StarCraft II: Wings of Liberty, Impresiones
Con una beta multijugador en todavía en curso, Blizzard nos enseña en exclusiva para España el modo campaña de StarCraft II: Wings of Liberty. El lado Terran del conflicto desde la armadura de los Marines bajo el mando del antaño héroe, ahora comandante rebelde, Jimmy Raynor. Jugamos a 11 de esas 28 misiones que prometen ser una experiencia única en cada una.
*Aviso: El texto puede contener detalles sobre la historia revelados por Blizzard, que algunos lectores pueden interpretar como spoilers
Una gigantesca estatua de un Orco montando un lobo de guerra, maciza, 5 toneladas de puro metal, preside el campus de Blizzard en Irvine, California, un santuario para miles de aficionados en todo el mundo. El interior de los edificios está recubierto de arte de más de dos décadas de videojuegos. En la recepción podemos ver bocetos de Diablo, óleos de Warcraft, un busto del malogrado StarCraft Ghost, y también dos peluches gigantes de World of Warcraft, entre otros. Es nuestra tercera visita al estudio y aún así, estas instalaciones siguen impresionando. Seguir los progresos del multijugador de StarCraft II y echarle un ojo a su ya prácticamente terminada campaña, es el motivo que nos ha traído hasta aquí.
Hoy mismo, o de forma inminente, Blizzard lanzará un nuevo parche para la beta, el cuarto en sus dos meses de vida. Y no será el último. Este parche implementará el 60% de las características que la versión final mostrará, especialmente el aspecto social. No es que StarCraft II vaya a convertirse en un Facebook, pero sí es cierto que ha bebido de las redes sociales para ampliar y beneficiar a su comunidad de usuarios. Canessa comentaba que la pantalla principal tendrá una parte dedicada a albergar actualizaciones, tanto de Battle.net como del propio usuario y amigos. "Imagina que te vas al trabajo, pero a la noche vas a estar disponible para jugar. Solo tienes que dejar un mensaje en esta especie de Muro que vamos implementar, y comentar que a partir de las 21:00 estarás disponible para jugar". También podremos ver las listas de amigos de nuestros amigos, para añadir a conocidos, o comparar los logros desbloqueados. Y es que este parche ya añade el sistema de logros a SC2. De una forma muy similar a la de World of Warcraft, con centenares de ellos, logros múltiples, y la posibilidad de añadir a nuestro perfil aquellos de los que estemos más orgullosos. Por cierto, los logros de la beta no serán los finales, que parece se los están reservando.
El desértico planeta Mar Sera, es la primera parada para Raynor. Las fuerzas imperiales están intentando aplacar un movimiento insurgente que sería de gran ayuda para la causa de los Raiders. Liberation Day es el nombre de esta primera misión, donde controlamos a Jim Raynor en persona, enfundado en su negra armadura, al mando de un escuadrón de Marines espaciales, avanzando por las calles de la capital. Los objetivos son claros, eliminar a los soldados de Mengsk, rescatar a los insurgentes -que se unirán a nuestro pelotón, lanzando cócketeles Molotov-, y consumar la rebelión del planeta destruyendo la base imperial. Como objetivos secundarios tenemos eliminar los hologramas del emperador, a través de los cuales difunde su propaganda.
La cantina, el bar del Hyperion, es un lugar agradable: tiene su barra para pedir copas, una striper para entretener a la vista, una máquina recreativa, un jukebox con rock de los 60 -The Blasters - Firebird, Sweet Home Alabama, Romeo Delta...- y será el lugar donde se deje ver el enlace con otros grupos mercenarios. Podremos contratar los servicios de éstos comprando su contrato, tras lo cual se incorporan a nuestro ejército rebelde. En total hay ocho grupos, de los que vimos cuatro: War Pigs, Devil Dogs, Hammer Securities y la Compañía Espartana, cada uno con sus características especiales, ya que además de la experiencia, cuentan con equipo modificado, más letal -armaduras de Marine, Firebats, Marauders o tanques de asedio, respectivamente-. En combate, entran en acción inmediatamente. Tras seleccionarlas, se despliegan en el acto, ya que no requieren entrenamiento como el resto de unidades. Son caras, pero merecen mucho la pena, por eso tenemos un límite de escuadrones de mercenarios por misión.
Por último, el laboratorio, lugar donde se trabaja en investigación y desarrollo, para mejorar la tecnología del ejército. Blizzard ha añadido esta sección, en palabras de Dustin Browder, para "dotar al jugador de una mayor capacidad de elección y control sobre las unidades, y hacerlo un poco más independiente del diseñador, a la hora de dirigir hacia dónde quiere llevarlas". Estas mejoras se desbloquean mediante puntos de investigación, que se obtienen completando objetivos específicos en las misiones. "Créeme, no son nada fáciles y están pensados a conciencia, como por ejemplo, tumbar a un Brutalist Zerg en un tiempo determinado, no morir en el intento, y a la vez no dejar de completar el resto de desafíos. Pero la recompensa merecerá la pena". Cada cinco puntos de investigación obtenidos, desbloquearemos una mejora en la hélice del ADN de la especie desde la que le hayamos obtenido dichos puntos, Protoss o Zerg.
Una vez escogida la mejora que incorporamos, entre dos opciones dadas, la descartada se perderá para siempre. Por ejemplo, el nivel 2 de los Protoss nos da a elegir entre Depósitos Orbitales, depósitos de suministros que se construyen en el acto -los descargan-lanzan desde el aire- o micro filtros, con los que las refinerías producen un 25% mas de gas Vespine. Algunas de ellas son muy muy valiosas. La última mejora Protoss nos abre la puerta del Orbital Strike, con el que desde el Hyperion se lanzarán unas vainas conteniendo un contingente de Marines espaciales, como refuerzos instantaneos. La última Zerg desbloquea el Hive Mind Emulator, un control mental permanente para unidades Zerg -brutal- o el Psi Disrupter, que ralentiza la velocidad de desplazamiento y ataque de todos los Zerg cercanos. La única pega que le vimos a esto es que pese a ser, en teoría, mejoras que se obtienen de las especies rivales, las unidades que obtienen de ellas no tienen un diseño mixto, de híbrido Terran-Protoss o Terran-Zerg, que habría sido un añadido interesante en su aspecto.
Blizzard también ha puesto empeño en no alienar a futuros jugadores de StarCraft II que se sientan abrumados por la profundidad y opciones estratégica del título. Un completo tutorial en vídeo a cargo del Adjutant nos mostrará aspectos tan básicos como interfaz, control de la camara, movimiento, combate, construcciones, recolección, producción, suministros o entrenar unidades. También será posible consultar el árbol tecnológico Terran, con todos los edificios que podemos levantar y las tropas que producirán. Y si con todo esto aún queremos ir paso a paso y entrenar para el online, podemos emular una partida PVP con la opción custom game, donde configuraremos la IA al gusto.
La siguiente que se presentó fue Cutthroat, en Deadman's Port, un planeta largamente conocido por ser refugio seguro para piratas y contrabandistas que buscan escapar de la vigilancia de la frota de defensa Dominion. El objetivo es encontrar al coronel Orlan. En Safe Haven debemos proteger la colonia Terran allí. Pese a su importancia, la proximidad del planeta al territorio Protoss ha llevado al traste a los intentos de colonizacion Terran. Tendremos que proteger el asentamiento de un virulento ataque. Y por ulitmo, en The Dig tuvimos que recuperar uno de estos importantes y arcanos artefactos Xel'Naga en el planeta Xil, uno de los primeros lugares con herencia de esta raza superior. El artefacto está en el interior de un monasterio protegido por una puerta acorazada con 6 capas de la más dura aleación conocida, casi infranqueable. Para tal tarea contamos con equipamiento a la altura: un láser perforador que Browder calificaba bromeando como "el dedo de Dios" ya que evapora literalmente a cualquier unidad enemiga con su simple contacto. Con él deberemos taladrar la puerta mientras defendemos la base y protegemos el cañón, que podremos podemos usar a nuestro favor para eliminar a los Protoss más poderosos. Es básicamente una misión de asedio.
Luchar contra un ejército Dominion a la vez que liberamos civiles rebeldes, rescatar supervivientes de una colonia, obtener uno de estos artefactos en medio de una batalla Protoss - Zerg sin ser detectados, mediante la infiltración y sin usar la fuerza bruta, recolectar minerales en un planeta que se inunda por ríos de lava cada cierto tiempo, defender posiciones a la espartana contra un ejército muy superior en número, pero con ventaja en la posición y protegidos por búnkers, asaltar un tren, o aguantar hasta ser rescatados en un planeta donde una especie de terran - vampiro que son carbonizados al contacto con el sol nos atacarán por las noches. Sobre el papel suena fantástico. Veremos si finalmente Blizzard consigue su objetivo.
Otros detalles que hemos podido conocer es que el juego cuenta con un sistema de guardado automático de la partida cuando superamos un momento clave en la misión, para evitar frustraciones, que la campaña durará entre 20 y 60 horas, dependiendo del nivel en que queramos completar todos sus objetivos, que cuenta con 13 minutos de secuencias cinemáticas generadas por el reforzado departamento CG de Blizzard, y otros 32 minutos de escenas construidas por el motor del juego y que los contenidos de la edición de coleccionista incluyen el libro 'El Arte de StarCraft II: Wings of Liberty', una memoria USB réplica de la placa de Marine de Jim Raynor que contendrá el primer StarCraft y Brood War al completo, un DVD con 'más allá de las escenas', la banda sonora original, el número cero de la serie de cómics, una mascota Thor para World of Warcraft, una unidad Thor modificada y contenido descargable exclusivo para Battle.net. Todo ello por 100 dólares.
StarCraft II: Wings of Liberty
- Estrategia
Vuelve todo un clásico, el más popular de los juegos de estrategia en tiempo real. Después de nueve años levantando pasiones, la secuela llega para recoger el testigo y continuar con el legado de Blizzard.