Majin and The Forsaken Kingdom, Impresiones
Namco Bandai y Game Republic nos invitan a vivir un bello e interesante cuento de fantasía. Un héroe y una criatura fantástica unirán sus fuerzas para luchar contra las fuerzas de la oscuridad que han dominado durante un siglo un antiguo reino. Un original juego que destila diversión y ofrece un bello acabado técnico.
La propuesta en la que están trabajando Namco Bandai y Game Republic nos invita a dejarnos llevar por un cuento de hadas en el que no faltarán elementos fantásticos que componen lo que, en general, es una bella aventura. Majin and the Forsaken Kingdom es la nueva creación de un estudio de desarrollo, Game Republic, que ya nos dejó un buen sabor de boca con Genji, Dragon Ball Origins o Folklore, y que ahora da un paso adelante para ofrecernos la que promete ser su creación más completa y atractiva de sus siete años de historia. Desde luego, no se pueden quejan del apoyo que ha prestado Namco Bandai al proyecto, una compañía que como productora ha financiado creaciones de gran nivel como pueden ser el reciente Enslaved.
No solo eso, sino que a la batuta de esta producción se encuentra un nombre bien conocido en la industria, Yoshiki Okamoto, líder del estudio Game Republic (y por tanto responsable de los títulos anteriormente mencionados) que anteriormente había trabajado con Capcom, involucrándose en proyectos como Resident Evil, Final Fight o Street Fighter II. Es cuanto menos curioso el hecho de que, a día de hoy, para presentar un título completamente original, haya que repasar su ADN y ver lo que sus creadores pueden llegar a dar de sí; y es una pena, porque tras haber disfrutado de una versión previa del juego, Majin and the Forsaken Kingdom es un título que se basta por sí solo para asombrar, satisfacer y hacerse un hueco en nuestras agendas.
Toda la civilización y sus habitantes desaparecieron de la noche a la mañana, y los pocos supervivientes de la devastación huyeron al desierto para poder comenzar una nueva vida lejos de la amenaza de la oscuridad. No faltaron los valerosos rebeldes que formaron grupos para intentar recuperar su hogar, pero la propia oscuridad contaba con su ejército de sombras inmortal; muy pocos sobrevivieron para contarlo. Ha pasado más de un siglo desde estos desgraciados acontecimientos, y la figura de un gran héroe vuelve a resurgir Un hombre que posee la peculiar habilidad de hablar con los animales, y gracias a su ayuda descubre la existencia de una criatura mitológica que podrá ayudarle a liberar el reino gracias a su gran poder: el Majin.
Así pues, aunque al principio de la aventura comenzaremos solo con el joven héroe, no tardaremos en encontrarnos con el famoso monstruo, que resulta ser una criatura afable y bienintencionada que está cautiva por la oscuridad. Lograremos liberarlo y no dudará en unirse a nuestra causa; pero no solo eso, sino que los inmortales seres de la oscuridad ahora ya no serán tales, gracias a que la propia cadena que tenía cautivo al Majin, al estar bañada en su poder, se convertirá en nuestra nueva arma y gracias a ella podremos enfrentarnos a todas las amenazas enemigas que salgan a nuestro pasó. Tendremos dos héroes que cooperarán por el bien común, pero su relación será muy distinta que la que mantenían, por ejemplo, Trip y Monkey en Enslaved, pese a compartir ciertas similitudes.
También podremos aprovechar el sigilo para acercarnos por la espalda a las criaturas y realizar muertes silenciosas. Pero lo fundamental es que no podremos irnos en solitario a la aventura, ya que lo importante es tener en cuenta al ogro Majin, el cual es muy necesario para poder avanzar. La criatura nos seguirá fielmente, y si nos quedamos quietos a su lado nos curará las heridas; también nosotros tendremos que recoger frutos para alimentarla y que pueda utilizar sus poderes. Lo más interesante de esta relación, desde el punto de vista jugable, es que podremos darle órdenes al Majin, de diversa índole, tanto pedirle que ataque a algún enemigo como mandarle abrir una puerta pesada para que podamos avanzar, o incluso pegar un grito para aturdir a los enemigos.
Más allá de estas pequeñas pinceladas jugables, el título gana en profundidad cuando las cosas se van complicando y debemos aprender a utilizar y combinar con acierto las habilidades de los dos personajes. Por ejemplo, podemos pedir al Majin que se agache para subirnos a él y subir a posiciones más elevadas, o incluso pedirle que tire abajo muros y rocas para aplastar a criaturas que puedan estar debajo de los mismos. De igual modo, para poder avanzar el Majin necesitará en ocasiones que le desbloqueemos puertas o activemos mecanismos; no es raro usar al Majin como distracción luchando contra las criaturas de la oscuridad mientras nosotros recorremos secciones de plataformas y solventamos el puzle que nos permitirá seguir avanzando.
Como es lógico, tanto el Majin como el héroe protagonista tendrán su propia vitalidad y deberemos tener cuidado de que ninguno de los dos personajes fallezca. Por ejemplo, nuestra vida es escasa, pero seremos ágiles y podremos defendernos; en cambio, el Majin pese a su gran vida es lento y recibe muchos impactos mientras ataca, por lo que su barra puede bajar más rápido de lo deseable. Todo ello con un estilo artístico que se muestra fiel al espíritu de cuento que se proclama desde el principio, rozando en ocasiones el estilo anime (sobre todo en el protagonista principal). A destacar también el gran trabajo de doblaje con el que cuenta la producción, con voces muy conocidas que hacen un gran trabajo a la hora de dar vida a los protagonistas, que no dejan de comentar las diferentes situaciones a las que se enfrentan.
Majin and The Forsaken Kingdom
- Aventura
- Acción