesino, ingeniero… Además, podremos distribuir ciertos puntos libres entre diferentes aspectos de la armadura, como la capacidad de regeneración del escudo protector, estabilizadores para la puntería, potencia del ‘Overdrive',… Cada tipo de armadura varía también en las características que pueden ser escogidas a la hora de repartir estos puntos. Y la configuración puede cambiarse en cualquier momento.

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También poseemos distintos tipos de armas y accesorios. Tanto rifles como aautomáticas, pistolas, cañones o lanzamisiles, en los que se nos permite elegir entre varios tipos de munición para obtener distintos efectos a la hora de impactar. Por otro lado, existe variedad de accesorios, como cuchillos para realizar ataques en corto, herramientas de reparación o granadas. En cada momento podemos escoger dos armas y dos accesorios, y los conceptos predeterminados de personaje también vienen equipados con una configuración de armamento por defecto.

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Pasamos ahora al modo multijugador, que en la versión que hemos probado nos ofrecía dos posibilidades: Conquista y ‘Swarm'. Por supuesto, estos no son los únicos modos de juego que se encontrarán en la versión final, aunque forman un ejemplo perfecto del estilo ‘online' que podremos experimentar en Section 8: Prejudice. Los dos tipos de partida también están disponible ‘offline' por si queremos practicar antes de unirnos a un encuentro en el que participen otros jugadores, y todos los demás personajes serán manejados por ‘bots' controlados mediante la IA del título.

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Un aspecto importante del multijugador es que iremos recogiendo puntos mediante ciertos eventos. Por ejemplo, matar un enemigo cualquiera nos recompensará con 5 puntos adicionales, mientras que si dicho oponente fue el último en batirnos ganaremos 7 puntos por vengarnos. La destrucción de torretas o conquista de ubicaciones importantes también aumentará nuestro contador. Dichas ganancias pueden invertirse en la compra de elementos para el mapa, que veremos más adelante, y también para la clasificación de los usuarios a la hora de evaluar las acciones de cada uno.
El primer modo, Conquista, es bastante habitual. Consiste en controlar distintas ubicaciones de interés que dependen del mapa escogido para la partida (había dos disponibles en esta versión de prueba) La cantidad de zonas estratégicas y su ubicación cambian en función del mapa, y pueden contener elementos importantes como zonas de suministros, sensores y radar o artillería y torres de defensa. Quién controle la ubicación también pasará a ser dueño de los elementos dentro del área de influencia, lo que no quita que se puedan seguir construyendo nuevos elementos en otras zonas del mapa, o en las mismas.

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Para controlar una zona de interés es necesario ‘hackear' un terminal informático que se encuentra en el centro mismo de esta área de influencia. Una vez realizada esa acción, será necesario pasar un tiempo cerca del terminal para finalizar el dominio de la ubicación. Si durante ese tiempo el enemigo consigue matarnos, tendremos que volver a realizar todos los pasos. En la partida se enfrentarán dos equipos, rojo y azul, y cada uno irá obteniendo puntuación en función de las muertes de oponentes y ubicaciones controladas. Ganará el primero que controle todo el mapa o que llegue a cierta cantidad de puntos.

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El modo ‘Swarm' comparte muchos aspectos con Conquista, con una única ubicación de importancia. Sin embargo, en este modo uno de los equipos controla el área y tiene que mantener este estado a pesar de las acometidas constantes de enemigos que provienen del otro equipo. Este es el estilo de juego que más se presta a que varios jugadores se enfrenten contra la IA de Section 8: Prejudice, combinando esfuerzos para proteger los puntos débiles de la zona controlada e intentando que las distintas oleadas de enemigos no superen la línea de defensa, lo que significaría que perdemos la partida.

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En ambas modalidades contábamos con una cantidad infinita de ‘respawns'. Una vez caídos en combate, se nos presenta una pantalla con el mapa y la situación de las zonas controladas por cada equipo, así como ciertas configuraciones predeterminadas para nuestro soldado. Tras elegir un punto del mapa, y no todos están permitidos según quién los controle, nuestro personaje será lanzado desde un transporte aéreo, lo que nos obliga a usar el modo de aterrizaje. En este punto tendremos que intentar frenar llegados a cierta altura, de forma similar a desplegar un paracaídas, y cada uno puede apurar lo que el miedo a sufrir daños le permita.

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Las partidas online se presentan especialmente dinámicas y fluidas, y los jugadores veteranos encontrarán suficientes formas de llevar a cabo tácticas avanzadas de grupo para superar al enemigo. El hecho de poder usar una configuración predeterminada, o crear las nuestras, será tomado en cuenta para crear escuadrones que puedan complementarse. En este sentido, la verdad es que Section 8: Prejudice puede ofrecer muchísimas posibilidades a los amantes tanto de la acción desenfrenada como de la acción más táctica. Claro que, en un servidor libre, siempre es posible encontrarse con algún rebelde.

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El nivel gráfico de la versión que hemos probado es espectacular. Los escenarios se presentan con gran detalle así como los personajes, con fluidez y variedad en las animaciones. Generalmente vestiremos armadura completa, pero si tenemos la oportunidad de ver el rostro de un personaje, sobre todo en el modo campaña, podremos apreciar el gran trabajo que se ha realizado con los rasgos faciales. El sonido acompaña a la perfección, y las voces están en perfecto castellano aunque los textos de la versión de prueba continuaban en inglés. Desde luego, se presiente un gran acierto con la localización.

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Así que, a falta de una versión completa a la que echar el guante, las sensaciones que se desprenden del trabajo hasta la fecha no podrían ser mejores. Queda por asegurarse de la correcta duración y argumento de la campaña, cantidad de mapas en multijugador y rendimiento de los servidores cuando coincidan muchos usuarios... pero en términos de jugabilidad parece que Section 8: Prejudice ha sabido repetir fórmula y mantenerse en el buen camino. Desde luego, una buena oferta para este 2011.

Section 8: Prejudice

  • PS3
  • PC
  • 360
  • Acción
Continuación de Section 8, el FPS desarrollado por TimeGate Studios:
Carátula de Section 8: Prejudice
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