Los juegos sociales suman un 19% de los ingresos del sector online

En la actualidad, los videojuegos se han integrado de una forma impensable años atrás en la sociedad. Y, por tanto, ello ha contribuido a que una parte de la población ajena al sector del entretenimiento 3D esté optando cada vez más por este, a través de títulos diseñados en específico para ellos. Así, juegos como Farmville o Zuma, han contribuido a que el sector de los juegos sociales haya crecido un 200% respecto a 2009, constituyendo ya un 19% del total de los ingresos del sector online.

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Estos son los datos arrojados por el estudio 'Online Gaming Segmentation & Companies Mapping' de GamesCrunch y Hi-media Payments, llevado a cabo sobre el sector de los juegos online, cuya previsión de ingresos para este año se estima en más de 8.200 millones de dólares (lo que supone un crecimiento del 32% respecto a los datos registrados por este mismo sector en 2009).

Las claves tras el rápido crecimiento del sector de los juegos sociales son atribuidas, según el estudio, a su viralidad (juegos sencillos, de alta capacidad adictiva, que se extienden a través de las redes sociales como Facebook a la misma velocidad que lo haría un virus informático) y a la incorporación de herramientas que permiten crear comunidades a su alrededor. Cada vez son más los juegos online gratuitos que ofrecen a los usuarios diversas opciones que pueden ser adquiridas a través de plataformas de micropagos (las cuales, según algunas predicciones, están llamadas a convertirse en el futuro del sector del videojuego).

Como muestra del potencial de este mercado, los últimos movimientos realizados por grandes empresas de la industria de los videojuegos y el entretenimiento, como Electronic Arts con su reciente compra de PlayFish (número 2 de la plataforma Social Gaming), Warner Bros. Home Entertainment, que recientemente se ha convertido en propietaria de Turbine (agencia de juegos online) y Bigpoint, que acaba de adquirir eLOFD (estudio germano autor de títulos como XBlaster o Hellblades), dan buena cuenta de ello.