Green Day: Rock Band
- Plataforma3607.5PS37.5
- GéneroSimulación
- DesarrolladorHarmonix
- Lanzamiento11/06/2010
- EditorElectronic Arts
American Idiot
Tras el éxito cosechado con The Beatles y con Rock Band 3 en camino, Harmonix lanza al mercado otra compilación de canciones basadas en un grupo de Rock, siendo Green Day el elegido para seguir la estela de los anteriores pesos pesados que se han dado cita en nuestras consolas. La banda de California se ajusta como anillo al dedo a las prestaciones de un juego musical que pierde la magia de su antecesor en pos de ofrecer un estilo más duro, difícil de imitar, con el que el aficionado recorre parte de su carrera en forma de discos completos, con todo lo que ello conlleva.
Los tiempos cambian y con ellos las tendencias de los usuarios. Hace dos décadas se puso de moda el simulador musical, visto como una nueva tendencia dentro de la industria. El boom se produjo principalmente en Japón, dejando a Occidente sin la mayor parte de los Beatmania, Guitar Freaks y compañía que tanta calidad atesoraron en su día. Hoy, se podría decir que han muerto con más pena que gloria ante la actitud de Konami, empeñada en lanzar al mercado una y otra vez el mismo producto cambiando ligeramente el pack de canciones. La mentalidad de los aficionados obliga a buscar nuevas vías para el éxito. Activision y EA Games se dieron cuenta de ello a poco de comenzar con su peculiar andadura musical por estos lares, con Guitar Hero y Rock Band a la cabeza de la oferta.
Mientras que Guitar Hero ha visto cómo sus ventas se reducían de forma alarmante en el último trimestre, Rock Band ha sabido mantenerse al filo del cuchillo con innovaciones que han tenido lugar en todos los ámbitos de su recorrido. The Beatles: Rock Band sigue siendo hoy por hoy el mejor juego musical que existe en el mercado, tanto por la selección de canciones como por el grupo al que se representa. En uno de estos títulos no basta con montar un buen escenario y comprar los mejores instrumentos: hay que seleccionar una lista de canciones con la que se conquiste al jugador, algo que se conseguía en los primeros títulos pero que ido en declive con opciones poco afortunadas (LEGO Rock Band es un buen ejemplo de ello).
Lo curioso es que la crítica a The Beatles, más allá de su espectacular puesta en escena o de ser el primero (muy por encima de GH: Metallica, algo que comparte este título en cuanto a presentación) en rendir verdadero homenaje a una banda musical a través de su historia, es que cierto núcleo de aficionados le endosó duras críticas por no contar con el estilo musical que se asocia con estas franquicias. Daba exactamente igual que a lo largo de los discos y conciertos se explorasen nuevas vías de crear música, que el ritmo hiciese posible una forma única de tocar la batería o la necesidad de combinar tres voces con todo lo que ello conlleva. El caso es que el público siempre tiene la razón. La adaptación de The Beatles pasará a la historia por ser, como decimos, el mejor ejemplo de cómo rendir tributo a una gran banda de rock, pero no se convirtió en el éxito que todo el mundo esperaba que fuese.
La elección no podía ser otra que Green Day. Con numerosos premios a sus espaldas, más de 60 millones de discos vendidos a lo largo de más de diez años de trayectoria, el grupo formado en California rompe estilos gracias a su punk revival que ha evolucionado notoriamente desde sus comienzos hasta la actualidad. Compuesto por tres miembros (Billy Joe Armstrong a las vocales y guitarra, Mike Dirnt como bajista y Tré Cool en la batería), tuvo un arranque fulminante para luego diluirse entre la amalgama de la competencia, volviendo de entre los muertos poco tiempo más tarde con el éxito mundial que supuso American Idiot. Luego llegaría 21st Century Breakdown, lo que les llevaría a volver a sentarse en el trono del rock estatal. Antes, Kerplunk, Dookie o Insomniac habían sido sus credenciales sobre el escenario.
Tres de estos discos ocupan el título que ha aparecido finalmente en el mercado: Dookie, American Idiot y 21st Century Breakdown, así como una pequeña selección de las canciones más representativas de Warning, Insomniac o Nimrod. Veamos qué ofrece esta nueva inclusión en la lista musical de Rock Band.
Green Day: Rock Band es, en esencia, una recuperación de la base de The Beatles que opera con las melodías más populares del grupo californiano. Esto implica que a nivel estético los cambios son nulos, empleando el mismo motor gráfico, recreando la actitud de los tres cantantes en tres escenarios distintos, elegidos por ellos mismos, como representación de los lugares más emblemáticos en los que han tenido ocasión de tocar en vivo. De esta forma se cierran las puertas a una progresión visual que llame poderosamente la atención, aunque no por ello deja de resultar vistoso el diseño con el que se ha caracterizado a los miembros, al igual que su comportamiento. Cuando empezamos la partida por primera vez tenemos ocasión de ver un pequeño vídeo de introducción del estilo de 21st Century Breakdown, que sirve como pistoletazo de salida para comenzar a disfrutar del juego, algo que se extiende a medida que vamos completando el modo Carrera.
Decimos que la base es la misma que la empleada en The Beatles porque a medida que avanzamos se desbloquea material adicional (vídeos, entrevistas, fotos ) que Warner Music Group se ha sacado del armario como regalo para los aficionados que deseen conocer más sobre su banda favorita. La mecánica es idéntica al de otros títulos formados por bandas en este sentido: tocamos varias canciones de un disco en concreto a medida que avanzamos por el modo carrera desbloqueando retos (sacar determinada puntuación en tres temas, obtener un número de estrellas ), logros (también presentes en la edición de Wii de forma virtual) y poco más. Uno de los problemas de este RB:GD es que su lista de canciones abarca 47 melodías que fácilmente se terminan en una tarde.
En nuestra experiencia, cinco horas fueron suficientes para echar un vistazo al vídeo final con el que se encomienda al público a no perder de vista la evolución del grupo. La parte estética del título es a todas luces notable, con un esfuerzo encomiable a la hora de recrear las tres localizaciones en las que tocamos a lo largo de nuestra gira particular: The Warehouse, el más significativo de la primera época y donde el grupo empezó a tocar (representativo de Dookie), Milton Keynes, Inglaterra (donde fue grabado Bullet in a Bible) y finalmente el Fox Theater que se ha convertido en el lugar de mayor importancia en la gira reciente del grupo mientras se presentaba 21st Century Break. El escenario cambia según el disco, así como la apariencia de los miembros del grupo, con sus respectivos tatuajes, peinados y demás parafernalia.
La ausencia de canciones desbloqueables o descargables se convierte en uno de los hándicaps inesperados del título, que insistimos se termina con bastante facilidad pese a las distintas composiciones que existen. Nótese que en cada una de ellas se ofrece un espectáculo diferente sobre el escenario, ya sea en tono dramático (Jesus of Suburbia) o en forma de boom colectivo en American Idiot, sin duda el disco en el que se ha centrado gran parte de la atención de los desarrolladores. Esto ha sido así tanto para rendir homenaje al CD (uno de los más importantes en la historia de la banda) como con motivo del estreno de una producción musical en Broadway. American Idiot ha de ser escuchado de principio a fin, como una composición completa y no en forma de canciones separadas, experiencia rica en matices, diríamos inigualable a día de hoy.
Esto en lo que respecta a la parte visual, ya que en el plano jugable (más allá de la mecánica que ya hemos comentado), el juego ofrece a los usuarios la opción de tocar varias composiciones de sus discos principales a través de un recorrido por los momentos más importantes que Green Day ha protagonizado a nivel mundial. Hay que tener en cuenta que el estilo musical de esta banda se centra principalmente en el denominado punk revival', que parte de la base del punk con toques de rock. Concretamente GD se ha caracterizado por llevar este estilo un paso más allá creando el denominado punk opera', con el que pretenden añadir profundidad instrumental a las composiciones rápidas, con relativamente pocos punteos. Su estilo evoluciona notablemente a medida que pasan los años, de ahí que 21st Century Breakdown sea quizás el más complejo de todos, con variaciones a medida que avanza la melodía.
Con esto se abandona la tendencia cambiante de The Beatles para enfocar las canciones desde una perspectiva similar a la de Metallica (salvando las distancias entre ambos grupos), con la diferencia de que el comienzo de Dookie en nivel Experto es bastante exigente en guitarra (no tanto en bajo, medianamente aceptable con la batería), donde el grupo parece destacar por encima de cualquier otro elemento. Los que echen de menos el rock duro o se sientan atraídos por las composiciones de antaño, con mucho punteo, solos y demás, harían bien en mirar hacia otro lado durante las 5 o 10 primeras melodías que suenan, un tanto repetitivas en cuanto a la estructura que ofrecen. Después el nivel de calidad crece de forma cuantiosa, a la par que los miembros del grupo alcanzan la madurez artística. Rock Band: Green Day crece y explota con las mejores canciones, y ejemplos los hay a mares.
Lo cierto es que para la estructura de un grupo compuesto por tres miembros se consigue una armonía impresionante tanto a nivel vocal (donde se ofrece la posibilidad de cantar a tres voces, al igual que en The Beatles, en otra seña de la evolución) como instrumental. La dificultad aumenta paulatinamente a medida que el estilo del grupo evoluciona, llevándonos del punk puro y duro hacia el rock más complejo y actual. Lo más destacable en este sentido es la variedad de estilos: lo mismo toca imitar una guitarra española en F.O.D que tocar cuatro o cinco riffs distintos en Before the Lobotomy (nosotros nos quedamos con la armonía de Peacemaker, espectacular canción, muy bien llevada al aspecto virtual de Rock Band). En este sentido sucede algo parecido a lo visto en anteriores títulos de Rock Band; puede que la premisa de la banda no sea atractiva a primera vista, pero la mecánica se enfoca de forma progresiva, para que el usuario que conozca al grupo lo disfrute, y el que no, pueda disfrutar de él aprendiendo de sus mejores actuaciones.
Rock Band: Green Day no deja de ser un Rock Band al uso que sigue el estandarte impuesto por su antecesor, variando el nivel creativo - artístico, basando la atención del jugador en la variedad de las canciones que se ofertan. A continuación ofrecemos el tracklist completo de las 47 canciones que se ofrecen, además del DLC que ha aparecido y que será compatible con este título si se ha adquirido previamente. Se podrán jugar tanto en solitario como en conjunto, offline u online, como suele ser habitual en los videojuegos de simulación musical que aparecen en nuestros días.
Dookie (1994)
Milton Keynes
American Idiot (2004)
Warning (2000)
Nimrod (1997)
Insomniac (1995)
Contenido descargable (no incluido)
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.