La mágica Midgård

Y es que el gran atractivo de este nuevo título, desarrollado por el joven estudio sueco Arrowhead Games Studios, es el buen equilibrio entre la sátira y la acción, dando como resultado una aventura de lo más atractiva. Puede que su planteamiento sea demasiado parecido a una saga tan consolidada como Diablo o incluso su jugabilidad y su sentido del humor muestre grandes similitudes con el reciente DeathSpank. Nada más lejos de la realidad; Magicka se destapa como una gran alternativa a dichos títulos, dejando de lado casi por completo las propiedades de RPG y centrándose en la acción y el multijugador. Veamos más de cerca esta odisea de hechiceros y criaturas oscuras, ambientada en un mundo mágico basado en la mitología nórdica.

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El argumento es sencillo; durante la era antigua, los magos más poderosos consiguieron dominar la magia, descifrar sus secretos y canalizar su fuerza. De esta manera, pudieron combinar los elementos para crear hechizos de un poder extraordinario. Gracias a dichos poderes, el mundo de Midgård disfrutó de una época de paz y tranquilidad, lo que propició la creación de la Orden de la Magia. A pesar de todo, y con el paso de los siglos, toda esta sabiduría fue cayendo en el olvido, en parte gracias a unos descendientes algo majaderos. Pero un día, apareció un mago muy poderoso llamado Grimnír, y las cosas cambiaron por completo.

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Así, dicho hechicero mostró el interés por devolver la gloria a la Orden de la Magia; pero sus intenciones no fueron bien vistas por el resto de magos, quienes veían en Grimnír una amenaza potencial, que podría llevar al mundo a una época de oscuridad. De esta manera, el mago fue condenado y encarcelado. Poco más se supo del poderoso hechicero... Algunos dicen que sigue con sus planes oscuros; otros, en cambio, aseguran que ahora trabaja como un humilde granjero. Sea como fuere, el mundo de Midgård está pereciendo bajo las sombras, con temibles criaturas acechando a sus gentes. Es ahora cuando debemos actuar para devolver la paz a nuestras tierras tomando el rol de los magos de la Orden; eso si podemos sacarlos de sus vidas lujuriosas y voluptuosas en el interior de su castillo.

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El argumento del título no muestra una gran complejidad, pero si atesora el sentido del humor presente a lo largo de toda la aventura y las dosis justas de misterio y suspense. Así, deberemos salvar las tierras de Midgård de su destrucción con la colaboración de hasta tres amigos más; el multijugador se muestra como la opción más interesante para afrontar los trece niveles que contiene Magicka, que nos durarán cerca de ocho horas. Quizás no estemos ante un título excesivamente largo, pero viviremos al máximo el tiempo que pasemos lanzando hechizos. La curva de dificultad está muy bien ajustada e incluso podremos rejugar niveles para encontrar nuevos caminos escondidos. Además del modo historia, podremos disfrutar de los modos desafío y versus, todos ellos para ser disfrutados en solitario o en compañía de nuestros amigos.

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El modo desafío nos propone combatir oleadas de enemigos en diferentes mapas y gracias al modo versus podremos medir nuestras fuerzas frente a otros magos controlados por nuestros amigos. Sin duda, los chicos de Arrowhead Games Studios se han tomado muchas molestias para ofrecernos unos modos de juego online a la altura, pues Magicka cuenta con la particularidad del 'fuego amigo', es decir, si atacamos por error a uno o varios de nuestros compañeros, les causaremos los mismos daños que a nuestros enemigos. Así, deberemos ser precisos con nuestros hechizos y no causar estragos entre los nuestros; eso sí, las carcajadas y los 'piques' entre los jugadores más competitivos están más que asegurados.

No podemos negar el atractivo de dicho sistema multijugador, pero debemos criticar un interface online algo descuidado, pues no resulta sencillo encontrar determinadas salas de juego o comunicarnos con otros jugadores. Pero si dejamos de lado este pequeño bache, nos encontraremos con una jugabilidad absorbente y desafiante, uno de los grandes aciertos del título; veamos más de cerca la propuesta jugable de una aventura de acción con tanta personalidad como Magicka. Así, diez serán los elementos que deberemos aprender a controlar para salir airosos de los continuos combates contra criaturas de todo tipo: agua, hielo, fuego, rayo, tierra, frío, vapor, vida, escudo y los poderes arcanos; además, podremos combinarlos entre ellos para aumentar su poder destructivo o descubrir nuevos efectos.

Realmente, Magicka se destapa como un título muy sencillo, pero con grandes posibilidades; su aspecto gráfico quizás no enamora a primera vista, pero esconde muchas sorpresas que a priori podrían pasar desapercibidas. Los jugadores que no conozcan de primera mano el título que nos ocupa, podrían pensar en una aventura más de acción y rol. A diferencia de otros, Magicka no presenta ni subidas de nivel ni misiones entre las que escoger; simplemente, deberemos aprender a usar nuestros poderes para avanzar a través de los niveles sin perecer en el intento. Y, sinceramente, resulta muy divertido. Para ello, tendremos a nuestra disposición ocho teclas de nuestro teclado para cada uno de los hechizos.

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Así, podremos acceder a nuestros hechizos pulsando las teclas comprendidas entre la Q y la R y entre la A y la F; además, mediante combinaciones de dichas teclas, podremos crear hechizos más poderosos. Por ejemplo, si lo que queremos utilizar un hechizo de fuego altamente destructivo, tendremos que pulsar primero la tecla F -fuego- y después la tecla D -tierra-, seguido de un click de nuestro ratón en el objetivo deseado. Tal como se ha dicho antes, la jugabilidad es sencilla y directa, aunque a medida que avancemos en la aventura, se volverá más compleja y desafiante. Será nuestra labor saber utilizar todas las combinaciones posibles para derrotar al amplio número de criaturas distintas, con una gran variedad de puntos débiles.

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Todas estas combinaciones de botones se irán almacenando en nuestro libro mágico para poder ser consultadas en cualquier momento; a medida que nos familiaricemos con la jugabilidad de Magicka, podremos provocar grandes efectos mágicos tan devastadores como divertidos. No tardaremos en provocar terremotos, recurrir a grandes diluvios, usar poderosos escudos vitales o aumentar nuestras aptitudes físicas, entre muchos otros efectos. Además, contaremos con tres tipos de power-ups para nuestros magos: armas, objetos mágicos y hechizos. Nuestros poderes mágicos serán constantes a lo largo del juego y aunque nos eliminen, no los perderemos; en cambio, si perecemos a manos de un enemigo o compañero -ya sea por un accidente o por una una traición- tanto las armas como los objetos mágicos caerán al suelo.

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Así, contaremos con una serie de armas de corto alcance, que serán de gran utilidad en las distancias cortas, cuando nuestros hechizos no alcancen a todos los enemigos en pantalla. Y es que en algunos momentos, la acción será muy estresante, gracias a la gran cantidad de criaturas que nos atacarán en grupo. Con los objetos mágicos tendremos la posibilidad de provocar efectos persistentes y habilidades momentáneas; además, en las partidas multijugador podremos hacer uso de los hechizos de salud, los cuales nos permitirán revivir a nuestros compañeros caídos. A lo largo de la aventura, tendremos que afrontar una buena cantidad de puzzles, ciertamente, algunos más complejos y trabajados que otros. Los objetos con los que podremos interactuar adquirirán un brillo especial cuando uno de los magos se acerque a él, facilitando las cosas en un título de acción constante.

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Deberemos ser cautos al usar nuestras habilidades mágicas; así, si estamos cruzando un río, será mejor obviar nuestros hechizos eléctricos si no queremos terminar electrocutados. En cambio, podremos derretir un río congelado para ahogar a los enemigos que quieran cruzar sobre el hielo, congelarlos para después hacerlos añicos de una pedrada o empujarlos hacia un precipicio con un torrente de agua. Debemos insistir en sus grandes posibilidades; y es que aunque repitamos la aventura una y otra vez, nunca dejaremos de descubrir nuevas combinaciones mágicas. Aunque por desgracia no todo es positivo en Magicka; el título arrastra algunos problemas técnicos que lastran el disfrute total de una aventura que podría dar mucho, mucho más.

Además de las dificultades técnicas antes mencionadas sobre el interface online -algo difícil de comprender dada la vertiente multijugador tan marcada de Magicka-, el título de Arrowhead Games Studios no se salva de bugs y fallos gráficos algo preocupantes. Asimismo, la optimización del título no está del todo bien conseguida; por lo que ofrece a nivel gráfico, el título exige unas especificaciones algo altas. Aunque cabe decir que ya está disponible un parche que arregla, en la medida de lo posible, algunos de estos fallos. El apartado gráfico pasa sin pena ni gloria, aunque no sería un aspecto determinante; Magicka se acerca más a un título indie que a una superproducción, y se centra en la jugabilidad y la diversión más que en la excelencia técnica.

Eso sí, disfrutaremos de vistosos efectos de luz, gracias a la gran cantidad de hechizos y poderes mágicos. La vista isométrica -típica del género- nos permitirá ver con claridad a nuestros enemigos y será del agrado de los seguidores del género. El apartado sonoro es correcto, sin más. Lo efectos de sonido resultan simpáticos, en la línea del propio juego, aunque ni desentonan ni se hacen pesados; a destacar las graciosas voces de los personajes, que hablan un inglés muy curioso, por decirlo de alguna manera. La banda sonora contiene temas épicos que casan muy bien con la aventura. La innovación sí es un punto clave en el título sueco, pues son pocas las ocasiones que un nuevo videojuego sorprende de esta manera.

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Magicka se destapa como una opción muy a tener en cuenta dentro de un género con grandes obras maestras. No en vano, ofrece cualidades muy interesantes en un catálogo de títulos plagado de shooters y sucedáneos; siempre se agradece la llegada de un título 'mágico', que nos ofrezca algo más y que haga de la diversión su faceta más importante. A pesar de contar con voces en inglés, los textos sí están en castellano; además, el título llega a un precio recomendado de diez euros, toda una ganga. Lo que aleja a Magicka de ser un excelente videojuego son los problemas técnicos que no permiten disfrutar completamente de una aventura tan recomendable como divertida; eso sí, los seguidores del género no deberán perderse a estos simpáticos magos.

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